Un millón de pesos gastó hace tres años Macarena González para arreglarse la dentadura en la Clínica Dental Plaza Vergara, ubicada en el Portal Álamos de Viña del Mar. Sin embargo, el tratamiento resultó ser una estafa y con rapidez González logró darse cuenta que una de las personas que la atendía no era un ortodoncista, sino un técnico dental.
Al constatar la situación y el daño provocado a su salud bucal, la estudiante de 20 años hizo una denuncia ante la Secretaria Regional Ministerial (Seremi) de Salud. Luego de acoger e investigar la moción, la autoridad sanitaria resolvió caducar la autorización del recinto y prohibir su funcionamiento dadas las irregularidades detectadas en el proceso.
"En la clínica me atendió una persona que no era ortodontista, sino una asistente y consultado con otros especialistas me dijeron que el tratamiento que se había realizado no estaba bien y había dejado problemas en la mandíbula. Me di cuenta porque tenía que sacarme la muela del juicio y ahí me dijeron otros doctores que mis frenillos no estaban bien colocados y a tres años y medio de tratamiento esto debiese estar bien hecho y no fue así", precisó González.
No conforme con el análisis, la joven estudiante consultó a siete especialistas más, quienes corroboraron que mucha gente había derivado a especialistas, luego de recibir tratamientos erróneos en la clínica viñamarina.
cierre
En pocos minutos la autoridid notificó la medida, que no fue entendida por los pacientes, quienes aseguraron no haber tenido nunca una complejidad en el servicio.
Entonces, la seremi de Salud explicó a los pacientes: "Vamos a clausurar la clínica por varios motivos (...) como por ejemplo, ejercicio ilegal de la profesión, negligencias, yo les pido que no sigan esperando y que puedan abandonar", dijo la seremi María Graciela Astudillo.
"Señorita, disculpe, pero qué va a pasar con los pacientes porque yo tengo a mi nieta (atendiéndose) aquí hace 4 años ", dijo una de las pacientes, Ivonne Valdovinos. A ella la autoridad le que respondió que "eso se lo tiene que preguntar al representante legal de la clínica", quien ayer no estaba presente en el proceso de clausura.
FISCALIZACIONES
Los antecedentes fueron determinantes para que la autoridad de Salud caducara el recinto que puede volver a funcionar si se corrigen las irregularidades de negligencia, práctica ilegal de la profesión y malas prácticas.
"Provocaron daños irreversibles a la salud dental de los pacientes, en un caso de ortodoncia las piezas dentales en vez de alinearse, como se busca, quedaron deformadas y eso es casi irrecuperable"
Seremi de Salud caducó la autorización sanitaria para funcionar, lo que se puede revocar si la clínica subsana irregularidades.
" El problema lo tengo a nivel de mandíbula, tengo espacio entre los dientes y no tengo la línea media, los caninos no cumplen la función y las muelas no trituran bien las comidas"
Dentro de las fiscalizaciones personal de la Seremi detectó que un técnico hacia procedimientos de ortodoncista.
La clínica dental, tras cuatro años de funcionamiento, presenta tres sumarios sanitarios por diversas denuncias.
Katherine Escalona M.