Dueña de joyería: 'Me dejaron con los brazos cruzados'
villa alemana. Por cuarta vez en los últimos doce meses, delincuentes ingresaron al local Jenny de calle Blanco y sustrajeron botín de $ 80 millones.
emv
'Estoy destruida, me dejaron con los brazos cruzados, se llevaron todo', lamentaba ayer Jenny Serey, la dueña de la joyería Jenny tras descubrir que un grupo de delincuentes irrumpió durante la madrugada en su local de Av. Blanco, en Villa Alemana, y sustrajo relojes, joyas y artículos, por un monto superior a los 80 millones de pesos.
Es la cuarta vez en los últimos 12 meses que el tradicional establecimiento del centro de la comuna sufre un robo. Para Serey, la forma de ingresar por el techo, el uso de oxicorte para abrir las cajas fuertes y la sustracción de los objetos de mayor valor en una acción tan rápida, la hacen sospechar de que se trata de los mismos responsables de hechos anteriores. Ello la indigna, reconoce, porque en esa oportunidad, al menos uno de ellos fue detenido.
'La vez anterior pillaron a los tipos, que eran de Santiago; uno quedó preso, pero como le ponen abogado defensor salió', relata la comerciante, quien comenzó hace 34 años con una pequeña joyería en la calle Santiago, la que luego trasladó hasta la avenida principal de la comuna y de ahía, hace poco más de un año, a la calle Blanco.
El golpe, reconoce Jenny Serey, fue más fuerte que ocasiones anteriores: 'Esto es lo que sé hacer, mis hijos están en la universidad, tengo gente trabajando conmigo, entonces no puedo abandonar esto', comenta la comerciante.
También apunta a los problemas de seguridad que surgen en el sector de su joyería, debido a la falta de cámaras de televigilancia. 'Aquí estamos en la selva, para que los delincuentes entren y entren, y nosotros, que somos los que trabajamos y pagamos impuestos, patentes y todo lo que hay que pagar, nadie nos asegura nada', recriminó con amargura la comerciante.
A ello replicó el alcalde, José Sabat, quien reconoció que las cámaras de televigilancia adquiridas por el municipio serán instaladas solo una vez que concluyan las obras de construcción del nuevo cuartel de Carabineros, en el centro.
'Hemos comprado 38 cámaras de televigilancia -que son mucho menos que en Santiago-, de alta tecnología, de alta resolución y que serán instaladas una vez que se termine la construcción del cuartel de carabineros', explicó el jefe comunal, quien estimó que los dispositivos ayudarán los asaltos y robos en el sector céntrico, aunque aclaró que 'no son muchos'.
'Se espera principalmente que va a aminorar esta sensación de inseguridad', dijo Sabat. Argumentó que una de las ventajas de las nuevas cámaras será su nivel tecnológico: la alta definición de las imágenes que capten los dispositivos permitirán identificar de mejor forma a los responsables de delitos y podrán usarse como medios de prueba más efectivos en los procedimientos judiciales que surjan en cada caso.
'Son los suficientemente probatorios para poder condenar a un individuo, porque la imagen es muchísimo más nítida', dijo categórico el alcalde Sabat.
Sin embargo, el jefe comunal villaalemanino apuntó también a la responsabilidad de los legisladores, a quienes hizo un llamado para que generen leyes que sean más drásticas con los reincidentes.
'Con la blandura con que se actúa hoy día en los distintos cargos que le caen a aquellos que transgreden la ley no son suficientes', advirtió José Sabat.
De allí que pidió a las autoridades legislativas la tramitación de una ley de 'tolerancia cero' para los reincidentes que tenga una efectividad similar a la reciente legislación sobre consumo de alcohol antes de conducir.