Ganadores de "Cuéntame Valparaíso": el salto de la ciencia a la escritura
Literatura. Uno de los triunfadores es programador y el otro es una estudiante de Medicina.
El pasado 29 de octubre se cerraron las votaciones para elegir al relato favorito del público de la sexta versión "Cuéntame Valparaíso". Stephanie Elligque, con su trabajo "Valleparaíso", consiguió 248 votos y se alzó como la gran ganadora, según se dio a conocer ayer en la ceremonia de premiación del concurso organizado en conjunto por la Universidad de Valparaíso (UV) y este Diario.
En la ocasión, además, se entregó el premio al mejor cuento en categoría Escolar que lo recibió el alumno de colegio Champagnat de Villa Alemana, Tomás Soto, con "Un niño en la calle"; mientras que en apartado Libre, el triunfador resultó ser el programador Luis Alberto Pando Torres por "Carpe diem"; y en la de Puerto, la estudiante de Medicina de la UV, Andrea Muga, por su relato "Él".
Dos maneras
Precisamente estos dos últimos tienen una particular historia en torno a la escritura. Pando, por una parte, es un porteño de corazón que le gusta mucho la ciudad y que siempre escribe, y tenía deseos de mostrarle sus cuentos a un jurado especializado que los pudiera evaluar. "Esa es una de las cosas más bonitas", asegura.
Es tanta su pasión por las letras que, incluso, participó en la segunda versión de "Valparaíso 100 palabras", donde obtuvo una mención honrosa. "Obviamente, este premio significa un aliciente para mí", comentó el programado, quien considera que no hay diferencias tan taxativas entre el muno humanista y matemático como en el que él se codea, porque como él mismo dice "el ser humano es integral".
Además, aprovechó la ocasión para hacer un llamado a los jóvenes "que tengan sus sueños, que nunca dejen de creer, porque quizás sean utopías, pero a veces las utopías se cumplen".
Por otra parte, se encuentra Andrea Muga. La estudiante de medicina acaba de llegar de Guatemala, hasta donde viajó para participar en el X Congreso Latinoamericano de Médicos Escritores. Su posibilidad de acceder a este encuentro fue gracias a un concurso organizado por el Colegio Médico y la Agrupación Sueños -que integra a los médicos escritores de Chile-, y en el que participaron estudiantes, internos y becados pertenecientes a universidades de todo el país.
"Siempre he escrito", confiesa Muga, agregando que "para mí la escritura ha sido una forma de liberar cosas, pero no solamente tensiones": explicando que "cuando uno piensa, siente algo normalmente hace un filtro que está dado por la corteza prefrontal. Entonces dices esto no lo voy a decir, no lo voy hacer, no lo voy a sentir, esto es malo. Y en mi caso, yo uso la escritura como una forma de hacerle un bypass a la conciencia", es decir, "uno en un cuento puede declarar amor eterno, decir sus secretos más íntimos y es un juego. Tienes permiso para hacerlo".
Respecto al haber ganado la categoría, sostiene que es "un reconocimiento enorme" sobre todo porque es capitalina de origen, "pero me vine a estudiar acá, y me enamoré de Valparaíso. Mi idea es terminar acá, quedarme acá, devolver los años que tengo que devolver de la beca acá y seguir viviendo, ojalá arriba de un cerro con vista al mar", afirma.
Los cuatro cuentos fueron seleccionados de entre más de 2.800 relatos breves que llegaron al concurso, el cual se encuentra auspiciado por Puerto Valparaíso; IST; Caja 18 y Biblioteca Severín. Además, cuenta con el patrocinio de la Municipalidad de Valparaíso.
Colaboran Metro de Valparaíso, radio Digital, Kumon y compañía OANI. Esta último transformó los cuatro cuentos ganadores en pequeñas obras de teatro dentro de cajas; mientras que la Escuela de Diseño de la UV realizó las ilustraciones para las gigantografías.
"Obviamente, este premio es un aliciente para mí. (Y hago un llamado a los jóvenes) que tengan sus sueños, que nunca dejen de creer"
"En mi caso, yo uso la escritura como una forma de hacerle un bypass a la conciencia"