Gendarmería suma 84 traslados debido a violencia en la cárcel
justicia. 60 reos de alta peligrosidad fueron derivados a otras unidades.
Los diez homicidios registrados durante el presente año en el Complejo Penitenciario de Valparaíso han generado diversas medidas por parte del alto mando de Gendarmería. Tras la remoción del alcaide y el último crimen ocurrido el sábado pasado, la institución ha realizado el traslado de 60 internos de alta peligrosidad a otros penales del país, además de la derivación de 25 internos a la Unidad de Alta Peligrosidad. Entre las medidas que buscan el mayor resguardo de la población penal, el director regional de Gendarmería, Ricardo Quintana, confirmó la llegada de nueva dotación al penal porteño, a objeto de redoblar la vigilancia en todos los sectores del recinto.
El coronel Quintana detalló que el traslado de 29 internos a otras unidades, efectuado la tarde del lunes, obedece a una "programación y de identificar a la población penal que podría tener algún grado de distorsión, por el alto grado de compromiso delictual y ser distorsionadores del régimen interno por su liderazgo negativo".
Los reos permanecían en los módulos 104, 113 y 114, los más conflictivos del penal. El último de los hechos de sangre se registró el pasado sábado en el módulo 113, donde una pelea entre dos reclusos culminó con un apuñalado que luego falleció.
Según detalló la autoridad regional, los traslados buscan "maximizar los niveles de seguridad y control al interior del complejo".
El coronel Quintana, quien asumió la jefatura de Gendarmería el 26 de junio de este año, detalló que durante su gestión se han registrado cuatro muertes, y no descarta que antes de fin de año existan nuevos traslados. Los módulos más conflictivos serán reforzados con mayor dotación de funcionarios en los patios, personal de trato directo y del área técnica, para minimizar los riesgos en su interior.
El alcaide de la Cárcel de Valparaíso, comandante Tito Barriga, añadió que los traslados buscan "reforzar la seguridad del penal con nuevas medidas, al derivar a otras unidades a internos de alto compromiso delictual y peligrosidad. Lo que se hizo (lunes), con apoyo de grupos especializados de la capital y nuestros, tiene por finalidad de evitar el riesgo que comprometían dentro del recinto, además de bajar los niveles de conflictividad y descongestionar los módulos".