El desencanto en el barrio Puerto
Los residentes del barrio Puerto de Valparaíso están aburridos de muchos planes pero sin acción. Es una de las frases del flamante administrador municipal del sector, el abogado Luis Rivera, al referirse a la sensación que tienen los habitantes en relación con el abandono que experimenta desde hace años.
Este barrio fundacional de la ciudad ha experimentado una continua decadencia, que tuvo su punto culminante luego de la explosión e incendio de febrero de 2007, que destruyó el denominado palacio Subercaseaux y dañó severamente otros inmuebles del área, aparte de las lamentables víctimas fatales que dejó. Asimismo, motivó el cierre de varios establecimientos comerciales, aunque algunos han sobrevivido con la ayuda prestada.
Posteriormente se registró el terremoto del 2010, que entre otras consecuencias significó el cierre del Mercado Puerto, que era una de las actividades dinamizadoras del sector, al tiempo que una fuente de trabajo para muchas personas.
Desde la explosión y el terremoto, que provocaron un despoblamiento de esta área histórica de la ciudad, se han barajado muchas ideas y alternativas, todas ellas muy loables por cierto, pero que ninguna se concreta. El tiempo avanza, y el deterioro y abandono se acentúa, con su secuela de pobreza, delincuencia y suciedad.
De todas las iniciativas, la única que ha prosperado fue la instalación de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Valparaíso, a una cuadra de la plaza Sotomayor, que le ha dado mayor dinamismo a la calle Serrano con la presencia de alumnos, profesores y funcionarios. Del resto, solo anuncios y promesas, que es lo que tiene desencantados a sus habitantes y por qué no decirlo, al resto de los porteños.
Es probable que en un plazo no muy lejano, esta universidad comience a cristalizar su proyecto de instalar en el área su Instituto de Neurociencia, en un terreno baldío detrás de La Matriz, donde se efectuó la actividad inaugural de Puerto Ideas, no obstante que algunos de los asistentes fueron víctimas de lanzazos tras la ceremonia, debido a la nula vigilancia policial del evento.
Es de esperar que con el reciente anuncio del inicio de las obras de la reconstrucción del Mercado Puerto, se genere un verdadero punto de partida para la recuperación de este puerto.