En un verdadero pueblo sin ley han convertido el sector de Portezuelo, pasado el embalse Los Aromos y a escasos dos kilómetros de la cuenca del río Aconcagua. O mejor dicho, en un campamento sin ley. Extractores de áridos ilegales han generado por años un grave problema ecológico en el lugar y, al mismo tiempo, han dado pie al surgimiento de actividades igualmente ilegales y peligrosas, incluso zonas de campamentos de verano. Ayer las autoridades hicieron una redada, lo que provocó una "estampida" de camioneros, maquinistas, areneros y comerciantes de estos materiales para la construcción.

Apoyados por dos patrullas de Carabineros, la Dirección General de Aguas, la Dirección de Obras Hidráulicas, Secretaría Regional Ministerial de Obras Públicas de Valparaíso y la Gobernación de Marga Marga, ingresaron por el ex Camino Internacional, a la altura de Tabolango, en la comuna de Limache, alertados por una denuncia sobre extracción ilegal de áridos, un lucrativo negocio en el que están participando reconocidas empresas del ramo que operan en la zona.

El panorama que encontraron fue desolador, con un escenario que más parecía una cantera llena de cráteres sin las más mínimas medidas de seguridad ni sujeta a normativa alguna. Ello en medio de decenas de carpas y de al menos unas cien personas, confundidas entre veraneantes que capeaban el verano junto al estero Limache y entre las propias familias de los areneros, quienes se tomaron los sitios a la espera de la llegada de los camiones en busca del preciado botín.

Usurpación por montón

De lo más a lo menos grave, la intempestiva fiscalización arrojó como resultado que en el sector de Portezuelo, por donde pasa el estero Limache antes de desembocar en el río Aconcagua en el Parque La Victoria y Colmo, se detectó al menos tres puntos o canteras de extracción ilegal de áridos. Sin el más mínimo plan de manejo de cuenca y sin pagar derechos por la actividad, son toneladas las que sacan diariamente.

Lo anterior es propiciado por al menos seis empresas, entre grandes y chicas, que incluso han dado pábulo para que pequeños areneros operen en el lugar con una "cuota menor" de extracción. Por lo mismo, el tráfico de camiones y camionetas impresiona a cualquiera.

"Hay una clara infracción a la ley y de manera contumaz. Acá vemos cómo personas inescrupulosas dañan el cauce normal del estero porque además lo que hacen es un negocio lucrativo para ellos, y terminan destruyendo el cauce y afectan el uso del agua para las personas, más aún porque cambian la distribución de las napas", sostuvo evidentemente molesto el gobernador provincial de Marga, Gianni Rivera.

"Vamos a querellarnos -prosiguió- contra todas estas personas que están haciendo extracción ilegal de áridos. La extracción tiene que otorgarla el municipio en base a una solicitud que hace a la Dirección General de Aguas y eso no ha ocurrido. Son personas que no cuentan con las maquinarias ni tampoco con los permisos necesarios para manejarlas. Tercero, son empresarios que hoy día de manera inescrupulosa envían a terceros a hacer esta extracción ilegal, escondiéndose y amparándose en algunos subterfugios legales que no vamos a aceptar… No vamos a permitir que acá se termine destruyendo el paso normal del agua… Vamos a solicitar al Consejo de Defensa del Estado se haga parte porque esto es sumamente grave".

Rivera apunta a uno de los principales daños ocasionados con el desvío del agua y la intervención del cauce. Agricultores de la zona y hasta usuarios de agua potable del Gran Valparaíso se ven perjudicado porque los flujos no llegan de manera normal.

Daño ecológico

Además del daño ecológico, económico y de aprovechamiento del recurso hídrico, la actividad ha dado pie para que camiones aljibe contratados por desconocidos, ingresen a los sectores a robar agua desde el estero Limache en zonas apozadas por el paso incesante de retroexcavadoras y bulldozer.

Esos mismos espacios, además, son usados en todo Portezuelo por bañistas para darse chapuzones en zonas de evidente peligro, exponiendo su seguridad. En esa suerte de poblado-balneario de campaña en que se ha transformado el lugar, incluso es posible ver algunos chiringuitos de venta de comida sin las condiciones de higiene necesarias. ¿Su público? Los mismos campistas y los obreros de las canteras ilegales.

Sin licencias

Durante el control policial se logró establecer que los fiscalizados eran operarios que trabajaban en la extracción de áridos por pedido de alguna empresa o mandante. Sin embargo, la mayoría ni siquiera contaba con la documentación apropiada para manejar la maquinaria especializada.

El comisario de la Tercera Comisaría de Limache, mayor Luis Reyes, sostuvo que enviarán los antecedentes recopilados ayer al Juzgado de Policía Local y que dispondrán de rondas preventivas en el sector los próximos días para detectar nuevos casos de extracción ilegal o reincidentes en el sector.

"La señal que estamos dando como Gobierno es que estamos preocupados de todo lo que tiene que ver con intervención de cauces. Hemos detectado una serie de puntos de extracción ilegales de árido en diferentes esteros y también en el río Aconcagua. Y estamos actuando para detener estas extracciones ilegales, estas intervenciones de cauce para propender a un mejor manejo del recurso hídrico, en esta región que está siendo golpeada por la sequía", manifestó el seremi de Obras Públicas, Miguel Saavedra, presente en la "redada" de ayer.

Saavedra sostuvo que tras paralizar las faenas ilegales, ordenarán a las empresas involucradas restituir el diseño natural de los cauces. Si no lo realizan, lo hará la Dirección General de Aguas con cargo a las propias empresas. Ello independientemente de las querellas que interpondrá la Gobernación de Marga Marga en los próximos días.

Entre $60 millones y $600 millones en multas podrían pagar empresas y extractores furtivos de áridos.

Al menos 6 empresas que trabajan en el rubro de los áridos han sido detectadas con sus camiones en el sector de Portezuelo.

Quienes operen faenas de materiales para la construcción deben contar con un plan de manejo, lo que no ocurrió en este caso.

Además de destruir el medioambiente, al modificar una cuenca han propiciado el robo de agua y el surgimiento de peligrosas piscinas.

Enresto Curti