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el chocolate, las papas fritas y la pizza serían "adictivos"

alimentación. Este tipo de productos generaría una dependencia que agravaría los altos índices de males como la obesidad y la diabetes.

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Muchas personas disfrutan de un buen trozo de pizza, grandes porciones de papas fritas y, como postre, barras o helados de chocolate dulce. Sin embargo, estos productos altamente procesados pueden ser adictivos, a propósito del incremento de la obesidad en la población mundial.

Así lo afirma un estudio realizado por la Universidad de Michigan, que sigue la línea de otras investigaciones que aseguran que la comida rápida y procesada puede provocar adicción y, con ello, una fuerte dependencia que puede derivar en obesidad y diabetes.

A juicio de los autores, este es uno de los primeros estudios para examinar de manera específica los alimentos que pueden estar implicados en la "adicción a la comida", fenómeno de creciente interés para los científicos y los consumidores.

Esto, en atención a las nuevas cifras publicadas en enero por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según las estadísticas de 2014, más de 1.900 millones de adultos de 18 o más años tuvieron sobrepeso, de los cuales más de 600 millones eran obesos.

primeros pasos

De acuerdo a la investigación, estudios previos en animales concluyen que los alimentos altamente procesados, que contienen carbohidratos o grasa añadida (como la harina blanca y el azúcar de mesa) desencadenan una conducta alimentaria similar a la adicción.

En tanto, los estudios clínicos en seres humanos indican que algunas personas cumplen ciertos criterios para la dependencia de sustancias contenidas en la comida.

Los alimentos altamente procesados son conocidos en general por ser sabrosos y generar preferencias en el consumidor. Sin embargo, se desconoce si estos tipos de alimentos pueden provocar alguna respuesta asociada a la adicción, ni se sabe qué alimentos específicos producen estas respuestas.

En cambio, los alimentos no elaborados o sin componentes añadidos, como el arroz integral y el salmón, no se asociaron con la conducta alimentaria similar a la adicción.

El estudio indica que las personas con síntomas de adicción a la comida o con un alto índice de masa corporal (IMC) reportaron más problemas con los alimentos procesados, lo que sugiere que algunos pueden ser particularmente sensibles a las propiedades "gratificantes" de estos alimentos.

"Si las propiedades de algunos alimentos están asociados con una alimentación adictiva para algunas personas, esto puede influir en las pautas de nutrición, así como en las iniciativas de las políticas públicas, como la comercialización de estos alimentos a los niños", advirtió Erica Schulte, estudiante de doctorado de psicología de la Universidad de Michigan y líder del estudio.

"Este es un primer paso hacia la identificación de determinados alimentos y sus determinadas propiedades, que pueden desencadenar esta respuesta adictiva", añade Nicole Avena, perteneciente a la Escuela de Medicina de Ichan en el Monte Sinaí, Nueva York, y coautora del estudio

El equipo sostiene que las investigaciones futuras deberían examinar si los alimentos adictivos son capaces de desencadenar cambios en los circuitos del cerebro y en el comportamiento, con reacciones similares al consumo de drogas.

"Esto podría ayudar a cambiar la forma en que abordamos el tratamiento de la obesidad. Puede que no sea una simple cuestión de 'recortar' ciertos alimentos, sino más bien, la adopción de los métodos que se utilizan para reducir el tabaquismo, alcohol y uso de drogas", subraya Avena.

Los productos integrales surgen como una buena alternativa para reemplazar los alimentos derivados de harinas refinadas. Por ejemplo, la harina integral posee tres veces más fibra, un alto contenido de vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales. En cuanto al chocolate, los especialistas recomiendan barras que contengan altos porcentajes de cacao. También existen chocolates endulzados con sustitutos del azúcar como la stevia.

Pamela De Vicenzi