Durante este Festival se ha convertido en uno de los miembros del jurado más cercano a sus fanáticos y seguidores. Día a día, a través de su cuenta de Twitter, Nano Stern relata todas las copuchas que suceden desde su privilegiado palco en la Quinta Vergara; así como también las actividades paralelas del certamen, convirtiéndose en una revelación de la red social.

Tanto así que ayer, en la mañana, logró convocar a unas cincuenta personas a la Avda. Perú, las cuales pudieron disfrutar de algunas de sus canciones y también de la conversación que tuvo con Emol. En camino a un almuerzo con el jurado, conversó con este Diario sobre su actividad tuitera.

- Durante estos días ha estado bien activa tu cuenta, ¿por qué tuiteas tanto?

- Me gusta el hueveo, compartir lo que está pasando y es divertido. Se genera un diálogo con la gente y eso me gusta. La posibilidad que te dan las redes sociales de conversar y estar en contacto de cómo se está viviendo esto, que es tan mediático... en el fondo lo interesante es saltarse a los medios, porque estoy en primera fila y estoy dialogando con gente que está en la casa, viéndolo cagado de la risa. Es muy bacán, es como decir para qué tanta televisión y tantas luces, si al final somos todos personas. Nos permite volver a relacionarnos de una forma mucha más humana, que es una contradicción, pero muy interesante.

- Tienes una relación bien cercana con tus seguidores y en los últimos días sumaste más.

- Obviamente, esto te da una exposición muy grande. Tampoco es que yo sea el rey del Twitter y no me interesa serlo para nada, pero en estos contextos creo que es una herramienta súper power de conectarse con la gente. Es curioso como una cosa tan tecnológica, y a veces tan frívola, puede tener una implicancia tan profunda en cómo nos relacionamos los seres humanos.

- ¿Y eres tú el que está constantemente escribiendo?

- No, también tengo un equipo detrás… Es lindo compartir esto con la gente. Todos andamos a cuesta con un teléfono hoy por hoy, y sobre todo en estas situaciones. No quería dejar pasar el estar ahí y aportando a reírse un poco. Además, vale decir, muchos de los shows no son de mi preferencia, entonces estoy ahí sentado y prefiero 'vacilarla' de alguna manera.

MIEMBRO DEL JURADO

- Bobby Kimball obtuvo un rojo el martes y Arturo Domínguez, el chileno, tampoco le ha ido bien. ¿Eso habla de la transparencia de ustedes como jurado?

- Sí, porque estamos dejando de lado las posibles parcialidades que podemos tener porque él fuera famoso o porque una canción es de nuestro país y estamos evaluando simplemente lo que está sucediendo sobre el escenario... Aunque a la gente le cargue nuestro rol, uno no es jurado para que a la gente le guste cómo votamos, sino que para que nosotros seamos lo más honestos posible.

- ¿Qué te parece que la competencia salga recién en la madrugada?

- Me parece que es propio de cómo se plantea el espectáculo y hay muchas cosas pasando y hay muchos artistas consagrados que la gente quiere ver y quizás el Festival podría partir más temprano porque no veo razonable que se acortaran los shows, viene gente que vende 15 mil entradas y el público quiere ver un concierto entero y son varios al día, entonces eso se me ocurre.

- ¿Estás disfrutando de los frutos del Festival?

- Todavía no, porque todavía estoy muy metido en esto y no hablaría de frutos. Estoy disfrutando el proceso y me parece que la vida sería muy triste si uno se concentrara en los frutos y no en el trabajo. Siempre me ha dado mucha alegría trabajar, me encanta mi oficio y por estos días mi oficio se ha abierto a otras cosas y no solamente a la guitarra y las canciones, sino también a participar en un evento como este y lo tomo como un desafío también, es algo nuevo para mí. Voy cinco pasos para adelante y dos para atrás y voy aprendiendo, pero me lo tomo con calma y disfrutándolo.

"Todos andamos a cuesta con un teléfono hoy por hoy, y sobre todo en estas situaciones. No quería dejar pasar el estar ahí y aportando a reírse un poco"