"Hay mucha inquietud por este retraso en la descentralización; hay que recuperar el tranco"
"Llegó la hora de recuperar el tranco", advierte el senador Alejandro Guillier tras reconocer que la agenda mediática y la división transversal que genera la descentralización ha retrasado más de la cuenta la reforma que envió la Presidenta Michelle Bachelet a fines del año pasado, aunque sin urgencias. Todo esto, recalca, es más que suficiente para reimpulsar la bancada regionalista.
- ¿Le preocupa el poco avance de estos proyectos?
- Todos los escándalos de corrupción, negocios incompatibles y todo esto que está afectando al país ha frenado un poquito la pelota de los cambios institucionales que está impulsando la Presidenta Bachelet. Pero dicho eso, el tema de la regionalización tiene adhesiones y oposiciones transversales. No todos están convencidos de la conveniencia de un proyecto de cambio profundo. Por tanto, eso explica que el proyecto de reformas que envió el Gobierno a tramitación al Congreso a fines del año pasado tenga una serie de debilidades y confusiones.
- ¿Como cuáles?
- Establece un hecho histórico nuevo respecto a la elección democrática de los intendentes y finalmente no radica en ellos la responsabilidad del gobierno regional, sino que más bien lo deja como un organismo encargado de la planificación estratégica, de la presidencia del Core, del manejo de ciertos fondos del FNDR, pero el gobierno de la región pareciera que pasa a manos de este gobernador regional que aparece como una figura fortalecida. Entonces, se fija una especie de dualidad de dos autoridades que al final lo único que va a pasar es que van a confundir a la opinión pública y a la ciudadanía porque no establece un liderazgo claro ni del uno ni del otro. Lo peor es desarmar un sistema sin armar una institucionalidad evidentemente superior. Entonces, vemos un proyecto debilitado, sin mucha decisión y tampoco se le están fijando urgencias. Y estamos perdiendo tiempo precioso porque los periodos de transformación del gobierno prácticamente van a durar este año. El otro vamos a estar pendientes de las elecciones de alcaldes y el siguiente de las presidenciales. Y si no hacemos una correcta definición, incluso esto puede quitar prioridad al tema de la regionalización. Entonces, hay que fijarle urgencia y volver al compromiso político contraído en el programa de la Presidenta y en el aporte que hizo la comisión asesora por la descentralización que hizo una propuesta novedosa y audaz para reemplazar la estructura de un Estado centralizado, jerárquico y autoritario por una estructura descentralizada, democrática y participativa.
- Es decir, ¿el proyecto que envió el Gobierno no da cuenta de la visión de los regionalistas?
- Así es. El proyecto es débil y confuso, especialmente en esta figura del gobernador ejecutor, que es mucho más poderosa que la del intendente planificador.
- Pero la idea es mejorarlo en el Congreso, ¿no?
- Sí, porque un proyecto como éste, tan confuso, no va a pasar. Lo que queremos es un debate abierto.
- ¿Y por qué el Gobierno no le ha puesto las urgencias?
- La coyuntura es un factor perturbador, pero además hay sentimientos contradictorios a nivel transversal. Entonces, hay algunos que no ven este proceso con entusiasmo y confianza. Hay parlamentarios que no creen en la descentralización; tienen miedo, dicen que las regiones no están preparadas. Persisten los viejos prejuicios y prefieren un poder centralizado porque creen que se controla y fiscaliza mejor, y que no hay competencia en muchas regiones del país.
- Y usted, ¿qué piensa?
- Que están equivocados, además que las competencias se crean; y al mismo tiempo que se avanza en la reforma institucional, hay que ir creando las condiciones. Hay que romper con una cultura de 200 años de centralización. Ahora, evidentemente hay regiones más preparadas que otras y, de hecho, a partir de julio se va a empezar a poner en marcha un proceso de descentralización de funciones que hoy tienen Corfo, Sercotec y otros organismos en regiones como Antofagasta, Los Ríos y Biobío, que son regiones grandes y poderosas. Pero este es un tema que hay que pensarlo globalmente porque una descentralización a medias puede terminar confundiendo más que terminar levantando una opción.
- Esteban Valenzuela, expresidente de la comisión asesora sobre descentralización, criticó el actuar de Rodrigo Peñailillo en este tema.
- Bueno, el ministro del Interior es el que de alguna manera da la conducción y el liderazgo del Gobierno apoyando al Presidente de la República, y la Presidenta ha sido muy enfática y decidida en sus discursos. Por parte de ella yo creo que hay una decisión. Hay que ver cómo esto se traduce en tiempos cortos con sentido de urgencias y en una agenda que se priorice, porque la descentralización toca muchos temas que vamos a discutir. Tiene que ver con estructuras tributarias, con sistema electoral, con transferencia de competencias, con todo. Incluso con la reforma educacional.
- ¿Pero ve a Peñailillo convencido de la descentralización?
- Hace tiempo que no converso con el ministro, así que no sé dónde tiene puestas las prioridades. Yo solo analizo los hechos, y el proyecto que llegó al Congreso nos despertó muchas inquietudes.
- Valenzuela afirmó que los grandes partidos están boicoteando la regionalización...
- Es que en todos los partidos están las fuerzas cruzadas. Hemos estado conversando la necesidad de reflotar la bancada regionalista y tratar de ser más operativos en términos de empezar a trabajar proyectos y empezar a difundir las ideas con las que nosotros entendemos la descentralización. Todo eso se está poniendo en la mesa porque, si bien a todos nos distrajo lo que ha pasado en la relación dinero y política, a todos nos empieza a dar mucha inquietud este retraso. Llegó la hora de recuperar el tranco y volver a poner la agenda transformadora con decisión.
"No todos están convencidos de la conveniencia de la descentralización. Eso explica que el proyecto que envió el Gobierno sea débil y confuso"
"Este es un tema que se debe pensar globalmente, porque la descentralización a medias puede terminar confundiendo más que levantando una opción"