El Servicio Nacional de Menores (Sename), querellante en el caso del homicidio de un bebé de tres días de vida en una hoguera en Colliguay, solicitó al Ministerio Público la realización de una nueva reconstitución de escena, esta vez nocturna, pues a juicio de esta institución se podría evaluar de mejor manera la participación de cinco de los imputados del mediático caso denominado Secta de Antares de la Luz, considerados por la Fiscalía como encubridores y que según el Sename son cómplices del crimen.
Se trata de David Pastén, María del Pilar Álvarez, Josefina López, Karla Franchy y Carolina Vargas, quienes en principio habían sido formalizados como cómplices y luego reformalizados por el fiscal de Quilpué, Juan Emilio Gatica, como encubridores. Ellos, junto a Francisca Ceroni, desde un principio formalizada como encubridora; a Natalia Guerra, madre del bebé asesinado en la hoguera e imputada por parricidio; y a Pablo Undurraga, formalizado por homicidio calificado, eran los integrantes de la secta catastrofista liderada por Ramón Castillo, alias Antares de la Luz, que la noche del 23 de noviembre de 2012 dio muerte al bebé Jesús Guerra Guerra por considerarlo el anticristo.
DECISIÓN DE la FISCALÍA
De acuerdo a Esteban Elórtegui, abogado y director regional del Sename en Valparaíso, la solicitud fue presentada el pasado mes por la abogada del Servicio, Paulina Bórquez; sin embargo, fue rechazada por el Ministerio Público, quien lo consideró extemporánea y poco aportativa para la etapa en la que se encuentra el mediático caso.
"Vislumbrando que se iba a ampliar el plazo de investigación, y considerando que las defensas y el Ministerio Público estiman que los imputados tienen la calidad de encubridores y que nosotros estimamos que son cómplices, consideramos que sería necesario realizar una nueva reconstitución de escena para complementar la anterior y poder contextualizar de manera más fidedigna lo que han declarado los imputados. Lo que sucedió fue en horas de la noche, había una fogata, están ubicados en un espacio temporal, realizando ciertas acciones cada uno de los imputados", recalcó el director regional de Sename.
"Nosotros creemos -prosiguió Elórtegui- que si llevamos a cabo esta diligencia bajo esos parámetros que señalo sería posible evidenciar de manera más concluyente que ellos tuvieron la calidad de cómplices y no de encubridores".
Consultado por la decisión de no aceptar una nueva reconstitución de escena, el fiscal Juan Emilio Gatica recordó que la ampliación de plazo de investigar está establecida para determinadas diligencias entre las que no se cuentan la antes mencionada. Ello sumado al hecho de que fue presentada cerca del cierre formal de la investigación tras dos años de las primeras formalizaciones.
"Imagínese todo lo que hubo que mover para la primera reconstitución… No creo que cambie mucho lo que uno pueda sacar en limpio al respecto, porque básicamente lo que entiendo yo es que esta solicitud era para establecer los ruidos que se escuchaba, las distancias, en fin, pero a estas alturas no tiene mucha relevancia respecto de lo que pueda sacarse. Además que ya está fuera de plazo para pedirla y en su momento se dijo que no", manifestó el persecutor quien recordó que fue tras la primera reconstitución de escena que se solicitó la reformalización de los cinco imputados a encubridores.
El pasado mes de abril se cumplieron dos años desde el inicio de la investigación formal, y que el Tribunal de Garantía de Quilpué extendió por cuarta vez el plazo de investigar a la espera de los últimos informes periciales provenientes del hospital psiquiátrico Dr. Horwitz, y que se refieren a informes de peligrosidad actualizados de Pablo Undurraga, considerado hombre de confianza de Ramón Castillo. El quinto plazo vence el 13 de mayo y todo hace pensar que el juez Milenko Grbic otorgará un sexto periodo.
Ernesto Curti