Avances de Merval hacia Concón
El propósito es bueno: el Gobierno Regional, Empresa de Ferrocarriles del Estado, EFE, y Merval, están interesados en sellar una alianza estratégica que permita asegurar el éxito de los proyectos ferroviarios en la zona.
Buena disposición, con visión de futuro, pues es necesario rescatar los beneficios del transporte ferroviario de pasajeros y carga teniendo a la vista la creciente congestión de tránsito que se advierte en nuestras calles y caminos.
Estos buenos propósitos fueron expresados en una reunión entre el Intendente Regional Ricardo Bravo; el presidente de EFE, Jorge Inostroza; el presidente de Merval, Germán Correa y representantes del Consejo Regional.
Se dieron allí a conocer las iniciativas para una nueva conexión ferroviaria entre Valparaíso y Santiago y el mejoramiento de los servicios hasta San Antonio. En cuanto a pasajeros, se informó de los avances de los estudios para prolongar Merval hasta Quillota, reponiendo así un antiguo servicio. Pero una de las iniciativas innovadoras en las cuales se trabajará es el soterramiento de la vía ferroviaria en Valparaíso y la extensión de Merval hasta Reñaca y Concón. El costo del estudio de prefactibilidad alcanzaría a 180 millones de pesos y podría ser financiada por el Gobierno Regional, de acuerdo a lo expresado por el consejero Manuel Millones. Se requiere, entretanto, una evaluación del Ministerio de Desarrollo Social.
El proyecto es de toda lógica, pues se ajusta al notorio crecimiento de Reñaca y Concón y también a las urgentes necesidades de ordenamiento urbano general para enfrentar la señalada congestión que afecta a los accesos a esos puntos y a las calles de Valparaíso y Viña del Mar. Un sistema como Merval, que circula por vías propias y tiene gran capacidad de público, sería un decisivo aporte a nuestras ciudades incentivando el uso del transporte colectivo.
Se contemplan, con toda razón, estudios técnicos, sociales y financieros. También se debe insertar la iniciativa en los nuevos planes reguladores de Concón, actualmente en desarrollo, y de Viña del Mar, sobre el cual hay numerosas decisiones pendientes.
Además, hay una cuestión de justicia, pues mientras se invierte y se avanza en la red de Metro de la capital, es insoslayable esperar también un desarrollo consecuente en el transporte público regional.
El camino puede parecer largo, pero no se puede abandonar. Por el contrario, las autoridades locales, los representantes regionales, deben exigir avances, pues está en juego el crecimiento urbano y, en último término, pero en primer lugar, la calidad de vida de la población.