Secciones

Mesa regional PPD cierra filas en torno al intendente Bravo

POLÍTICA. Molestia del partido por falta de respaldo a la gestión de la autoridad.

E-mail Compartir

En lo que es considerado como un "guiño" a la autoridad en los momentos que su desempeño se ha visto seriamente cuestionado por los principales partidos de la Nueva Mayoría, el consejo ampliado del PPD acordó entregar su público respaldo a la gestión del intendente Ricardo Bravo.

Durante el encuentro se acordó además que, en caso que la Presidenta Bachelet lo requiera, la colectividad tendrá sus propios candidatos para ocupar la Intendencia Regional.

Trascendió que la primera carta del PPD es el alcalde de Santa María y presidente regional del conglomerado, Claudio Zurita, segunda mayoría nacional en las últimas elecciones municipales (91%). Dentro del grupo de postulables también están la consejera regional, Sandra Miranda, la seremi de Gobierno, Katherine Araya y el diputado Rodrigo González.

PROCESO INTERNO

Dicha lista se presentará en forma interna al presidente del nacional partido, senador Jaime Quintana, ya que próximo 13 y 14 de mayo, en Temuco, tendrá lugar un encuentro nacional de secretarios y presidentes regionales con la mesa nacional, para discutir los temas de índoles nacional y regional, entre ellos la intención del PPD en Valparaíso.

La directiva regional realizará una visita oficial al intendente Bravo para manifestar su apoyo en la conducción de la región, además de respaldarlo en lo que sea necesario. No obstante ello, la colectividad mantendrá su propio listado de candidatos "disponibles", siempre y cuando la Presidenta lo solicite para ocupar nuevos cargos en la región.

El secretario regional del PPD, Manuel Murillo, calificó como una "falta de respeto a la figura del intendente Bravo que cada partido quiera poner a sus representantes, cuando aún la Presidenta Bachelet no ha hecho ningún cambio en el Gobierno Regional, quitándole piso al intendente elegido por la Presidenta".

Según Murillo, "los partidos no dejaron gobernar al intendente y ven dicho cargo como un botín que se puede repartir entre sus militantes o según sus intereses personales".

El personero regional del PPD argumentó que "acá todos piden su cabeza, pero no tenemos la capacidad de gobernar. La intendencia parece más un botín de parlamentarios o de personas de la farándula política".

Aunque se daba por zanjado que un acuerdo político entre los partidos de la Nueva Mayoría permitiría al presidente del Partido Radical, Mario Pérez, asumir como nuevo presidente del Consejo Regional (Core), la mesa regional del PPD acordó "dejar en libertad de acción" a los miembros del cuerpo colegiado de dicha colectividad para el momento de la votación, fijada para mañana en el pleno. La determinación apunta al "desorden" al interior del radicalismo, donde el candidato Pérez no tiene apoyo unánime.

"Falta de respeto a la figura del intendente Bravo que cada partido quiera poner a sus representantes, cuando aún la Presidenta Bachelet no ha hecho ningún cambio"

"El cambio de gabinete llegó tarde y le faltó prolijidad"

E-mail Compartir

"Ver para creer" parece ser la consigna de José Miguel Izquierdo, analista político y exasesor del segundo piso de Sebastián Piñera, a la hora de tomarle el pulso al nuevo gabinete. Y es que "aunque las señales son buenas, porque tanto Jorge Burgos como Jorge Insunza parecen no ideologizados por el programa, la radicalidad del cambio está por verse". Esto porque si bien el sector empresarial aparece dando señales de tranquilidad con el nombramiento de Rodrigo Valdés, "desde el punto de vista del análisis político, el gobierno volvió a cometer dos errores que son bastante sistemáticos: la oportunidad con que se hace el ajuste y la desprolijidad".

- ¿En qué sentido?

- Me parece que este cambio de gabinete se hizo demasiado tarde, porque ya se instaló la crítica; se dejaron pasar observaciones sobre varios actores del gabinete y se generó también una expectativa durante 100 horas, y no 72 como se había anunciado, de que los cambios iban a ser muy profundos. Sin embargo, no hay tanto cambio respecto a la principal crisis y que es el mantenimiento en el gabinete de personas que pueden ser cuestionadas por su vínculo relacionado con el financiamiento irregular de la política. Como por ejemplo Marcos Barraza, vinculado a Arcis, y el ministro del MOP, Alberto Undurraga, con el caso Penta. Dejar abierto ese flanco me parece poco prolijo. La falta de prolijidad se nota también al haber nombrado a José Antonio Gómez en Defensa, conociendo sus dichos sobre Bolivia hace un par de años, cuando se declaró a favor de darle mar con entrega de tierra. Eso nos parece que lo inhabilita para ocupar el cargo de ministro de Defensa, en especial tomando en cuenta el uso político que se le va a dar al tema en Bolivia. Y nuevamente nos topamos con un tema de oportunidad: lo hace en medio de los alegatos de La Haya.

- ¿Cuál es la complicación de que este cambio se haya hecho tarde?

- Es que ya está instalado el cuestionamiento a la Presidenta en su conducción, el vínculo de la política con las expectativas ciudadanas y puede que finalmente sea irreversible la lesión en las confianzas instaladas en la opinión pública.

- ¿Pero un cambio de gabinete puede hacer a un gobierno subir en las encuestas?

- Sí. De partida va a tener algún efecto entre aquellos que esperaban que la Presidenta mostrara conducción porque logró centrar la agenda de debate en la profundidad de sus decisiones, en la orientación que a va a tener el resto de su mandato. Eso si lo logra. Y algún nivel de repunte puede obtener, pero muy acotado. Y vuelvo a repetir, esto está por verse.

- Burgos genera más confianza.

- Yo tengo dudas del compromiso que pueda tener Burgos en el tema constitucional…

- Pero señaló que hacía falta una nueva Carta Fundamental.

- Claro, pero el tema es el mecanismo y todo eso, y tengo miedo de cuánto se pueda jugar en esto. Dudo de su fidelidad al programa. Insisto, sí, que el estándar mínimo era dejar en el gabinete solo a personas que no estuvieran cuestionadas por los escándalos y eso no se cumplió.

- Se criticó mucho el frenesí legislativo del año pasado, ahora se señala que habrá más calma.

- Ojalá, pero todo eso está por verse. Hay que ver cuánto trabaja Jorge Insunza. Y aquí aparece otro cuestionamiento que yo hago. Bachelet tiene una incongruencia en su posición al nombrar a un parlamentario. No es el primer gobierno que lo hace, pero la izquierda cuestionó destempladamente a Sebastián Piñera por haber nombrado parlamentarios en su gabinete. Pero hoy se está haciendo lo mismo. Recordemos que ya lo había hecho con Ximena Rincón.

- En Evópoli, Felipe Kast consideró valiente que la Presidenta haya dejado fuera a su círculo más íntimo…

- Bueno, los gendarmes del programa están afuera. Solo queda la ministra Javiera Blanco. Y claramente hay un desprendimiento de las personas más cercanas y entonces uno ve también a la Presidenta más sola con dos ejes de poder importantes: Jorge Burgos y la eventual influencia de Enrique Correa, que se supone podría actuar en las sombras a través de Jorge Insunza.

- ¿Cuál es el peligro de que Bachelet se quede sola?

- Bueno, la Presidenta tiende a ser muy lenta en tomar decisiones y a no hacerle caso a su recursos de juicio, como cuando dijo que ella intuía que el Transantiago iba a tener problemas o que algo le decía que no hiciera tal cosa, pero no consideró esos elementos para tomar sus decisiones. Uno tiende a pensar que utiliza bastante la opinión de otros, pero si es así y no confía en ellos o no es cercana a ellos, se podría pensar que la toma de decisiones también va a ser ralentizada.

"Tengo dudas del compromiso que pueda tener Burgos en el tema constitucional... de cuánto se pueda jugar en esto. Dudo de su fidelidad al programa"

"Con la salida de su equipo más cercano uno ve también a la Presidenta más sola. Ella tiende a ser muy lenta en tomar decisiones y sola y sin confiar, sus decisiones se pueden ralentizar más"