Encuesta, un aporte orientador
Definitivamente, las figuras públicas regionales más conocidas son los alcaldes. Así lo revela la encuesta realizada por GfK Adimark para la Fundación Piensa. Los resultados del estudio, que cubre amplios campos sobre política y apreciación ciudadana de diversas autoridades, fue publicada en la edición dominical de este Diario y, como era de esperar, generó diversas reacciones entre los evaluados, coincidiendo algunos en que se debe trabajar más para mejorar las calificaciones ciudadanas, y otros señalando que los números que valen son aquellos que muestran las urnas que los han elegido.
En cualquier caso, es un hecho que las evaluaciones no son muy satisfactorias tanto para los parlamentarios regionales, solo uno con nota superior a 5, como para las autoridades designadas por el Ejecutivo, esto es intendente y gobernadores provinciales. Al existir ante esas figuras conocimiento público sobre su gestión, se podría afirmar que las calificaciones están basadas en opiniones fundadas.
Pero un punto importante del estudio es el conocimiento público que en cada una de las 10 comunas analizadas existe de los respectivos alcaldes. Así, las calificaciones de su labor fundamentadas en apreciaciones personales, justas o injustas, son importantes para el trabajo de esas autoridades.
Las mejores calificaciones corresponden a los alcaldes de Quillota, Luis Mella (DC), 6, y Virginia Reginato (UDI), Viña del Mar, con un 5,6. Por su parte, Jorge Castro (UDI), alcalde de Valparaíso, logra solo un 3,3, y el peor evaluado es Mauricio Navarro (DC), Los Andes, con un 2,6.
Pero aparte de los jefes comunales aparece una calificación importante: calidad de los servicios municipales. En ese rubro, entre otras comunas, Quillota muestra un promedio de 5,4; Concón, entre 4,9 y 5; Viña del Mar, entre 4,5 y 4,8; y Valparaíso, entre 3,5 y 3,7.
Este último aspecto es fundamental, pues marca la calidad de la relación entre la administración local y las personas, incidiendo directamente en su calidad de vida. Sobre ese punto, atendiendo a la encuesta, es que las municipalidades, autoridades y funcionarios, deben focalizar su atención. Esta materia no es solo cuestión, de recursos, sino que también de disposición, creatividad y efectiva participación.
La encuesta, más allá de observaciones puntuales, es un aporte valioso, una orientación que no se puede eludir o descalificar. Fundamentalmente, entrega herramientas de trabajo a las autoridades, elegidas y designadas, y desapasionadamente analizada contribuye a mejorar la calidad del servicio público y a realizar los cambios que procedan.