El megaincendio ocurrido en abril del año pasado dejó un profunda huella no solo en quienes lo vivieron, sino también en todos los porteños que fueron testigos de aquella catástrofe y que dejaron de lado sus problemas para ir en ayuda de quienes sufrían. Uno de ellos fue el poeta Enrique Moro, quien dice que se involucró "mucho" en las tareas de repartir comida, sacar escombros y todo lo que se vino una vez que comenzaron a apagarse las llamas.
Sin embargo, no era suficiente. "Tenía la necesidad de escribir un texto sobre esta tragedia que, en alguna medida, fuera testimonio y se quedara instalado en la memoria colectiva", asegura Moro. Es así como en los meses posteriores inició un trabajo compulsivo, que tuvo más de cinco versiones, y que dio como resultado un poema largo que editó bajo el título "De ceniza nuestra sábana" (Editorial Puerto Alegre) y que fue presentado hace poco en La Piedra Feliz.
"Los incendios, los terremotos, las tragedias en Valparaíso son parte de nuestra identidad. Es terrible, pero es así. Entonces, creo que uno tiene el deber como intelectual, escritor, ciudadano, porteño, habitante de la ciudad -porque uno es parte de eso, aunque tu casa no haya sido quemada-, de dar cuenta de aquello. Hay algo de esa quemazón en ti, algo se quema también en ti. Y el libro es un poco de eso. Una visión personal de la tragedia", describe.
POEMA DESDE EL DOLOR
"Es un poema sencillo que está escrito para la gente que lo sufrió, para que ellos puedan sentirse interpretados a través del poeta. No hay una mayor sofisticación ni pretensiones en la escritura", agrega el autor de libros como "Marilyn", "La Bolsa: poesía de cordel" y "Hay un Moro en la costa", por nombrar solo algunos.
Detalla que se trató más que nada de "dejar fluir el sentimiento", sobre todo "el dolor". "Si creo que hay algo que trasluce el poema es el dolor del que escribe, del poeta que relata algo que le es totalmente cercano, y lo cual él siente que es parte de ese suceso. Entonces, está hecho muy directamente, por eso no hay tanto una corrección en lo estético", sostiene.
Sin embargo, tras terminar el trabajo -y como pocas veces lo hace-, Moro pidió opiniones a varios amigos, como los escritores Juan Cameron y Sergio Madrid; el pintor Gonzalo Ilabaca -que donó uno de los cuadros que pintó durante la tragedia para ilustrar la portada del libro-; y el compositor y director de orquesta Boris Alvarado, quien en ese momento se encontraba en París siguiendo un doctorado en filosofía.
Este no le dio una respuesta inmediata. Es más, pasó mucho tiempo antes que le escribiera solicitándole permiso para musicalizar su poema en el marco de una obra mayor que estaba preparando.
El resultado fue "Vetro II", una pieza para barítono, violoncello, dos pianos, coro mixto, orquesta de cuerdas y timbales, con el texto "La chispa", que es un extracto del libro de Moro; y que será presentado el 7 de junio en el Théâtre de la Maison des Cultures du Monde, París, como parte de la gala de Clausura de la Semana de América Latina y el Caribe que realiza el Parlamento francés (ver recuadro); y al día siguiente en un homenaje que se le hará a la Presidenta Michelle Bachelet en la sala Marcel Landowsky del conservatorio de la capital francesa, que será emitido por Radio France Musiques, incluyendo entrevistas a Enrique Moro.
GÉNERO DE IDENTIDAD
"Hay algo en lo personal que no se puede desconocer que es que estoy orgulloso", comenta Enrique Moro; aunque considera que "lo más importante es la oportunidad de mostrar parte de la tragedia que miles de porteños sufrieron esos días de abril el año pasado en Valparaíso".
Desde su perspectiva, esto es relevante porque permite que "se conozca parte de nuestra realidad, de la realidad dolorosa que tiene este país", ya que "somos hijos del rigor en alguna forma: terremotos, erupción de volcanes, tsunamis, incendios. No cualquier país tiene tantas desgracias".
Otro motivo de orgullo para el autor porteño es que su poema fue traducido al francés por el poeta chileno Waldo Rojas, radicado en París desde la década del 70, quien pertenece a la generación denominada Promoción Emergente, entre cuyos integrantes se encuentran Gonzalo Millán, Floridor Pérez, Jaime Quezada y Óscar Hahn, entre otros.
Sin embargo, Enrique Moro reconoce que tiene una espina clavada. Si bien se oficializó la invitación para que asista como invitado al estreno de la obra y participe en varias actividades anexas, no siente el apoyo del Estado chileno. Es más, él mismo tuvo que pagarse el pasaje para poder asistir.
"Yo hago el sacrificio porque una cosa como esta no me la voy a perder, porque nunca más me va a pasar en la vida", afirma el poeta porteño. No obstante, concluye que es "vergonzoso" que no exista una preocupación real por exportar la cultura.
"Es un poema sencillo que está escrito para la gente que lo sufrió (el megaincendio), para que ellos puedan sentirse interpretados"
La gala de clausura de la Semana de América Latina y el Caribe será un homenaje a la música y la poesía chilena a través de un concierto a cargo de los directores de orquesta Carlos Dourthé y Boris Alvarado; el barítono Christian Senn y el pianista Daniel Navia. El repertorio incluye obras de Rafael Díaz, Hernán Ramírez, Mauricio Arenas Fuentes, Eduardo Cáceres, Sofía Vaisman, Patricio Wang y el mismo Alvarado. Además, se realizará un tributo a los 130 años del nacimiento de Pedro Humberto Allende y al compositor Sergio Ortega. A nivel poético se presentarán obras escogidas de Pablo de Rokha, Gabriela Mistral, Pablo Neruda, Elicura Chihuailaf y Moro.
Flor Arbulú