A mediados de 2014, el regreso de Ezequiel Miralles a Everton ilusionó a toda la hinchada oro y cielo. Sin embargo, su rendimiento dejó mucho que desear y terminó siendo un fantasma en relación a lo que mostró en su primera etapa en el cuadro viñamarino, cuando se transformó en un ídolo tras obtener el histórico campeonato del Apertura del 2008.
Tras casi un año desde su retorno, el atacante trasandino finalmente no renovó con el club, pese a su ilusión de retirarse en Everton a lo grande. "Al jugador se le hizo una oferta, pero el ofrecimiento no fue aceptado, por lo que no hay acuerdo", aseguró Carlos Oliver, gerente general de Everton, quien también reconoció que de parte de la institución estaba la intención que el atacante siguiera.
En su segundo periodo en Viña del Mar, Miralles llegó con escaso ritmo competitivo desde Olimpo y tampoco pudo hacer una óptima pretemporada. Aspectos que resultaron clave en lo que vendría después, ya que durante toda su estadía sufrió constantemente producto de una lesión en el tendón de la planta del pie. El estado de las canchas de entrenamiento y los partidos disputados en campos sintéticos eran los argumentos que esgrimía el argentino para explicar su lesión.
Producto de ello fue que para el 2015 se sometió a tratamientos y cuidados especiales pensando en retomar su nivel y dejar atrás la lesión. No obstante, pese a marcar goles al inicio de este año, lo cierto es que nunca pudo dejar atrás su dolencia y siguió con la poca regularidad. Tanto así que su último partido con la camiseta de Everton fue el 11 de abril de este año, donde marcó el gol de la victoria en la visita a La Serena. En total, en el marco de su segunda etapa en el cuadro oro y cielo, Miralles disputó 19 encuentros -doce de ellos de titular-, y anotó seis goles.
No fue fácil el paso del bahiense por Everton, donde además de su bajo rendimiento, tuvo problemas con el técnico Luis Marcoleta y desde el interior del cuadro viñamarino afirman que la figura del argentino generó un mal clima en el camarín que también se replicó durante el mando del DT Carlos Medina.
En la escuadra viñamarina siguen trabajando para conformar un plantel acorde a las pretensiones del técnico Víctor Rivero y con el claro objetivo de lograr el ascenso a Primera. El último en sumarse a Everton fue el arquero Claudio González, quien firmó un contrato por una temporada. El portero de 25 años viene de defender la camiseta de Unión San Felipe en la campaña pasada, y su arribo se suma al del defensor Felipe Salinas, el volante Alejandro Carrasco y el ariete Jorge Gálvez.
Tomás Moggia C.