La baja de 15 puntos en la prueba de Lenguaje del Sistema de Medición para la Calidad de la Educación (Simce) a nivel nacional tuvo una expresión incluso mayor en la Región de Valparaíso: 16 puntos menos obtuvieron los estudiantes que rindieron el test el año pasado respecto de sus pares del 2013.
El puntaje de 239 puntos promedio obtenido a nivel regional es el más bajo de los últimos ocho años, un periodo de alzas y bajas en el desempeño de los estudiantes locales.
Si en 2007 la región alcanzó un promedio de 253 puntos, en 2009 la cifra alcanzó los 249 puntos; en 2011 los 253; en 2013 los 255 y ahora los 239.
A juicio de la jefa de carrera de Educación Básica de la PUCV, Marcela Jarpa, "referirse a una causa a priori es poco prudente y responsable, pues hay que considerar las diversas variables implicadas en ello".
Entre ellas, la profesional señala el análisis del diseño de la prueba de Lectura en relación a los aprendizajes esperados que se medirán, "pues estos tienen un amplio espectro que va desde leer fluidamente hasta evaluar críticamente los textos que leen. De la misma manera, el modelo de comprensión que subyace al diseño del instrumento también es relevante, sobre todo pensando en la importancia de la retroalimentación hacia los profesores y los apoderados".
Añadió que otro factor que explicaría esto podría ser el nivel de apropiación e implementación de las Bases Curriculares vigentes por parte de los docentes en el sistema escolar, pues a la fecha existen dos currículum funcionando. "Esto podría significar que no exista una articulación adecuada del paso de una a otra y, por lo mismo, afecta los resultados de aprendizaje de los estudiantes", dijo.
INCENDIO DE VALPARAÍSO
"A nivel regional, no hay que olvidar el impacto no solo social y emocional que tuvo el incendio de Valparaíso, situación que también afectó el desarrollo curricular de las actividades pedagógicas de los diversos colegios de la ciudad, retrasando el curso normal año lectivo y el avance en los contenidos y desarrollo de habilidades".
Andrea Bustos, académica de Educación Básica de la PUCV, realizó un estudio Fondecyt para evaluar las prácticas docentes en aulas y comenta que "lo que tienden los profesores en tercero básico contrasta con lo que se hace en séptimo y no solo por la edad de los niños, sino por la supuesta autonomía".
En ese ámbito, precisó que "los niños deben comprender más bien solos. Contrariamente, muchas investigaciones plantean que lograr esta tremenda capacidad demora cerca de 10 años. ¿Leer solos? ¿Lectura domiciliaria sin acompañamiento? ¿Eso es dejar al inexperto en manos de quién? ¿De una familia que no lee o que no puede leer?".
Añadió: "Para los alumnos, el tratamiento de la comprensión hace imperioso trabajar con necesidades diferentes: conocimientos, vocabulario y habilidades para las cuales los textos y materiales pedagógicos estándar no responden. Esos mismos materiales sí podrían ser adecuados por la mediación del profesor".
"El incendio de Valparaíso también afectó el desarrollo curricular y retrasó el curso normal año lectivo y el avance en los contenidos"
"Los niños deben comprender más bien solos. Muchas investigaciones plantean que lograrlo demora cerca de 10 años. ¿Leer solos?"