Luego de que el Gobierno confirmara al mediodía de ayer el envío de un proyecto de ley para simplificar la reforma tributaria, el diputado DC y miembro de la Comisión de Hacienda, Pablo Lorenzini, aclara que ciertamente es un avance en la lógica de transparentar el proceso. Sin embargo, criticó que aún no se hayan establecido los dineros y recalcó que "si no tenemos claro los recursos de aquí al 2018, todo lo que se está haciendo es disparar al aire sin objetividad".
-Usted ya lo había adelantado. ¿Quedó conforme?
-Bueno el Ejecutivo ratificó el acuerdo en términos de tener una ley simplificadora y aclaratoria de la reforma tributaria. Esta ley debería simplificar el tema en cuanto a los regímenes de tributación, pero no con circulares, sino que por una ley que aclare todo y que le ponga un punto final a la discusión y que tributariamente así queda.
-¿Esta es la reforma de la reforma?
-No, no, esto no es la reforma de la reforma ni mucho menos. Esta es una ley que simplifica y aterriza la reforma tributaria más allá de las circulares y le da respaldo legal. Son aclaraciones menores sobre cómo evitar posibilidades de evasión y elusión y simplificaciones para que la gente lo entienda bien. Pero en ningún caso es una reforma.
-¿Qué le pide al ministro para mejorar esta reforma?
-El primer parámetro es que aquí no cambian las cifras, los porcentajes, o sea la recaudación, pero conversando con distintos actores no hemos dado cuenta de que hay que cautelar que esto sea simple, que se entienda, porque la verdad es bastante complicado, y por otro lado el uso de distintos sistemas puede provocar el aumento de la elusión. Ahora, si bien el ministro de Hacienda señaló que debiera empezar a discutirse tras la discusión presupuestaria, pero yo creo, y varios parlamentarios me secundaron, que es mejor que se haga antes de la discusión presupuestaria. El ministro se comprometió a estudiar la factibilidad de hacerlo así porque lo esencial es hacer una buena reforma.
-¿Qué permite?
-Simplificar los mecanismos de recaudación (renta atribuida y semiintegrado).
-¿La idea es que quede uno solo?
-La idea es que las personas queden con renta atribuida, y cuando se trata de empresas con un sistema semiintegrado. O sea, o se usa uno o se usa otro, y desde ese punto de vista se impide que se puedan organizar para eludir impuestos. Entonces unos van para un lado y otros para otro.
-¿Qué otras precisiones son importantes?
-Otras son alguna precisiones respecto al IVA en el caso del leasing o cuando haya construcciones con créditos especiales o subsidios; también había algo respecto a los activos que hayan sido fijados por contratos con anterioridad a la vigencia, pero después que se edifica, entonces hay que evitar que hayan elusiones. O sea son todas simplificaciones de este tipo para hacerla menos compleja y extrapolarla a todas las pymes y comerciantes. En el fondo es un reconocimiento práctico de que hay imprecisiones que se van arreglar por ley.
-Ya se han emitido más de 50 circulares ¿Por qué es mejor por ley?
-Porque si se hace por circulares y después llega un nuevo director de SII pueden estar sujetas a la interpretación. Entonces con esto cerramos el camino para no seguir dos años más discutiendo sobre lo mismo. Segundo, ojalá que el ministro acepte hacer esta ley más rápido y no esperar el 28 de diciembre. El ministro está interesado, está empoderado y se convenció. Eso es un avance.
-¿Y cree que esta ley pueda salir antes del presupuesto?
-Yo creo que sí. El ministro quedó de consultarlo con los asesores. Pero eso sería lo mejor para no confundir los temas. Claramente el ministro no se compromete porque primero tiene que ver hasta dónde puede hacerlo, pero yo creo que sí es factible.
-¿Por qué el cónclave económico?
-Todo lo que escuchamos en el cónclave político fueron conceptos macro, pero la ciudadanía quiere saber si va a haber bono para el adulto mayor en el transporte público o si va a haber plata para reaccionar de inmediato ante emergencias en el sur o en el norte.
-¿Se lo propuso al ministro Valdés?
-Sí, aproveché para plantearle, lo que de alguna manera fue concordado con mis pares, de que así como hubo un cónclave político, debiera haber un cónclave económico financiero. O sea, en el político vimos las reformas, las gradualidades, pero necesitamos ver qué pasa con las platas. Y hasta ahora no tenemos claridad de cuáles van a ser los recursos el 2016, el 2017 o el 2018. Entonces sería conveniente hacer un cónclave con las comisiones de Hacienda de ambas cámaras, y los ministros de Hacienda y Economía con un debate más profundo de la parte más nuestra, que es menos política, pero que implica ver los recursos, cuánto, cómo, en qué forma.
- ¿Y cómo recibió la propuesta el ministro Valdés?
- El ministro se comprometió a estudiar la propuesta. Mostró interés, le pareció interesante porque además implica hacer un trabajo prelegislativo para la discusión presupuestaria.
- Aunque no se modifica el porcentaje de recaudación, lo cierto es que con el proceso de desaceleración económico se ve complejo recaudar los 8.300 millones de dólares...
- Justamente, cuando trataron de aterrizar todas estas cifras se dieron cuentas de las imprecisiones. Siempre dije y siempre dudé después de que se acordó en el Senado, que antes que de los 8.300 millones de dólares, íbamos a estar más cerca de los 6.500. Sin embargo, en el equipo económico del gobierno no tienen hasta ahora los elementos de juicio para establecer cuánto. Por eso espero que con todas estas aclaraciones van a poder establecer la cifra final. Pero ahora no están en condiciones de saber cuánto es.
- O sea, ¿todavía el gobierno no tiene claro cuánto van a recaudar?
-Es que aquí hay mucho espacio para la elusión y la evasión y un puntito más de elusión es muchísima plata. Por eso que cerrando esto con la nueva ley se pueden aterrizar las cifras en términos certeros y no dejando abierta la ventana a la habilidad de los empresarios.
-¿Cómo evitar al elusión?
-Es que antes cuando había dos sistemas se podía usar uno u otro. Y ahora estará claro quiénes estarán en uno y quiénes en otro y en qué fechas y con los plazos precisos y se elimina una posibilidad de moverte.
- Pero al no haber claridad de recursos tampoco se puede priorizar qué se puede hacer y qué no.
- Por eso estoy pidiendo el cónclave económico y aterrizar las cifras y así poner a disposición de los distintos ministros y de la Presidenta las cifras para que puedan ir cumpliendo. Las medidas dependen del dinero, pero nadie sabe de cuánto se dispone realmente. Lo único que hay ahora es que dicen que van a hacer esto dependiendo de los recursos, dependiendo del Presupuesto, pero no hay claridad. Ni ellos (el ministro de Hacienda y el gobierno) saben hoy con claridad qué va a significar los ingresos de aquí hasta marzo de 2018. Entonces veamos primero qué plata tenemos y en qué espacio (...) Si no tenemos claros los recursos de aquí al 2018, todo lo que se está haciendo es disparar al aire sin objetividad.
-Para la discusión presupuestaria tampoco hay claridad...
-Por eso que le pedimos al ministro y él aceptó un trabajo prelegislativo con las comisiones mixtas de presupuesto en las cuatro o seis semanas que vienen para así llegar a octubre con la claridad de las cifras y ahí discutir la reasignación de recursos y ver qué ministerio reciben más o menos recursos, pero ya con la plata sobre la mesa.
- ¿Sumando y restando el saldo es a favor?
- Bueno, es un avance y es algo concreto porque más que circulares me gusta el tema legislativo y ojalá con esto cerremos este espacio de discusión y avancemos en el tema presupuestario y en el tema de las reformas.
"La idea es que las personas queden con renta atribuida, y cuando se trata de empresas con un sistema semintegrado. O sea, o se usa uno o se usa otro, y desde ese punto de vista se impide la elusión".
"En el cónclave político vimos las reformas, las gradualidades, pero necesitamos ver qué pasa con las platas. Y hasta ahora no tenemos claridad de cuáles van a ser los recursos el 2016, el 2017 o el 2018"