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"Si no pasa Abbott, Bachelet tiene otros cuatro y un 'second best' que probablemente pasará: Raúl Guzmán"

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Paola Passig

A la Moneda le faltó un solo voto en el Senado para ratificar a su candidato a contralor, Enrique Rajevic. Y tras la derrota del miércoles -a pesar de los esfuerzos del ministro del Interior, Jorge Burgos, en una aventura que se preveía difícil- el Gobierno se arriesga a otro fiasco al anunciar a un candidato a la Fiscalía Nacional que muchos no esperaban, menos los senadores. Patricio Navia, de regreso a Chile, pasa revista a lo que será la noticia de los próximos días.

- ¿Qué le pareció la nominación de Jorge Abbott para reemplazar a Sabas Chahuán?

- Era riesgoso nominar a Abbott, pero también era riesgoso nominar a José Morales, precisamente porque Morales daba la señal de que se trataba de un acuerdo del Senado para garantizar la impunidad de los políticos investigados. Entonces, si hubiera nombrado al candidato favorito del Senado se habría señalado que "nombró al hombre que querían los senadores". Probablemente, el único nombre que no generaba tanto ruido era el de Raúl Guzmán, porque era de la Fiscalía y daba la impresión que no estaba negociando para garantizar la impunidad, mientras que si nombraba a Vargas era una crítica contra toda la Fiscalía y tampoco podía nombrar a Toledo. O sea, igual iba a correr riesgos, pero menos que nombrando a Vargas o Toledo.

- Entonces, ¿fue o no una decisión acertada desvincularse de una supuesta maquinación política al descartar a Morales?

- No, porque creo que lo que ella hizo fue oponerse a la operación más que ponerse por arriba de la operación. Da la sensación de que está reaccionando contra esa operación y, por lo tanto, es parte de otra operación, la de parar a Morales. Lo que tendría que haber hecho era sondear a los senadores para establecer un nombre con el que tuviera un apoyo garantizado. Y eso aparentemente no lo hizo, y ahora hay dudas de que vayan a poder juntar los votos para confirmar a Abbott.

- ¿Implica que el Gobierno nuevamente se va a exponer a otro fracaso?

- O sea, si la Presidenta Bachelet hubiera querido minimizar riesgos tendría que haber nombrado a Raúl Guzmán. Pero Abbott no es lo más riesgoso; lo más riesgoso era haber nombrado a Vargas y lo segundo más riesgoso era haber nombrado a Morales, porque implica comprarse el argumento de que había una operación para taparlo todo.

- Se señala que su decisión muestra que Bachelet pone su pensamiento y sus ideas por encima de los posibles logros?

- Creo que no, porque tampoco sabíamos lo que ella quería. Creo que el problema de Bachelet es que está reaccionando y diciendo "si el Senado quiere eso, yo voy a hacer algo distinto". Pero no es porque ella quiera hacer algo en particular, sino que buscó bloquear lo que estaba haciendo el Senado.

- Pero ahora le "deja la pelota" al Senado, con la posibilidad de que le rechacen a su candidato.

- Es que el Senado tiene una buena razón para rechazarlo: "La Presidenta no consultó con nosotros". Ese será el argumento y la Constitución señala que debe tener la aprobación de dos tercios. En consecuencia, ella debió haber preguntado.

- ¿La Moneda saldrá trasquilada?

- Se está poniendo en una situación difícil, porque la Constitución supone que debe haber algún tipo de diálogo y consulta con el Senado para que pase a votación un candidato con amplio consenso, pero la Presidenta sacó el candidato debajo de la manga sin consultarlo. Blanco está diciendo que prefería a Vargas, los senadores a Morales, y va la Presidenta y pone a Abbott. No hubo diálogo. Entonces, los senadores pueden decir "Abbott es un buen candidato, pero como no hubo diálogo vamos a votar en contra" y que es lo mismo que dijeron sobre Rajevic.

- Ahora todo queda en manos del lobby que pueda hacer de aquí a la votación la ministra Javiera Blanco, que tendría un estilo distinto al de Burgos.

- Sí, pero qué vas a dialogar si ya dijiste quién va de candidato…

- Convencerlos entonces…

- Sí, pero eso no es diálogo, si ya elegí al candidato no hay espacio de diálogo; qué ropa se va a poner Abbott ese día es lo único que podrá dialogar, porque ya se nombró al candidato. Se supone que el diálogo es antes de que nombres, no después de que lo nombres.

- En el caso de la nominación y votación de Rajevic, ¿cómo vio esa situación que se transformó en una derrota para Burgos y para el Gobierno al insistir en un nombre que no generaba consenso?

- Lo de la Contraloría fue una pésima nominación, no porque Rajevic no pueda ser un buen contralor, sino que porque toda la historia de Rajevic indica que es un tipo que anda con la camiseta puesta de la DC y la idea es nombrar a un contralor que le entregue garantías a todos y no que sea un militante y funcionario de gobierno. Rajevic puede tener condiciones, pero si quieres poner a un árbitro, no puedes poner a un hincha del Colo Colo, en especial si va a jugar el Colo.

- ¿Qué responsabilidad le cabe a la Presidenta en todo esto?

- La verdad es que nunca he sentido que la Presidenta haya querido cambiar el rumbo, más bien estaba ganando tiempo y en ningún caso dijo "vamos a hacer las cosas distintas". De hecho, lo del realismo sin renuncia duró súper poco. Cuando hizo el informe de la comisión Engel metió el tema de la nueva Constitución. Aquellos que celebran que la Presidenta Bachelet ahora está distinta y que va a cambiar rumbos significa que no están leyendo bien las cosas. Cuando la Presidenta dice "diálogo" en realidad está diciendo "tenemos que convencerlos mejor"; no está diciendo "yo estoy abierta a cambiar mi postura". Eso no lo ha dicho nunca.

- ¿El hecho de haberse estabilizado en las encuestas le da más seguridad para no escuchar o no dialogar?

- Sí, claro, a la Presidenta le falta política. La política puede no gustarle a alguna gente, pero es necesaria y el diálogo en la política lo tienen que hacer antes de hacer los anuncios, no después, de modo que en cuanto se hagan los anuncios los partidos y los parlamentarios digan "sí nos gusta ese candidato". No les puedes avisar a tus padres que te vas a casar y después decirles el matrimonio es mañana, pero conversémoslo. No hay mucho espacio para conversar nada ahí.

- ¿Cómo queda el escenario si con la votación de fiscal el Gobierno experimenta una nueva derrota tras lo del contralor?

- No lo veo tan terrible. La Corte Suprema propuso cinco nombres y si no pasa Abbott tiene otros cuatro y hay un "second best", una segunda opción, que probablemente va a pasar y que es Raúl Guzmán. Entonces, aún si es derrotada en la primera vuelta, todavía puede proponer a Guzmán y éste ser confirmado.

- Pero igual se produce una sensación de derrota, ¿no?

- Un poco, pero es como en el tenis; pierdes el primer servicio, pero ganas el segundo servicio que va a ser Raúl Guzmán.

"Cuando la Presidenta dice 'diálogo' en realidad está diciendo 'tenemos que convencerlos mejor'; no dice 'estoy abierta a cambiar mi postura"

ENTREVISTA. PATRICIO NAVIA, analista político, sobre escenario de La Moneda en la elección del nuevo fiscal nacional: