Habrá más carabineros para evitar incidentes en Santa Inés
VIÑA DEL MAR. Dirigentes de la toma N°4 indicaron que continuarán con protestas como medida de presión para conseguir una solución desde el municipio.
Ante diversas complicaciones durante dos noches debido a la realización de barricadas en la población Libertad de Santa Inés, las que han significado desvíos de tránsito e incluso cortes de luz en sectores aledaños, la Gobernación de Valparaíso solicitó mayor presencia y permanencia policial en esa zona.
Al respecto el gobernador Omar Jara indicó que se querellarán en contra de las personas que sean responsables de los cortes de luz provocados si se les sorprende de manera flagrante debido al problema y riesgos que provoca una situación de emergencia como la mencionada.
"El viernes hubo una complicación mayor que es un corte de luz en el sector y eso es muy grave. Conversé con Carabineros y vamos a tener mayor presencia policial y permanente en ese sector a contar de este sábado (ayer) porque no me parece que sea una actitud responsable por parte de los vecinos", aseveró el gobernador Omar Jara.
"vamos a seguir"
Una controversia con los vecinos del lugar y dirigentes de la toma N°4, que se generó de acuerdo a los dirigentes, tras el desalojo de 26 familias de un terreno municipal, quienes insisten en que continuarán con las protestas como medida de presión.
"Vamos a continuar con las protestas, ya hemos puesto lienzos en el lugar y seguiremos así como medida de presión para conseguir una audiencia con la alcaldesa Virginia Reginato, para poder optar a una solución habitacional en este terreno donde viven nuestras familias", manifestó Sebastián Lorca, dirigente de la toma.
Lorca añadió que se reunirán con dirigentes de otras tomas de Viña del Mar para conseguir respaldo, sobre todo porque son cerca de 200 familias en un total de cuatro tomas que están preocupadas por un eventual desalojo.
6.325 clientes de Gómez Carreño, Achupallas y Santa Inés se les cortó la luz. Servicio fue repuesto por Chilquinta.
26 familias fueron desalojadas, pero la gobernación insiste en que no había personas habitando el terreno.