Kayakistas regresan a sus casas tras 14 horas perdidos en el mar
RESCATE. Franco Capurro y Sebastián Correa quedaron en un roquerío y se aferraron a las algas para salvar sus vidas.
Después de cuatro horas de estabilización en el Servicio de Atención Primaria de Urgencia (SAPU) de Concón, un intenso trabajo médico y la preocupación de su familia, Franco Capurro, de 20 años, fue el primero de los kayakistas que logró volver a su casa tras ser rescatado del roquerío en el sector de Punta Piedra, en Quintero, área donde quedó atrapado por 14 horas junto a Sebastián Correa, de 23 años, tras perder el control de un kayak doble que habían arrendado pasadas las 16 horas del domingo.
"A la vuelta de la isla veníamos y se nos dio vuelta el kayak y no pudimos dar la vuelta, le entraba mucha agua y después nos tuvimos que devolver a la isla, pero era mucha la corriente y nos fuimos como a un roquerío y ahí esperamos las horas. Al final fueron 14 horas de espera. El peor momento fue cuando vimos al helicóptero y no bajaban a buscarnos porque no nos veían, ahí lo único que sentimos fue desesperación, eran como las 10 de la noche y eso fue lo peor", relató Franco Capurro, a la salida del SAPU de Concón.
Mientras Capurro salía del hospital y era recibido por su familia, su amigo Sebastián Correa, quien también ejerce como instructor de surf, era asistido en el hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar, centro al que fue trasladado debido a las heridas en su rostro.
Respecto a la atención en el SAPU, la doctora Lorena Reyes informó que "tras estar 14 horas en contacto intermedio con el agua, Franco fue dado de alta; en tanto, Sebastián aparte de la hipotermia presentó una contusión facial y por eso está en un estado de mayor gravedad, estaba policontuso y fue derivado al Fricke, ambos al llegar estaban con hipotermia".
Sin embargo, a eso de las 13 horas, el director del hospital Gustavo Fricke, Rodrigo Ahumada Mercado, precisó que "el paciente fue estabilizado, tenía hipotermia y lesiones en el rostro", y tras una atención precisa pudo recibir el alta médica.
Horas de tensión
De acuerdo a lo relatado por Franco Capurro, su familia y amigos, las horas en que estuvo en el mar junto a Sebastián fueron de tensión, desesperación y al último, antes de ser rescatados, de desesperanza.
"Me entró agua y mi traje se rompió, como a las 5 de la mañana me sentía con mucho frío, no hablábamos prácticamente nada, rezábamos, le pedíamos a Dios salir adelante, pero prácticamente mucho no podía hablar", explicó Franco.
Mismo relato que le dio a su hermano Manuel, quien precisó que "a las 6 de tarde perdieron el kayak; a las 8 ya no sentían las piernas y a las 10 de la noche el oleaje era impresionante y así fue toda la noche".
El padre de Franco, Manuel Capurro, recalcó que "la Armada nos avisó una vez que el kayak llegó afuera y lo vieron en la playa La Boca sin los ocupantes, ahí se dieron cuenta que los muchachos no iban a regresar, no iban a volver. Para mí y mi familia el tiempo de espera fue eterno, pero con harta fe, nunca se perdió la esperanza. Él también siempre tuvo la fe, cuando lo rescataron perdió un poco el conocimiento, lo llevaron en helicóptero y luego nosotros nos llenamos de alegría y agradecimiento".
"Vimos al helicóptero y no nos bajaban a buscar porque no nos veían, ahí lo único que sentimos fue desesperación"
Franco Capurro, Uno de los rescatados
Intenso operativo de la Armada
Tras la aparición del kayak en el borde costero de Concón y los remos en la playa de Ritoque, la Armada, Carabineros y la autoridad local iniciaron un intenso operativo para dar con el paradero de los dos jóvenes que salieron en la embarcación la tarde del domingo, con condiciones de mar adversa y sin chalecos salvavidas, de acuerdo a lo informado por el capitán de Puerto de Valparaíso, comandante Nelson Saavedra. Sin embargo, tras intensas horas de búsqueda con un helicóptero y dos lanchas, a las 7.40 horas se procedió al rescate.