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"El Transantiago grafica cómo el centralismo también afecta a la Región Metropolitana"

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Paola Passig

"Santiago es una víctima más del centralismo, como el resto de las regiones", fue una de las premisas que se dejó escuchar en la Cumbre de las Regiones: la descentralización une a Chile", realizada el lunes en Santiago y que culminó con una marcha hasta el frontis de La Moneda.

Y fueron nada menos que el intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, y la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, quienes sustentaron esta tesis que la diputada Cristina Girardi (PPD), representante del distrito 18 de la RM -que incluye Cerro Navia, Lo Prado y Quinta Normal- suscribe en un 100%.

Con su experiencia como exalcaldesa, la parlamentaria conoce en terreno los efectos de las decisiones tomadas a nivel central, sin consulta a las bases y de modo absolutamente vertical.

- ¿Santiago sufre por centralismo?

- No cabe duda que hay centralismo. Y éste conlleva el desarrollo de un sector y el no desarrollo de otros. Las comunas marginales, como La Pintana, Cerro Navia, la Granja, San Ramón, Lo Espejo, o sea, este cordón urbano que está en la periferia, claramente no tiene desarrollo. Lo grafico de la siguiente manera: cuando era alcaldesa en Cerro Navia había un terreno de más de 20 hectáreas lleno de basura que queríamos convertir en un parque. Y no había plata, pero sí la hubo para levantar la Plaza de la Ciudadanía frente a La Moneda. Nosotros con los vecinos tomamos una foto del basural y lo instalamos al lado del letrero que decía "Bicentenario, gran inversión, Plaza de la Ciudadanía", porque nosotros dijimos que también queremos ser parte del Bicentenario. Y es que cuando hay centralismo éste no te deja ver lo que hay en la periferia.

- ¿Por qué?

- Si ves el Santiago de Las Condes, Providencia, Vitacura, son comunas que tienen en exceso versus muchas comunas que están abandonadas. Donde las calles están llenas de hoyos y donde los municipios son más frágiles desde el punto de vista profesional y tienen menos capacidad de presentar proyectos. Es un círculo vicioso. Y esto sucede porque no hay una política ni respecto de las regiones ni respecto de los sectores más periféricos de la RM de integrarlos al desarrollo. Todo ocurre donde hay recursos.

- Pero la queja del intendente Orrego apuntaba a que la toma de decisiones era vertical, inconsulta, centralizada...

- Claro, y eso tiene que ver, por ejemplo, con los planos reguladores y donde les imponen lo que el plan regulador de la RM quiere. Y no hay autonomía para elaborar el plan regulador de la comuna. Lo mismo con el tema de las antenas de celulares. Y a ningún municipio le preguntan si está o no de acuerdo. Muchos temas que tienen que ver con inversión en termoeléctricas, aunque la comunidad no esté de acuerdo, lo hacen igual. En el fondo es una falta de respeto absoluto por cualquier comuna.

- En este contexto, ¿usted adhiere a todo ese proceso regionalizador que se está impulsando?

- O sea, Chile tiene pendiente el tema de la descentralización hace mucho tiempo y eso tiene que ver con la descentralización real, o sea, no es que haya solo descentralización administrativa, sino que también existan los recursos. O sea, los municipios pobres la única forma que tienen de invertir es postulando proyectos al gobierno central y ¿quién tiene los recursos? ¡El Gobierno central!, cuando lo debieran tener los municipios para que estos pudieran tomar decisiones respecto de las problemáticas que conocen. Pero hoy los municipios no pueden tomar decisiones, tienen que postular a buscar soluciones. O sea, hay que contar con la anuencia del gobierno central para que apruebe el proyecto y le entreguen las platas. Aquí en Chile todo se define centralizadamente, aquí tu no decides nada a nivel comunal salvo las comunas con plata.

El ejemplo

- Entonces, ¿para que haya una verdadera descentralización se necesita empoderar a los gobiernos locales?

- Claramente y una mayor integración entre lo que es la región y los municipios. Todo se define como en compartimentos y estancos. Cuando uno es alcaldesa jamás te preguntan nada de nada. Esto se vio muy patentemente con el Transantiago. Y a ningún municipio se le consultó cuáles eran las necesidades de trayecto de la gente, por dónde ellos creían que tenían que pasar los recorridos. Por ejemplo, a mí una vez llegaron a decirme que en Cerro Navia iban a hacer una vía exclusiva para el Transantiago en J.J. Pérez y dijimos que no. Nos movilizamos, nos tomamos la calle, hicimos ruido... La ciudadanía no tiene otras herramientas porque no hay proceso de conversación, de consulta y de respeto mutuo respecto a lo que es el desarrollo y lo que son las decisiones que se deben tomar en cada nivel. Llegan y te imponen determinado proyecto. Los procesos de consulta aparecen cuando la gente comienza a alegar. Nunca es un proceso previo y de construir en conjunto. Es la visión del dominador de que aquí se hace lo que yo quiera.

El chile invisibilizado

- Entonces, junto con leyes descentralizadoras hace falta un cambio de mentalidad.

- Claro. Ni siquiera se les ocurre. Definen, lo diseñan en una oficina, llegan, lo hacen y solo cuando la gente alega se abren a los procesos de consulta. Pero efectivamente la descentralización requiere un cambio de mentalidad en el que se tiene que involucrar al otro. Y que la opinión del otro es tan válida como la tuya.

- Pero incluir a la "otredad", como se le llama en las ciencias sociales a ese otro que genera temor y desconfianza, no es fácil.

- Claramente la lógica que tiene nuestro gobierno es la que impera en el mundo y que es la lógica patriarcal donde es uno solo el que decide.

- ¿El Transantiago lo definiría como el paradigma de cómo se refleja el centralismo en la RM?

- Lo que pasa es que los que hemos sido alcaldes vinculados con comunas periféricas, cuando los diputados de regiones dicen Santiago se lleva todos los recursos nosotros decimos ¿cuál Santiago? y es el Santiago que menos se muestra porque no están las oficinas, no está el poder. El poder, la plata y las decisiones están de Providencia hacia el nororiente. Ahí está todo. El resto no es Santiago; las otras comunas son las que no se ven, donde no se vive, las que no toman decisiones, dónde no se va.

- Una invisibilización...

- Es lo que ocurre con las regiones y a la vez dentro de las regiones se produce centralismo. Es tanto un esquema de administración como un esquema de pensamiento. La lógica patriarcal atraviesa todo tipo de estructuras. Pasa hasta en las Juntas de Vecinos. Pero para cambiar hay que empezar.

- ¿Este cambio de visión debiera partir en los colegios?

- La educación no debe ser solo instrucción, sino que cambios de paradigma. Si queremos una sociedad distinta hay que cambiar todo lo que haga posible los cambios culturales y eso no pasa solo por una ley.

- ¿Y cómo ve el escenario en el Congreso?, ¿hay ganas de verdad por descentralizar?

- Hay más conciencia. A lo mejor no están todas las condiciones porque no hay confianza en los alcaldes, pero tampoco es capaz de generar los mecanismos para crear esa confianza y castigar aquellos que cometen errores porque también hay mucho "laissez faire". El Estado no confía, pero tampoco genera los mecanismos para controlar. Omite y mira demasiado para el lado.

"Los procesos de consulta aparecen cuando la gente comienza a alegar. Nunca es un proceso previo. Es la visión del dominador de que aquí se hace lo que yo quiera" "Hay mucho 'laissez faire'. El Estado no confía, pero tampoco genera los mecanismos para controlar. Omite y mira demasiado para el lado"

"El centralismo es tanto un esquema de administración como de pensamiento. La lógica patriarcal atraviesa todo tipo de estructuras. Pasa hasta en las Juntas de Vecinos"

Entrevista. Cristina Girardi, diputada (PPD) y exalcaldesa de Cerro Navia, analiza regionalización: