Tomás Moggia C.

Dispar suerte corrieron las dos categorías de cadetes de Santiago Wanderers que ayer enfrentaron a Palestino por la final del Fútbol Joven en Quilín, donde si por un lado la Sub 19 cayó por 3-1, la Sub 16 cobró revancha y venció por la cuenta mínima a los árabes.

En primera instancia, a eso de las 11 horas la Sub 19 dirigida por Héctor Robles salió a la cancha para enfrentar a su similar de Palestino. Fue un encuentro trabado desde el arranque, donde el desequilibro recién llegó a contar del segundo tiempo.

Fue así como a los 50' Leonardo Uribe abrió el marcador para los árabes, aunque el Decano encontró el empate cinco minutos después gracias a Manuel Avello. Sin embargo, un dudoso penal fue cambiado por gol por Yerko Rojas a los 57', lo que golpeó fuertemente a los dirigidos por Robles, que a los 85' sufrieron el tercero por obra de Sebastián Urra.

De esta forma, Palestino dio la tercera vuelta olímpica de su historia en la categoría tras los títulos del Apertura y Clausura del 2012.

"Fue un partido muy duro y disputado. Había que cometer muy pocos errores. Ellos tuvieron la sapiencia de poder convertir en el momento justo. Nosotros en el primer tiempo tuvimos dos o tres ocasiones muy claras para definir el partido y no lo pudimos hacer. Después, con buen fútbol y llegadas claras pudimos empatar, pero luego no pudimos sostenerlo. Creo que el penal nos liquidó en el aspecto anímico, costó levantar al equipo, tratamos, luchamos, pero nos costó mucho", reconoció el DT Héctor Robles tras el encuentro.

Campeones verdes

A eso de las 17 horas, la Sub 16 de Santiago Wanderers salió a la cancha para el choque ante Palestino. Fue un encuentro parejo de principio a fin, donde recién a los 50' llegó el único gol del partido, obra de Gabriel Rojas, que a fin de cuentas le dio el título a los dirigidos por Santiago Pizarro.

"Estuvo súper difícil el partido, contra un gran rival, pero tuvimos la fortaleza para sacarlo adelante. El primer tiempo fue parejo, nos tuvieron un poco apremiados. Ellos fueron machacando en grupo y empezaron a llegar de a poco, era un equipo muy bien trabajado físicamente, entonces nos anduvimos debilitando. Pero en el segundo tiempo sacamos otro aire y tuvimos la fuerza para ponernos arriba en el marcador y después empezamos a trabajar el partido", señaló el DT.

"Terminamos con tres jugadores acalambrados, pero contento con este logro tan importante, que se vuelve a repetir porque hace dos años también fuimos campeones en Sub 14. Eso habla muy bien del grupo, no quiero hablar cosas de más, pero está llamada a ser la categoría del futuro de Wanderers", sentenció un ilusionado Santiago Pizarro.