Claudio Ramírez
Una de las metas que tiene el Gobierno para el próximo año es aumentar la productividad y una de las aristas para lograr eses objetivo está dado por los llamados programas estratégicos que en el caso de la región de Valparaíso apuntan a dos áreas específicas: la industria creativa y la fruticultura sustentable.
"No es que vaya a ser un trabajo exclusivo en esos sectores, sino que va a tener un foco particular en esas áreas", aclara el jefe de la División de Innovación del Ministerio de Economía, Andrés Zahler, que llegó a la región a explicar lo que serán los programas para este año.
"Valparaíso tiene claramente un potencial gigantesco de desarrollo hacia el futuro en muchas áreas (...) y lo que está detrás de la política de innovación del Gobierno es cómo logramos que las empresas mejoren y se creen productos y servicios que le den mayor nivel de vida y oportunidades a las personas", comenta el ejecutivo.
-¿Qué rol juega la innovación en la práctica para mejorar la economía del país?
-En general la innovación es el principal mecanismo que tiene el país de incrementar la productividad, incorporando nuevo conocimiento a la producción. Además, es la clave para transformar nuestra economía, muy basada en recursos naturales, a una que lo haga en sofisticación, en servicios más avanzados y agregando valor.
Un riesgo
-¿Las empresas apuestan a la innovación más que antes o aún son reacias a incorporar esta variable?
-En ese sentido, me gustaría que estuviéramos en una etapa más avanzada. Aún a las empresas en Chile no les pica el bichito de la innovación como quisiéramos. El Estado todavía es quien está disponiendo más recursos orientados a ella y considero que las empresas siguen estando un poco más atrás.
-A su juicio, a qué se debe esto ¿Lo consideran un riesgo quizás?
-Bueno, claramente el tema del riesgo es importante. Creo que también predomina una visión muy cortoplacista de tener resultados inmediatos. Ahora, la innovación siempre toma un tiempo, pero está demostrado en todas partes que los retornos que produce son altísimos.
-¿Pero es una posibilidad que existe?
-Hay riesgo de que no resulte y parte del apoyo público justamente apunta a bajar el costo de ese riesgo, a través del cofinanciamiento para innovación y emprendimiento que hace el Estado a través de Corfo. En ese sentido es un desafío para las empresas que se sumen a esto, que la innovación sea parte central de su negocio y no solamente un experimento, sino que el ir mejorando sus productos como parte esencial del trabajo de la empresa. Eso va a generar sin duda más productividad, más valor y mejores salarios para los empleados y también para el dueño de la empresa.
-Esta alianza público-privada también se da en este escenario entonces...
-Pienso que una de las cosas en que Chile todavía está muy atrás y tiene un desafío muy grande es en asociatividad y cooperación para innovar y generara más valor. Mientras más complejos son los productos que se hacen, más trabajo colaborativo requieren ya sea de universidades, clientes u otras empresas. En este ámbito Chile es muy malo.
-¿Por un clima de desconfianza?
-Bueno, Chile está entre los países con menos confianza tanto entre las personas como con las empresas y por lo tanto hace más difícil que esto ocurra. Y por lo mismo, los esfuerzos que se están haciendo para generar alianzas público-privadas -en este caso en torno a áreas específicas- es muy importante, no solo porque va a permitir generar proyectos innovadores, sino porque la generación en sí misma de confianzas entre privados y con el sector público tiene un valor en sí mismo que va a permitir a futuro mejores proyectos, mejor trabajo y más valor.
-Hay dos incubadoras de la región entre las Top 20 del mundo, ¿Cómo ayuda eso a este proceso?
-Esa fue una noticia muy buena para nosotros y confirma que Valparaíso tiene un enorme potencial de emprendimiento, de innovación y de crecer en torno a áreas que son muy interesantes. Todo los que son emprendimientos y coworking que se están instalando y también en el caso de las incubadoras, muchas tienen que ver con proyectos de tecnología de la información y eso está relacionado directamente al área de las industrias creativas.
-¿A qué responde que la región de Valparaíso se vaya a enfocar en industria creativa y agricultura fundamentalmente en el marco de estos programas?
-No es que vaya a ser un trabajo exclusivo en esos sectores, sino que va a tener un foco particular en esas áreas. Esta es una definición que viene y que fue tomada por la misma ciudad, tanto a nivel de gobierno regional como, asumo, con consulta a los sectores privado y académico, en que se determinó que son áreas en que vale la pena concentrar, dada la herencia cultural que tiene Valparaíso y un sector donde hay mucha producción en la región como es el agrícola.
-¿Y cómo se pueden potenciar estos sectores?
-Hay que ver cómo poder potenciar, coordinar y elevar la calidad de lo que se hace en esta ciudad a nivel latinoamericano e inclusive mundial en lo que es industria creativa, eso es lo que busca este programa; y en lo que respecta al tema frutícola es cómo tu incorporas tecnología y conocimiento no solo con el afán de producir más fruta, sino que hacerlo a menores costos, en forma más limpia y de manera más tecnologizada. Esto va a permitir no sólo desarrollar la fruticultura, sino servicios que en sí mismos van a formar un nuevo sector con la ayuda de tecnología. Eso es lo que buscan estos programas.
-Esta focalización en un par de áreas, ¿buscan de alguna manera optimizar los recursos?
-Para innovar tú necesitas ciertas masas críticas mínimas para ir construyendo en base a cosas aprendidas que son necesarias para el país. Entonces solamente poner fichas en cualquier lado es muy necesario, pero es insuficiente. Se necesitan ciertos focos en que una ciudad o un área pueda construir en sí misma y generar mucho más valor porque se respaldan entre empresas y se generan alianzas. Y en este caso la región, puede potenciarse. Por eso se requiere que haya espacios transversales, pero también espacios focalizados en torno a ciertas áreas. Y en lo que respecta a la región esos sectores tienen mucho futuro.
-Todos los presupuestos de estos programas están asegurados para este año, pese al bajo crecimiento que se conoció en el Imacec.
-Son presupuestos de Corfo que aportan a la gestión de estos programas. En lo concreto el funcionamiento del programa tiene financiamiento y no corre peligro (...) los innovadores de la región tienen que informarse porque habrá muchos llamados.
"Aún a las empresas en Chile no les pica el bichito de la innovación como quisiéramos. El Estado todavía es quien está disponiendo más recursos"
"Chile está entre los países con menos confianza tanto entre las personas como con las empresas y, por lo tanto, hacen más difícil que esto (asociatividad) ocurra"