Cabe consignar que el informe más tajante es el de la Municipalidad de Concón, representado por el alcalde Óscar Sumonte, que propone que el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la termoeléctrica "Nueva ERA" sea rechazado.

"El estudio carece de información relevante y/o esencial, toda vez que no es posible evaluar la presencia o generación de efectos, características o circunstancias que generen riesgo a la salud de la población, tanto para consecuencias a corto plazo como a largo plazo, considerando un proyecto a 20 años de operación", detalla el escrito.

Esto, agrega el documento, "no puede ser subsanado mediante aclaraciones, rectificaciones o ampliaciones (ICSARA) por carecer de una línea base adecuada, sólida y consistente, y por ende, una consecuente y correcta valoración de los impactos y riesgos a la salud de la población, que por lo demás fueron desestimados del todo por el titular".

En las observaciones el municipio deja establecido que falta un análisis de los campos electromagnéticos que podrían generar graves enfermedades en la población, como cáncer pulmonar o leucemia.

Además, detallan que no existe información en el estudio del proyecto que dé cuenta de qué normas de referencia internacional ocuparán para determinar que no hay riesgo para la salud de las personas en una zona que está declarada como saturada y que también está dentro de un Plan de Descontaminación por parte del Gobierno.

Precisan que el proyecto de Enap -tras su análisis- tiene errores de cartografía en el área de influencia, no considera las emisiones de gas radón que son normadas, existe una falta de elementos químicos y no incorpora la norma Primaria de Calidad de Estados.

Además, describen, "Nueva ERA" no incorpora un proyecto de conectividad, compromisos ambientales y no concuerda con el plan turístico.