Paolo Navia S.
Los altos índices de delincuencia que se han registrado durante la actual temporada estival en la región, y que están vinculados principalmente con robos y asaltos a turistas, propiciaron que el municipio porteño levante una voz de alerta en torno a la cantidad y distribución de los efectivos policiales que llegan a la zona desde Santiago durante el verano, bajo el antecedente de que el crecimiento de la población flotante ocurre tanto en Valparaíso, como en Viña del Mar y Concón.
En el caso de estas dos últimas comunas, al ser calificadas como "balnearios", cuentan con un mayor apoyo desde el nivel central, organismo desde el cual cada verano emana un contingente de apoyo con efectivos de Carabineros enfocados en el resguardo de los turistas.
Este apoyo no lo recibe la Municipalidad de Valparaíso, expuso el alcalde Jorge Castro, quien propuso la creación de una unidad de seguridad ciudadana que, bajo el concepto de policía comunal, se encargue del resguardo durante el verano de los sectores patrimoniales y los eventos masivos organizados en la comuna.
Funciones de la policía
En cuanto a las características que tendría la denominada policía comunal, el alcalde de Valparaíso precisó que la intención es que este organismo pueda resguardar situaciones tan comunes como beber y orinar en la vía pública, regular el tránsito en sectores en donde existan colegios, hacerse cargo de las vías de evacuación en eventos deportivos y culturales, además de poder tomar el control de la información que se obtiene a través de las cámaras de televigilancia, con atribuciones reales.
"En Valparaíso tenemos un jurel tipo salmón en seguridad. Es decir, a Carabineros les gusta que tengamos cámaras de televigilancia, porque ayudan, pero están siendo ejecutadas por funcionarios municipales para finalmente entregarles la información a ellos, y yo creo que una parte de esa información podría estar a cargo de una policía comunal, para saber, por ejemplo, las infracciones de tránsito o los problemas con el comercio ambulante", precisó Castro.
La máxima autoridad municipal propuso utilizar perros que actualmente se encuentran en el canil de Laguna Verde para acciones de persuasión, situación que según su análisis, ayudaría a disminuir la sobrepoblación de canes abandonados que llegan diariamente hasta este centro de adopción, donde la mantención de un perro es de $130 mil mensuales.
Opiniones contrarias
Ante este panorama, dispar fue el apoyo que la iniciativa recibió desde el Concejo Municipal de Valparaíso.
Quien vio con buenos ojos la creación de una policía comunal, fue el concejal Luis Soto (UDI), presidente de la comisión de Seguridad Ciudadana, quien valoró la idea de generar un organismo a través de los fondos que el Gobierno destina a la creación de proyectos de este tipo.
"El año pasado, el Gobierno creó una cantidad se recursos que fueron destinados a más de 70 ciudades de Chile en materia de seguridad pública, y Valparaíso se adjudicó $700 millones, presupuesto desde donde perfectamente se puede crear una policía comunal", expuso Soto.
Esta opinión contrasta con la expuesta por Paula Quintana (PS), quien expresó que la creación de un cuerpo de este tipo sería ilegal, y que más bien, los esfuerzos municipales se deben enfocar en temas básicos, como abrir los baños públicos durante la noche.
"Yo estoy en contra de una policía comunal, y más bien estoy a favor que se cuente con una programa de gestión más integral, con soluciones más fáciles, como pagarles un turno extra a los funcionarios municipales y que se abran los baños públicos durante la noche", finalizó la concejala.
"El Gobierno creó una cantidad de recursos en materia de seguridad pública, desde donde perfectamente se puede crear una Policía Comunal".
Luis Soto Concejal de Valparaíso
"Estoy en contra de una Policía Comunal, y más bien, estoy a favor de soluciones más fáciles, como que se abran los baños públicos durante la noche".
Paula Quintana Concejala de Valparaíso