En medio de las actividades de Semana Santa que se llevan a cabo en la región, el obispo de Valparaíso, Gonzalo Duarte, llegó hasta la comuna de Limache para otorgarle su apoyo a las religiosas pasionistas que administran el establecimiento que resultó totalmente destruido.

Tras recorrer las instalaciones de la Iglesia de las 40 Horas, aledaña al establecimiento siniestrado, el monseñor Duarte otorgó su apoyo a la comunidad educativa, dando gracias también porque la tragedia no significó la pérdida de ninguna vida.

"El colegio se quemó totalmente, esa es la triste realidad, pero el Santuario de las 40 horas que es vecino gracias a Dios no le paso nada (…) En medio de la desgracia le damos gracias a Dios porque esto no ocurrió en medio de horas de clases porque si no hubiese sido una tragedia", aseveró el obispo de Valparaíso.

El incendio que arrasó con el Colegio Pasionista también representó un peligro para la Iglesia de las 40 Horas, dado que el santuario se encuentra a un costado del establecimiento. Por esta razón, personas del voluntariado optaron por retirar los archivos y objetos de valor del recinto católico.

"Aquí en 1954 tuvimos un gran incendio que arrasó con el templo, por eso igual teníamos una profunda preocupación por la Iglesia. Gracias a Dios, Bomberos y voluntarios pudimos evacuar cosas importantes como el archivo y también las imágenes de valor", explicó el párroco Mario Lisperguer.

El padre añadió que en la década del 50 se tomó la determinación de construir muros de concreto, lo que habría ayudado a que las llamas no se propagaran hacia el Santuario.