Contra el negocio del aborto
Es deseable que el Congreso disponga los medios legales para impedir el tráfico de seres humanos.
Parece inminente que el Congreso Nacional apruebe la ley que autoriza el aborto de seres humanos en tres casos, por inconstitucional que sea el proyecto y criminal su designio. Pero al menos podría legislarse paralelamente para impedir una repugnante consecuencia del aborto legal, cual es el tráfico de embriones, fetos y miembros de unos y otros con fines terapéuticos, estéticos y otros. De lo contrario, como ya acaece en muchos países, también en Chile se desencadenará un comercio del género, si es que éste no ha sido una de las motivaciones que alguien haya tenido para impulsar el proyecto de ley.
Puede ocurrir lo mismo que con drogas, como la marihuana (pudorosamente llamada por muchos con su nombre científico de "cannabis", quienes se enojan si se les dice que se trata de la marihuana). Para defender y justificar la liberalización del cultivo y uso privado de la marihuana se ha argumentado la existencia de fines terapéuticos supervigilados por un médico. Pero, que yo sepa, una droga mucho más peligrosa que la marihuana como la "morfina" suele administrarse a ciertos enfermos por prescripción médica y nunca nadie ha dicho que eso es delictual. Así que debemos sospechar que el interés es autorizar el cultivo de la marihuana para su tráfico, so pretexto del consumo con fines terapéuticos. Que el lector se acuerde esta predicción cuando fuere el caso en el futuro.
De esta manera, es deseable que el Congreso Nacional disponga los medios legales necesarios para impedir, o estorbar al menos, el tráfico de seres humanos matados antes de nacer y de sus órganos. Dentro del mal que causa la legislación pro aborto que está por aprobarse, con medidas como las que acabo de sugerir se paliaría una de sus consecuencias socialmente más repulsivas.
Alejandro Guzmán
Catedrático de universidad, abogado