"El Control Preventivo de Identidad es necesario y más garantista que lo que hoy está vigente"
"Sin seguridad no hay libertad", sentencia el senador PPD y miembro de la Comisión de Constitución, Felipe Harboe, al reflexionar sobre las críticas que desató al interior de parte de la Nueva Mayoría la aprobación del llamado Control Preventivo de Identidad (CPI), en el marco de la agenda corta antidelincuencia. "Uno no siempre tiene que levantar banderas que sirvan para el aplauso, sino que aquellas cosas que son correctas para el país. Reivindico que los temas de seguridad abordados integralmente son una política fundamental y no son un reducto de la derecha", subraya el parlamentario, quien reconoce que, tras 20 años de estar trabajando el tema, se siente algo solitario.
- ¿Por qué le preocupa la seguridad?
- La agenda corta responde a una realidad. Las estadísticas dicen que más de un millón 130 mil hogares fueron victimizados y el 87,7%, o sea, casi nueve de cada 10 hogares victimizados, pertenecen al C3 y D, o sea, clase media súper esforzada. Esto echa por tierra el mito de que esta agenda es para proteger a los más ricos, sino que es para la clase media, la gente que compra su bicicleta, se la roban y debe seguir pagando las cuotas; la gente que no tiene plata para alarmas; no tiene cerco eléctrico ni personal que trabaja en la casa. Lo único que tiene es la seguridad pública. Lo que hace esta ley es que le consulta a los operadores del sistema, a las policías y a los fiscales cuáles son los principales nudos para disminuir la victimización en esos sectores. Y se hace cargo con cerca de 30 modificaciones.
- ¿Como cuáles?
- Por ejemplo, que si un delincuente es filmado robando y se le detiene 5 meses después, se le aplican las normas como si fuera un acto flagrante y así las condenas son más largas o impide que los jueces rebajen las sanciones penales aun cuando haya atenuantes.
- Pero todo este debate al final queda opacado porque la crítica se ha centrado en el CPI...
- Sí, es un poco injusto, porque hoy el control de identidad existe. Es una realidad. Uno puede meterse a Google y buscar operativos policiales preventivos en Chile y van salir los controles que hace la PDI y Carabineros desde hace más de seis años.
- ¿Y cuál es la diferencia?
- Hoy Carabineros ocupa la norma del artículo 85 del Código Procesal Penal que establece el control de identidad investigativo y lo utiliza como preventivo. Y esa norma dice que se puede hacer el control de identidad y que en caso de no poder identificar a la persona, la puede llevar hasta 8 horas a la unidad policial. No distingue entre menores o adultos. Y en consecuencia, a todo mayor de 14 lo pueden llevar 8 horas. La Cámara de Diputados quiso modificar esto creando el CPI y ¡oh, sorpresa!, los diputados que hoy reclaman aprobaron una indicación que contó con 88 votos que permitía controlar a cualquier persona en el lugar en que se encontrare. Esto permite que las policías controlen, incluso, en su casa, y a cualquier persona, o sea, hasta un menor de 3 años. Y como esto es abusivo, en la comisión de Constitución del Senado entramos a regular lo que en la práctica existe y crear más derechos ciudadanos.
- ¿En qué sentido?
- Hoy el CPI existe y no hay ningún derecho a reclamar. Entonces, con el proyecto hay que controlar a las personas sólo en lugares públicos de acceso público; al inicio del control el policía tiene que identificarse; si se trata de un menor de 18 y mayor de 14 debe buscar sus padres; la segunda gestión es utilizar medios tecnológicos en el lugar para identificarlo; tercero, pedirle una credencial. Y si así y todo no pudiera identificarlo, lo podrá conducir a una unidad policial máximo por una hora. Ahora, si esa persona controlada se siente violentada habrá un procedimiento de reclamo, cosa que hoy no existe. Si el policía abusa de esta facultad de control adicionalmente a las sanciones penales, tendrá una sanción en la hoja de vida que le afectará la carrera. Y para evitar que esto se aplique en forma discriminatoria, las policías tienen que reportarle al Ministerio del Interior cada seis meses las estadísticas.
- ¿Cuál es la relevancia del CPI?
- Cuando uno ve las estadísticas, el año 2015 Carabineros realizó más de un millón 800 mil CPI y eso ha significado la disminución de las órdenes de detención pendientes; o sea, está teniendo un impacto y adicionalmente actúa como elemento disuasivo. Ahora, nunca se va a poder saber cuántos delitos se evitan por el efecto disuasivo.
- ¿Y se ha medido el impacto?
- Es una herramienta que ha sido útil para sacar de circulación a delincuentes prófugos, hagámosla compatible con los derechos ciudadanos porque efectivamente se ha prestado para abusos y ahí Carabineros va a tener que hacer un proceso de capacitación mucho más exigente para exigir a sus funcionarios que apliquen estas normas con respeto. La norma aprobada por el Senado es más garantista que la que actualmente está vigente y para qué decir, mucho más garantista que la aprobada por la Cámara.
- ¿Cómo explica las críticas, especialmente de la Nueva Mayoría?
- La norma se la ha estereotipado y etiquetado porque no se ha leído qué significa. Hay un tema de mucho prejuicio porque Chile tiene un trauma en materia de seguridad. Yo también trabajé por la derogación de la detención por sospecha, pero esto, la CPI, no tiene nada que ver. El tema aquí es que el Gobierno no ha salido a explicar bien esto, ha habido una especie de etiquetamiento y ha habido una discusión elitista.
- ¿A qué atribuye el cambio en este grupo de diputados que aprobó una norma mucho más abusiva en la Cámara que se cambió en el Senado y que ahora critican?
- Yo creo que hay ciertos legisladores que no se dieron cuenta de lo que estaban presentado y luego votando. Pero es sorprendente que esos parlamentarios que aprobaron una norma mucho más abusiva, estén criticando lo que se aprobó en el Senado, que es una norma mucho más garantista. No leyeron lo que firmaron y votaron.
- Los senadores PS votaron en contra y los acusaron de travestismo.
- Era previsible esa votación, pero insisto, votar en contra de lo aprobado por el Senado es dejar vigente lo que hoy día hay, que es mucho más propenso a los abusos. Ahora, es muy probable que esto vaya a comisión mixta.
"En comisión mixta se verán los argumentos, pero es el Gobierno el que tiene que salir a explicar cómo les ha servido esta herramienta y por qué la justifican en esta agenda" "Un sector de la izquierda ha renunciado a los temas de seguridad y este es un tema muy progresista. La seguridad es más que control y sanción"