Tras la fusión con Hapag-Lloyd en el negocio de portacontenedores, uno de los sectores que administra la Compañía Sudamericana de Vapores (CSAV) es el del transporte de automóviles.

Un área que también ha sido complicada para la empresa dada la caída evidenciada en la venta de vehículos, no solo en Chile sino que en otros países.

"La baja en la venta de automóviles afecta el negocio, tenemos menos ingresos y volúmenes, pero en el resultado final hemos mantenido una estructura de costos muy flexible que nos ha permitido, cada vez que se achica el negocio -porque hay menos autos que se importan- irnos deshaciendo de los barcos, entonces hemos podido achicar costos. Ahora, obviamente que si esto se reduce indefinidamente nos va a afectar de manera muy severa", comentó el gerente general de CSAV, Oscar Hasbún.

Pese a ello, es optimista para lo que resta del año estimando que si se mantienen las condiciones actuales del mercado debería incrementarse entre un 10% y un 20% el 2016.

"Hemos crecido mucho en participación de mercado en los últimos doce meses por lo tanto si nada cambia vamos a vender más que el año pasado al mover más autos", explicó el ejecutivo que, por ahora, descarta que la compañía explore nuevas alternativas de negocios, a la espera que se equilibre el sector naviero.

"Por ahora estamos preocupados de mantener los costos bajo control por lo tanto invertir en barcos u otro tipo de insumos, si bien a largo plazo tiene sentido, hay que esperar que se estabilice el negocio y que empiece a crecer de nuevo porque ha caído mucho", lamenta.

Tarifas a la baja

Un tema que preocupa a CSAV y en general a la industria apunta a las tarifas que, producto del precio del petróleo y otros factores han bajado a niveles que las hacen insostenibles. "Este año está iniciando mucho más mal de lo que partió el pasado que vino de más a menos, sin embargo creemos que las tarifas de flete están en un nivel que no son sostenibles, por lo tanto es de esperar que haya algún tipo de mejora en las condiciones y que eso nos permita recuperar en el resto del año lo malo del primer trimestre", manifestó el personero.

Agregó que también se pueden mejorar todavía más en costos para hacer más viable la operación.

"Estamos convencidos que la compañía puede conseguir más ahorros durante el 2016 y hay varios planes también lanzados en esa dirección", enfatizó Hasbún.

Claudio Ramírez

La inesperada y pronunciada alza que mostró el desempleo en Santiago, llegando a un 9,4% para el mes de marzo, según un estudio de la Universidad de Chile, provocó inquietud en la región de cara al informe que dará a conocer el viernes el INE.

Esto, pese a que en la zona de acuerdo al informe de la entidad oficial, el índice de ocupación se ha mantenido estable bajo la línea del 7%.

"Nuestra región hasta la fecha no ha mostrado un aumento sustantivo en el desempleo, probablemente por aspectos metodológicos, pero adicionalmente porque los sectores económicos presentes en la región son intensivos en mano de obra", apunta el académico de la UST Viña del Mar, Piero Moltedo.

Proyecciones

Sin embargo, señala que no es extraño que aumente en los próximos meses si perdura el actual escenario económico, ya que esto genera desvinculaciones. "Sectores como la construcción, y otros que aportan muchos puestos de trabajo, enfrentarán periodos de declive en su quehacer. Por lo mismo, podríamos ver en los próximos meses un alza de hasta un punto y medio porcentual sobre valores del año anterior".

Al corto plazo las estimaciones son más leves. "El desempleo trimestral subirá a 6,7%, una cifra alta si se considera que es una medición de tres meses ¿La explicación? Una caída de casi un 50% de la edificación", apunta el economista Alejandro Maureira.

"El dólar tendrá un efecto positivo, no obstante, el empleo artificial que se creó en el sector inmobiliario producto de la reforma tributaria más el empleo fiscal, que disminuirá producto de una menor recaudación y crecimiento, hacen suponer que el mercado laboral se contraerá más rápido de lo que se piensa. Entonces y a pesar de existir atenuantes hay más agravantes presentes que llevan a concluir en un peor desempleo", agrega.

Desde el sector productivo, el presidente de la Cámara Regional de Comercio de Valparaíso (CRCP), Pier-Paolo Zaccarelli, dijo que el desempleo comenzará a aparecer en los próximos meses.

"Ciertos sectores que tuvieron una muy buena actividad en la temporada de verano, como el turismo (hoteles, restoranes y otros) y el comercio, verán disminuir la demanda, con el correspondiente efecto en el empleo, que en la mayoría de los casos es temporal", subrayó el líder gremial, destacando que tanto la tendencia mostrada por el empleo por cuenta propia, como la fuerza de trabajo, disminuyeron según la encuesta de la Universidad de Chile por lo que, a su juicio, probablemente se comportarán en forma similar en la región.

"Las propuestas y medidas deben ir en función de disipar la incertidumbre que ha afectado directamente el desarrollo de nuestro país y región. Nos parece que en nada ayuda la reforma laboral en trámite, porque dejó de lado las propuestas de mejoras señaladas por el sector privado, especialmente a aquellas que favorecen las mejores relaciones laborales, modernizando la legislación en función de los nuevos requerimientos del mercado y la sociedad", mencionó Zaccarelli.

En tanto desde el sector construcción, el titular de la CChC Valparaíso, Marcelo Pardo, evidenció su inquietud, alertando que todos los estudios e indicadores regionales como el Inacor, o la cantidad de permisos de edificación revelan que la actividad se estanca.

"Hay indicadores como los permisos de obra nueva del INE que muestra que los permisos cayeron más de 60% en 12 meses durante enero y 50% en febrero. Junto con ello nuestro informe inmobiliario da cuenta de una importante caída en las ventas de viviendas nuevas y en el ingreso de nuevos proyectos", comenta, agregando que esto se verá reflejado en el empleo.

"Hasta el momento no se había dejado sentir sólo por el dinamismo que el efecto IVA generó en el mercado inmobiliario y que significó que muchas empresas adelantaran sus proyectos, generando puestos de trabajo. Pero ese ciclo ya terminó", subraya Pardo, recalcando que según el último informe del INE, en la construcción trabajan 57.560 personas, pero en el trimestre móvil anterior eran 59.970 personas. "O sea, en un mes se perdieron casi 2.500 puestos", dijo, advirtiendo que en el segundo semestre la situación será peor.

Con cautela

En tanto, el seremi de Economía, Aland Tapia, enfatizó que el próximo índice no debiera reflejar en la zona lo mostrado por el estudio de la Universidad de Chile para Santiago. "Esperamos el informe del INE y como estas mediciones son trimestrales, y contempla parte de febrero, según nuestras estimaciones creemos que no debiera tener una significancia tan importante", dijo, añadiendo que la diversidad del territorio hace que exista una compensación por lo que si llegara a existir un aumento no debería ser tan pronunciado como el visto en la capital. "Pudiera ser pero no de la magnitud que vimos en Santiago", precisó.

En cuanto a las proyecciones hacia fin de año recordó las medidas que está tomando el Gobierno y que implican recursos.

"Sin duda es probable que notemos algún alza producto de que las actividades temporales estacionales quedan atrás, pero la variación no debería ser significativa", sentenció.

6,5% fue el último índice de desempleo regional para el trimestre móvil diciembre 2015-febrero 2016.

2.500 empleos se perdieron en el sector construcción, cuyo gremio advierte un estancamiento.