Alerta Desempleo
Rodrigo Navia Carvallo, Ph.D.
Académico, Escuela de Ingeniería Comercial PUCV
La semana pasada se entregaron las últimas cifras disponibles sobre la situación del mercado laboral. El golpe sobre la tasa de desempleo llamó la atención. La estimación hecha por el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, el que monitorea el comportamiento en el Gran Santiago, concluye que el desempleo aumentó desde un 6,3%, en marzo de 2015, a 9,4% en marzo de este año. Días después, el INE entregó las cifras que muestran una tendencia similar, pero con un incremento del desempleo más suave al comparar el primer trimestre de 2015 con el de este año.
Lamentablemente, esto confirma la alerta de una economía poco dinámica, que ya las tasas de crecimiento de la actividad económica mostraban, en los últimos años, y que por razones puntuales la tasa de desempleo había sido capaz de mantenerse estable, pero ahora sólo se espera un mayor deterioro, con una tasa de desempleo nacional superior al 7%, salvo que se produzcan cambios sorpresivos que estimulen el crecimiento y esto empuje al alza la contratación de trabajadores.
Cuando desde la economía uno habla de la importancia de estimular un crecimiento estable y robusto, que sea sostenido en el tiempo, es porque múltiples efectos beneficiosos se generan, entre ellos el que se crean puestos de trabajo para los que se integran al mercado laboral. No es magia, no es un decreto o una ley los que producen estos efectos. Ha sido un periodo muy largo, una década, incluso más, en que no se han generado las condiciones que estimulen esa fuerza que nos permita mover a esta economía de manera más dinámica, es tiempo de ponerse de acuerdo para retomar la senda de crecimiento.