El arquero y capitán de Santiago Wanderers, Mauricio Viana, fue detenido ayer en Limache tras golpear a un carabinero de civil, ocasionándole una lesión en la boca de carácter leve.

Debido a este incidente, el futbolista debió pasar la noche en la Tercera Comisaría de la ciudad donde reside, y hoy será sometido a un control de detención en el Tribunal de Garantía de la comuna.

Según lo relatado por el mayor de Carabineros Roberto Romero, personal de la policía uniformada acudió ayer al mediodía hasta la población Orval debido a una llamada telefónica de auxilio realizada por Viana.

El golero del Decano caminaba con su madre por el sector cuando fue interceptado por dos personas que lo habrían amenazado con un arma de fuego, según relató el jugador.

Un furgón policial llegó hasta el sector y detuvo a los supuestos asaltantes, que fueron identificados por el arquero caturro.

Cuando los sujetos eran subidos esposados al carro de Carabineros, según relata el oficial Romero, Mauricio Viana se abalanzó sobre ellos con la intención de agredirlos.

Un sargento que participaba en la detención y estaba de civil, pero con su placa a la vista, de acuerdo al relato de los policías, intentó detener al futbolista para evitar que lastimara a los supuestos asaltantes y en ese minuto recibió un golpe de puño en la boca por parte del capitán de Santiago Wanderers.

Lesión leve

El suboficial constató su lesión, la que fue caratulada como leve, mientras que Viana fue detenido por su agresión al carabinero.

Desde el Ministerio Público se informó que el jugador del club porteño se deberá presentar hoy por la mañana al Tribunal de Garantía limachino, después de pasar la noche arrestado en una unidad de la policía uniformada.

Nelson Hevia, jefe de seguridad de Santiago Wanderers, concurrió ayer hasta Limache para apoyar a Mauricio Viana. La defensa del cuidavallas del Decano será asumida por el abogado Rafael González Camus, quien además es director de la sociedad anónima que concesiona al club caturro.

Tomás Moggia C.

Cuando se encontraba en la recta final de su recuperación del corte de ligamentos que sufrió en una de sus rodillas, Nicolás Peñailillo padeció a fines de abril un neumotórax espontáneo que terminó por sepultar sus deseos de ser partícipe de la final que devolvió a Everton a Primera.

"Fue complicado porque estaba casi listo para volver a jugar, venía con todas las ganas de mostrarme, y justo me pasó eso en el pulmón. Pero después me puse a pensar más tranquilo y con mi polola llegamos a la conclusión de que por algo pasan las cosas, quizá como a mi rodilla le faltaba un poco todavía, podría haber corrido el riesgo de volver a pasar una lesión importante", reflexiona el lateral, quien el jueves pasado recibió el alta médica tras la perforación que sufrió en los pulmones.

"Riesgos a futuro no hay. El doctor que me operó dijo que no corro el riesgo de que me pase nunca más. No fue tan complicado como yo pensaba", agrega el canterano.

Pese a todo, fue una situación que al menos no le privó de ser un hincha más en la final de vuelta en Puerto Montt, donde disfrutó desde la galería el retorno de los oro y cielo a la máxima categoría.

"Para mí fue especial, más allá de que no me tocó jugar, ver el partido desde la galería con la gente de Everton, ver cómo cantaban todo el partido, la verdad es que va a ser un día que no creo que olvide fácilmente. Fue un ascenso diferente, pero a la vez emocionante por haberlo vivido en otro estadio y con la gente que hace mucho no veía", confesó el carrilero auriazul.

Haciendo un balance de lo que fue esta temporada, Peñailillo la calificó como de dulce y agraz, dado que en el primer semestre alcanzó un notable rendimiento, pero en el segundo las lesiones no lo dejaron mantener la regularidad.

"A pesar de lo malo, me di cuenta que puedo ser un jugador importante para el equipo. En el primer campeonato anduve muy bien, y tengo que aspirar a eso y a más. Estoy pensando todos los días en que puedo ser un gran aporte para lo que viene en Primera y de una vez por todas consolidarme, y por qué no pensar algún día estar en la Selección Chilena, muchos me han dicho que tengo todo para estar, entonces tengo que creeerme más el cuento y ojalá se pueda hacer realidad", aseguró el lateral.

Sin vacaciones

Con ese objetivo en mente es que hoy en día Nicolás Peñailillo se encuentra entrenando sin descanso para llegar de la mejor forma posible al 20 de junio, día en que Everton volverá a los entrenamientos. De hecho, el jugador ni siquiera se tomará vacaciones con la intención de recuperar cuanto antes el tiempo perdido y llegar con algo de ventaja a la pretemporada.

Es así como a contar de la próxima semana, el defensor comenzará con trabajos de fortalecimiento muscular en Santiago junto a especialistas en biomecánica para superar definitivamente su lesión a la rodilla.

"Espero ser un aporte en Primera y dejar atrás todo este tipo de lesiones y problemas que tuve el último tiempo. Everton está para grandes cosas, si conforman un buen equipo por qué no podríamos pelear un campeonato y cosas importantes", sentencia Peñailillo con optimismo.

"Pienso todos los días en que puedo ser un gran aporte para lo que viene en Primera y de una vez por todas consolidarme"

Nicolás Peñailillo, Defensor de Everton

899 minutos sumó el carrilero en la temporada, donde debido a su lesión no pudo jugar el segundo semestre.

6 meses han pasado desde la última vez que jugó Peñailillo. Se lesionó a mediados de noviembre del 2015.