Olivares
Hoy se debate el financiamiento de la educación superior con mayores aportes fiscales, pero, ¿es viable que el Estado obtenga mayores recursos a través de más impuestos? Para algunos, la respuesta puede ser definitivamente sí, mientras que para otros, un rotundo no. La pregunta ha generado un amplio debate a nivel nacional. Para analizar la viabilidad de una iniciativa de estas características, es necesario tener en cuenta varias consideraciones. Los impuestos tienen un efecto directo e indirecto sobre el mercado al cual se aplican. Para entender dichos efectos, a continuación se explican los conceptos más relevantes.
¿Qué entendemos por mercado?
Es aquel lugar físico o virtual donde se une la oferta y la demanda de un determinado bien o servicio para ser transado. Es así como nacen los conceptos de oferta y demanda, siendo cada uno de ellos el conjunto de vendedores y compradores, respectivamente, de un determinado bien o servicio.
Mientras mayor sea el precio del mercado, mayor será la cantidad de vendedores dispuestos a ofrecer sus productos, ya que alcanzan a cubrir sus costos y sus expectativas de rentabilidad. En el caso de la demanda, mientras menor sea el precio del mercado, mayor será la cantidad de consumidores dispuestos a adquirir dicho bien, ya sea por preferencias, ingresos o expectativas.
La elasticidad
Cuando baja el precio de un bien, el aumento de la cantidad que los consumidores requerirán no está en una relación 1 a 1. Por ejemplo: si disminuye el precio de las operaciones cardíacas, un consumidor no se va a sentir motivado a operarse más del corazón; lo mismo ocurre con los medicamentos. O bien, si aumenta levemente el precio del pan en nuestro país, no disminuiría el consumo. Es así como surge el concepto de elasticidad, el cual mide la sensibilidad de la cantidad ante un cambio en el precio.
Este concepto responde al cuestionamiento de cuánto cambia la cantidad consumida u ofrecida frente a una variación en el precio. Normalmente, los bienes con características de imprescindibles -como el agua, la salud o alimentos básicos-, tienen un comportamiento relativamente inelástico, es decir, la cantidad demandada no variará mayormente frente a cambios en el precio. Por otra parte, los bienes suntuarios -como los tecnológicos y el vestuario de moda-, pueden ser más elásticos; frente a cambios de precios, la cantidad demanda de estos bienes variará significativamente.
Los impuestos
Impuesto se entiende como una parte del precio que tiene un bien y que recauda el Fisco. ¿Para qué recauda impuestos el Estado? Para pagar sus gastos, que están en el presupuesto de la nación: sueldos y salarios públicos, defensa nacional, subsidios habitacionales, obras viales, etc.
Estos gastos no los cancela el mercado a través de la oferta y la demanda, ya sea porque los privados no están dispuestos a pagarlos por sí mismos, porque su precio es muy difícil de ser llevado a las personas, o para corregir ciertas externalidades negativas que se producen al consumir dichos bienes, como sucede con el impuesto al tabaco. Este impuesto tiene como objetivo no sólo recaudar impuestos para los gastos fiscales, sino también reducir el consumo de dicho bien por su potencial daño a la salud.
Mercado, elasticidad e impuestos
Considerando estos tres elementos, es una difícil tarea para el Gobierno fijar una tasa de impuestos sobre un determinado bien. Y esto porque la implicancia de un impuesto es que sube el precio de un bien. Es lo que sucede con el IVA (Impuesto al Valor Agregado) de 19%: si el kilo de pan vale $1.000 más IVA, el consumidor paga $1.190. Sin embargo, el Fisco debe analizar el impacto social de dicho impuesto, en cuanto al costo y al beneficio que éste conlleva.
Sin duda que una carga sobre un bien inelástico permitirá recaudar una gran cantidad de impuestos, ya que el consumidor estará dispuesto a pagarla, como ocurre, por ejemplo, con el pan. A su vez, el Fisco deberá evaluar también el costo social de aplicar una medida de este tipo, la que podría resultar altamente impopular.
Por otra parte, si el Fisco considera aplicar un impuesto sobre bienes suntuarios, resulta ser una medida más aceptable por la ciudadanía, sin embargo, por tratarse de bienes elásticos, la recaudación del Fisco podría ser menor a la esperada, porque disminuye la cantidad demandada frente a alzas en el precio.
El financiamiento de distintas reformas, como la educacional, vía alza de impuestos, es una labor compleja, conlleva partidarios y detractores, efectos económicos, sociales y políticos que el Gobierno de turno deberá también considerar a la hora de evaluar propuestas que apunten, efectivamente, a un bien común.