La Filosofía: ¿Qué hacer?
Todos los hombres tienden por naturaleza al saber, la necesidad de conocer y explicarse el mundo, las cosas.
Nuevamente hacemos uso de estas columnas para referirnos a la enseñanza de la Filosofía. Lo habíamos hecho cuando durante el gobierno del Presidente Ricardo Lagos, se intentó suprimir como ramo obligatorio, y en el régimen actual se pretende hacerlo optativo o asimilarlo a otra asignatura.
Hemos titulado estas líneas con la interrogante ¿qué hacer?, porque estimamos que no sólo no se debe suprimir la enseñanza del ramo de Filosofía, reducir sus horas o asimilarlo a otra asignatura, sino que aumentar su enseñanza.
La filosofía es una reflexión sobre los grandes temas del pensamiento humano; nadie que se precie de ser persona puede dejar de sentir inquietud de conocer lo que los grandes filósofos han pensado sobre los problemas fundamentales del ser humano.
En el mundo actual, desorientado en cuanto a los valores que inspiran la vida, desorientación que se nota principalmente en la juventud, el que los educandos tengan la enseñanza de una asignatura, como la Filosofía, que les enseña a pensar y lo enfrenta a los problemas fundamentales de la existencia es de máxima importancia.
Todos los hombres tienden por naturaleza al saber, la necesidad de conocer y explicarse el mundo, las cosas, su vida es algo que está en la naturaleza misma del hombre es inherente a su propio ser.
Conociendo el pensamiento de los grandes filósofos, encontrarán los estudiantes compensación ventajosa al reconocer que los problemas que se plantean están mucho más en conjunción con los de nuestro tiempo y aún con nuestras propias vidas, pues al objeto de su estudio somos nosotros mismos.
No existe, pues, razón alguna para suprimir o disminuir de los planes de estudio la enseñanza de la Filosofía, por ser un ramo que aporta a la reflexión sobre temas fundamentales de la existencia, principalmente en nuestro país que está pasando por una grave crisis de formación de los jóvenes, quienes se encuentran desorientados respecto a los valores que deben orientar sus vidas.
Nos complace constatar que la idea planteada por nuestras autoridades educacionales, haya suscitado numerosos artículos, estudios y reflexiones que coinciden con lo expuesto en estas líneas, pues el hombre está, quiera o no, destinado a la Filosofía, que es una de las bellas cosas que puede haber en la vida. El que una vez haya entrado en contacto con un auténtico filósofo, se sentirá siempre atraído por él.
Alfredo Mateluna Gardeazábal
Abogado