"No podemos predecir lo que hará Trump, pero habrá que entenderse con él, dialogar con él"
Heraldo Muñoz
Ministro de Relaciones Exteriores
"Hay un interés de perjudicarme y de persecución política"
Cristián Labbé
Excoronel del Ejército y exalcalde de Providencia, tras ser notificado en la Corte de Apelaciones de Valparaíso de su procesamiento
Las ballenas ya empiezan a acercarse a Valparaíso. En esos últimos días han aparecido algunas que varios botes intentaron perseguir, pero inútilmente. Si se presentan en cardumen, como hace tres años, tendremos diversión, porque volverán los fleteros a improvisarse como balleneros y habrá pesca todos los días.
En circunstancias que el coche de Las Hermanitas de los Pobres estaba ayer detenido en calle Valparaíso, esquina de calle Quillota, de pronto los caballos iniciaron una veloz carrera, yéndose a estrellar contra un poste de la Compañía Inglesa de Teléfonos, que fue quebrado. El conductor del coche quedó con contusiones.
En sentencia dictada por la Corte de Apelaciones de Valparaíso, fue condenado a la pena de muerte el reo Nicolás Arancibia Muñoz, autor del homicidio de su conviviente y del parricidio de su hijo, Percy Rosendo, de 1 año y medio. El hecho, que conmovió al país, ocurrió el 6 de marzo de 1963 y es conocido como "el crimen de los tarros de leche".
Estudio sobre estudio. Informe sobre informe. Se amontonan los documentos. En fin, la conclusión real es siempre la misma: hay una constante agresión al medioambiente en la bahía de Quintero y su entorno. Y así, con buenas palabras, lo reconoce el intendente, Gabriel Aldoney, aludiendo al último informe del Instituto de Fomento Pesquero (IFOP): "Resultados que no son sorpresivos en relación con otros estudios que se han realizado anteriormente".
Y no pueden ser sorpresivos dada la suma de actividades potencialmente contaminantes que se concentran en el área Quintero-Puchuncaví. Por un lado está el desembarque de combustibles diversos desde buques tanque hasta los terminales de almacenamiento del sector. Varias veces los ductos fallan o son mal operados y se producen derrames con grave efecto sobre la flora y fauna marina y el consecuente daño para las actividades extractivas.
El último episodio de gravedad se produjo en septiembre de 2014 cuando se derramaron 22 mil litros de petróleo, caso en el cual al daño ambiental se sumó el económico que afectó a la actividad pesquera, estimado en el informe del IFOP en $ 626 millones.
Pero más allá de los casos de derrame, por cierto graves, la investigación detecta la presencia de metales pesados en los organismos de algunas especies "particularmente arsénico". Podría deducirse en este aspecto que el origen de esa contaminación no estaría en los derrames de combustible, sino que en otras actividades productivas radicadas en el área.
Y es un hecho conocido que a lo largo de los años la contaminación en el sector afecta también a las personas y a las actividades agrícolas, ante lo cual se han tomado medidas de mitigación y control que pueden ser perfeccionadas y exigen un constante seguimiento.
El trabajo del IFOP es valioso y recomienda establecer un programa satelital de monitoreo que permitiría conocer en tiempo real los efectos de la contaminación en casos de derrame, con lo cual las acciones de control podrían focalizarse y acelerarse, evitando mayores daños.
Sin embargo, tras el reciente estudio y lo muchos anteriores, es ineludible una mirada global a toda el área Quintero-Puchuncaví: aguas, fondo marino, costa y zona interior para así aplicar un programa de recuperación y prevención ambiental integral. Dentro de esta acción serán necesarios nuevos estudios, pero lo fundamental es mantener un sistema de vigilancia que permitan reacciones rápidas y eficientes.
Lo anterior significa una tarea técnica y científica, pero también recursos y más que nada voluntad política para que el recurrido discurso medioambiental se convierta en una realidad en beneficio de las personas y de sus actividades.
Cuando las temperaturas aumentan considerablemente desde noviembre en adelante y el Parque Nacional La Campana de Olmué nos deja ver su mejor cara, es preciso realizar un urgente llamado a la responsabilidad para quienes acuden con fines deportivos o recreacionales, a objeto de evitar accidentes o desgracias que después tengamos que lamentar.
De acuerdo a estimaciones de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), este año cerca de 60 mil personas llegarán al lugar a través de los distintos accesos que presenta, pero principalmente por Granizo. Ya lo han hecho más de 42 mil 500 personas en lo que va del 2016 y, anualmente, el crecimiento es de un 8% en el número de visitantes. Respecto de los accidentes, hasta septiembre pasado acumulamos 15 casos y dos extravíos.
Estamos hablando de familias enteras, abuelos con nietos, parejas y personas solas, muchas de los cuales solamente acuden con ropa deportiva, portando una botella de agua y, ocasionalmente, con un teléfono celular en el bolsillo, lo que constituye un riesgo mayor considerando los peligros que encierra ascender a esta Reserva de la Biósfera sin los cuidados necesarios.
Según los especialistas, quienes han debido extremar esfuerzos en los últimos días para socorrer a personas extraviadas incluso a riesgo de sus propias vidas, quienes decidan pasar el día allá deben portar no solamente agua y ropa de abrigo, sino que ojalá una pequeña mochila con una ración de alimento, linterna, cuerda, teléfono (con carga suficiente) y fósforos. Del mismo modo, deben registrarse cuando ingresan al parque, de forma de que exista conocimiento formal de su presencia y, en caso de accidente o extravíos, permita identificar rápidamente de cuántas personas estamos hablando.
Quizás para muchos estas indicaciones podrían ser una molestia o un peso adicional -en el caso de la carga-, sin embargo, bien podrían transformarse en los mejores aliados si se trata, por ejemplo, de pasar una noche a la intemperie o en medio de roqueríos.
De ahí los esfuerzos que, como Gobernación Provincial de Marga Marga, en conjunto con Conaf, Bomberos, Carabineros, Seremi de Salud y los rescatistas, estamos desarrollando, a objeto de tener una temporada estival sin fallecidos ni lesionados.
Esta estrategia también considera mejorar los carteles con información respecto de cómo actuar en caso de emergencia, incorporar tecnología en la entrada al lugar -para agilizar el acceso de los visitantes- y dotar de equipamiento a los rescatistas que primero acudan a socorrer a las víctimas.
Christian Cárdenas Silva
Gobernador Provincia de Marga Marga