Secciones

ENTREVISTA. Aldo Cornejo, diputado (DC):

"Lo pensé y tomé una decisión: competiré para ser senador en la Quinta Región"

E-mail Compartir

Paola Passig

Tras semanas de rumores, el diputado Aldo Cornejo reconoció su intención de competir por un cupo senatorial en la región, la que nuevamente concentrará a figuras claves de la política nacional que se disputarán los cinco cupos que le corresponden tras la irrupción del nuevo sistema electoral. Ricardo Lagos Weber, Marco Antonio Núñez, Ignacio Walker (si no le resulta su opción presidencial) e incluso Isabel Allende serían las cartas de la Nueva Mayoría más seguras en la zona.

- ¿Qué le pareció este ajuste de gabinete?

- Requiere dos comentarios de naturaleza distinta. O sea, es notorio que el ajuste se produce con motivo de la renuncia de tres ministros y ministras que van a iniciar una carrera parlamentaria. Y en segundo lugar, mirado desde la perspectiva de lo que ha ocurrido en los últimos días, a propósito del reajuste, de la ley de presupuesto y de los líos de los partidos con el Gobierno, la Presidenta ha tomado una decisión que tenemos que respetar. Y ésta fue decirle a la Nueva Mayoría que respalda el trabajo del comité político con la sola incorporación de Paula Narváez. Y aquí sólo queda respetar la decisión y tratar con el comité político, básicamente con Mario Fernández, y reiniciar la última etapa del Gobierno.

- ¿Quedó satisfecho?

- Soy optimista porque creo que la desastrosa experiencia del reajuste ha servido para que los parlamentarios, los partidos y el Gobierno entiendan que es absolutamente indispensable reiniciar una relación distinta. Ahora, no creo que haya que responsabilizar sólo al gabinete, porque creo que los partidos han contribuido y los parlamentarios también. Y aunque no quiero dramatizar, yo veo que ésta es la última oportunidad que tiene el Gobierno y la Nueva Mayoría para reiniciar una tarea política para los últimos 15 meses en función de un objetivo, no sólo las tareas propias del Gobierno, sino que un objetivo político, que es ganar la próxima elección presidencial.

- ¿Esperaba más del este ajuste?

- Sin duda. Yo habría esperado más en algunos ámbitos sectoriales. Creo que el tema de salud sigue siendo muy complejo, extraordinariamente agravado por el último paro. Por las horas e intervenciones postergadas que no sé cómo el Ministerio las va a resolver. Nada sacamos con seguir discutiendo las decisiones de la Presidenta y aquí el desafío es reiniciar una etapa de mayor conducción, coordinación, de mayor respaldo al Gobierno y diálogo con los parlamentarios porque lo que ha mostrado el episodio del reajuste es que hay una autonomización cada vez mayor de los parlamentarios en relación al Gobierno.

- ¿Pero esperaba una cambio a nivel del gabinete político?

- Bueno, así como reclamo que los partidos y los parlamentarios tengan una actitud distinta en su relación con el Gobierno, reclamo que los ministros que ahora integran o siguen integrando el comité político también entiendan que deben tener una actitud distinta en su relación con el Parlamento y los partidos. El que no se dé cuenta que el tema del reajuste marcó un punto de inflexión entre la relación del Gobierno con el Parlamento y los partidos, quiere decir que no entiende nada. Y no tengo ninguna duda de que los ministros Fernández y Eyzaguirre se han dado cuenta, a propósito de lo que pasado, que es necesario tener un comportamiento completamente distinto. Si eso no ocurre... bueno, vamos a tener dificultades.

- El impasse del reajuste afectó también las relaciones el interior de la Nueva Mayoría.

- El debate del reajuste demuestra una vez más que los temas políticos no pueden estar en manos del ministro de Hacienda; demuestra que la política pasa a estar subordinada a lo técnico; demuestra que se cometieron errores en la negociación antes y durante el envío del proyecto. Al final del día, la disyuntiva era o aprobábamos el 3,2% que planteó el Gobierno y que nunca modificó, o estábamos frente a un problema de gobernabilidad no sólo con los gremios, sino que con la ciudadanía. Y voy a hablar por mí, pero en mi caso también hay un componente de lealtad con la Presidenta y demostrar que, pese a todas las dificultades, todavía existe una capacidad de dar gobierno al país.

- ¿Fue un fracaso haber aprobado el reajuste con los votos de la oposición?

- Si revisa la votación del veto que se rechazó y la aprobación del 3,2% de esta semana, hay menos votos de la Nueva Mayoría a favor y lo que salvó el 3,2%, como dice, fueron los votos de la derecha. Ese dato, que es incómodo, refleja el déficit político en la conducción del debate del reajuste con la Nueva Mayoría. La duda que queda es si el 3,2% se mantuvo hasta el final porque no había recursos o porque no se quiso desautorizar al ministro de Hacienda, una duda que hasta hoy persiste.

- El PC ha señalado que hay un encono con la tienda que salió a flote a partir de este impasse. ¿Es así?

- O sea, me parece exagerado pretender atribuir al PC todo lo que ocurrió. Ahora, cuando se está en medio de un desorden político que tiene que ver con un reajuste del sector público y donde hay una paralización de servicios a nivel nacional, que la DC centre la discusión en su relación con el PC, de si se tergiversó o no tal o cual conversación, sólo contribuye a que la política pierda y que la DC pierda.

- ¿Cree que fue una buena decisión congelar la relación con el Gobierno? Algunos lo han calificado de "pataleta".

- Hay episodios que probablemente contribuyeron a que el partido, y no sólo la presidenta de la DC, tomara esa decisión. Yo no la calificaría de pataleta porque en ese minuto a muchos nos pareció legítima la preocupación. Ahora, si ese es el mejor procedimiento para volver a tener una nueva relación con el Gobierno, probablemente no haya sido el mejor procedimiento, pero de que molestia había, había.

- ¿Le ve viabilidad a la Nueva Mayoría?

- Así como están las cosas, soy bastante pesimista respecto a si la Nueva Mayoría pueda proyectarse durante el próximo gobierno. Hay demasiadas dificultades, demasiada autonomía de los partidos, y esto se ve agravado por estar ad portas de una elección presidencial y parlamentaria con desafíos muy potentes. ¿Vamos a ser capaces de ponernos de acuerdo en un candidato presidencial? ¿Vamos a ser capaces de llegar a un acuerdo parlamentario? Me encantaría que se proyectara, pero tal como están las cosas, soy más bien pesimista.

- El presidente de la Cámara, Osvaldo Andrade, cree que sería un error político grave que se acabara y pide darle tiempo para que se asiente...

- A ver, este fue un acuerdo político por cuatro años, pero se están generando demasiadas condiciones para que la viabilidad de esta coalición se vea seriamente amenazada.

- O sea, ¿que la DC vaya con su candidato presidencial en primera vuelta toma sentido?

- En el partido hay una decisión que la Junta Nacional deberá ver en el mes de enero de llevar un candidato a primera vuelta. Hay varios interesados. Hay algunos que le hacen mucho empeño, gente conocida, de la región; pero a mi juicio, la DC debe privilegiar tres cosas: primero, que un desafío importante para nosotros es ganar la elección presidencial; segundo, tener un programa realista y sensato; y tercero, hay que pensar cómo la DC optimiza el resultado parlamentario. En consecuencia, vamos a tener que ponderar. Siempre me he preguntado si una candidatura presidencial de la DC a primera vuelta implica llevar una lista parlamentaria sólo de la DC. Hay estudios electorales que indican que eso es un suicidio. Entonces, la Junta Nacional deberá ponderar si tiene sentido llevar un candidato propio, o si es mejor privilegiar un buen resultado parlamentario con un buen acuerdo programático. Pero hasta ahora la intención es llevar un candidato o candidata a primera vuelta.

- El único que ha manifestado su intención ha sido el senador Ignacio Walker. ¿Le parece una buena opción aun cuando no está bien posicionado en las encuestas?

- Reconozco el voluntarismo, la persistencia de Ignacio Walker de proclamar a los cuatro vientos que está disponible. Eso hay que reconocerlo. Si tiene o no viabilidad es distinto y cuando se resuelva el tema en la Junta Nacional lo vamos a poner en la mesa. Lo que no me gusta es que la región sea el premio de consuelo para los que no les resulte ser candidatos presidenciales.

- Y en este escenario, ¿decidió ser candidato a senador por la región?

- Así es. Tengo una larga trayectoria como diputado de la zona, cuatro periodos. Conozco a la región, tengo vínculos con ella hace más de 30 años. Estudié acá, trabajo acá y mi decisión es representar a esta región en un momento muy importante y que es cuando el país definitivamente tomó conciencia del valor de las regiones. Reconozco que mi compromiso con la región es muy vital, no estoy de pasada, y me jugaré esa opción en la medida que eso coincida con las decisiones que tome el PDC en el tema parlamentario. Pero mi decisión personal es que quiero competir por una senaturía en la región.

- ¿Con el nuevo sistema de cinco senadores regionales hay más chance?

- Aquí son cinco los que se eligen y se puede llevar seis candidatos. Y si bien no sé cómo va a ser la negociación parlamentaria, creo que esta región da como para que la DC siga teniendo representación en el Senado .

"Reconozco que mi compromiso con la región es muy vital, no estoy de pasada... Mi decisión personal es que quiero competir por una senaturía en la región" "La duda que queda es si el 3,2% se mantuvo hasta el final porque no había recursos o porque no se quiso desautorizar al ministro de Hacienda" "Así como están las cosas, soy bastante pesimista respecto a si la Nueva Mayoría pueda proyectarse durante el próximo gobierno. Hay demasiadas dificultades, demasiada autonomía de los partidos""