Secciones

ENTREVISTA. Humberto maturana, científico chileno:

"Los empresarios deben reflexionar si quieren o no convivir en comunidad"

E-mail Compartir

Tábatha Guerra

Una visita ilustre tuvo esta semana Valparaíso: el destacado científico chileno y Premio Nacional de Ciencias 1994, Humberto Maturana.

Invitado por la Cámara Regional de Comercio, Maturana llegó a la zona para exponer la presentación "Innovación… ¿Cambio o Transformación?", que forma parte de los cursos que actualmente imparte en la Escuela Matríztica de Santiago y de la que es cofundador junto a Ximena Dávila.

En la cita, el autor del mundialmente reconocido concepto de "autopoiesis", se dio tiempo para analizar el rol de los empresarios en la sociedad chilena, recordándoles que "soy comerciante en la medida que mi nicho ecológico me lo permita".

Además, aprovechó de sumarse a las críticas contra la Asociación de Exportadores de Manufacturas (Asexma), quienes regalaron al ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, una muñeca inflable para estimular la economía: "Es machista usar a la mujer como instrumento. Esto de la muñeca habla del placer y me huele mal que traten a la economía como un objeto de placer".

- Usted ha reconocido que en los comienzos de su carrera creyó ser capaz de responder todas las preguntas, hasta que en una clase un alumno le preguntó respecto al origen de la vida y no pudo contestarle. ¿Qué preguntas complejas debería hacerse la sociedad chilena para entender los cambios sociales que actualmente se producen?

- La pregunta fundamental que deberíamos hacernos es si queremos o no queremos convivir, porque si queremos hacerlo, lógicamente a mí me va a preocupar el bienestar de la comunidad a la cual pertenezco, que es en definitiva la que me hace posible.

- A su juicio, ¿cómo está cambiando la sociedad chilena en una época marcada por los movimientos sociales que actualmente están renovando las estructuras de poder?

- Yo no sé exactamente cómo está cambiando el país, pero ojalá lo haga hacia una ampliación del entendimiento. Nosotros somos los que generamos el mundo en que vivimos, así como nuestro vivir, y además existimos en una unidad ecológica, en un mismo nicho. Por lo tanto, esos seres que son parte de nuestro entorno son fundamentales para la conservación y realización de nuestro propio vivir también, de modo que es mejor que colaboremos y no compitamos.

- ¿Vivir es entonces algo intrínsecamente comunitario?

- En mi opinión, y en el sentido estricto, en el vivir no existe empresa privada. Toda empresa es pública porque se sostiene en una comunidad humana. El tema a cuestionarnos debería ser: ¿Quiero yo convivir o no con esa comunidad humana? Porque si quiero convivir con ella, me va a importar lo que pase en esta y también cómo afectará lo que yo hago y no voy a desear entrar en un proceso lineal de buscar mi propio enriquecimiento.

- ¿Qué podemos hacer como sociedad para vivir de manera más armónica?

- Para convivir de manera armónica y sin conflictos lo que debemos hacer es colaborar y no competir, porque la competencia siempre implica el deseo de negar a otro.

- A propósito de su visita a la Cámara Regional de Comercio, ¿qué recomendación le daría a los empresarios chilenos para que la convivencia con los otros miembros de la sociedad sea más armónica?

- Los empresarios deben reflexionar si quieren o no quieren convivir con la comunidad humana que los hace posibles.

"En mi opinión, y en el estricto sentido, en el vivir no existe empresa privada. Toda empresa es pública porque se sostiene en una comunidad humana"

Humberto Maturana, Científico chileno"