Durante la semana pasada se produjeron algunas manifestaciones desde la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso respecto a la asignación de cupos en los Campos Clínicos de la región. Como representantes de la carrera de una de las universidades privadas que comparten formación en los servicios de salud pública, quisiéramos tomar esta situación y hacer referencia específicamente al caso del Hospital Gustavo Fricke.
Es importante establecer, que ambas casas de estudios (U. Andrés Bello y U. de Valparaíso) nos regimos por convenios que establecen las condiciones de uso y asignación de cupos, todo ello en el marco establecido por Ley y además avalado por diferentes criterios de calidad que son exigidos por el Servicio de Salud correspondiente.
En este sentido quisiéramos relevar que, desde 2005, la carrera de Medicina es impartida en la Sede Viña del Mar de la Universidad Andrés Bello. Ello, como respuesta a la necesidad nacional y regional de ampliar las fuentes de formación de médicos, ante una realidad ampliamente conocida.
En este contexto es que siempre han existido conversaciones armónicas entre los Decanos de ambas escuelas regionales coincidiendo en que las disponibilidades de campos clínicos en los Servicios de Salud de Viña del Mar y de Valparaíso, permiten una formación equitativa en beneficio de los estudiantes de ambos planteles.
Asimismo, es importante establecer que nuestra Escuela y Universidad aportan los mismos bienes públicos a la región en cuanto a la formación de capital humano avanzado, investigación y vinculación con el medio que los planteles estatales y tradicionales.
De hecho, cumplimos estándares de calidad tales como el que nuestra carrera está acreditada por la CNA hasta 2020, el puntaje promedio de ingreso de los estudiantes es de 760 puntos en la PSU. En tanto, en la prueba nacional que rinden todos los médicos egresados de las Escuelas de Medicina de Chile (EUNACOM), nuestros egresados han obtenido puntajes sobre la media nacional, similar a otras escuelas del país.
Hemos entregado al país seis generaciones de médicos, de los cuales un 90% se encuentra realizando su especialización o trabajando en la red pública de salud.
Por último, quisiéramos señalar que somos una comunidad universitaria que cree y valora la no discriminación y respetamos el desarrollo de las instituciones estatales y privadas que deben coexistir al servicio del país. Es por esto que hacemos un llamado a que este tipo de manifestaciones sea con alturas de miras, ya que todos los estudiantes tienen los mismo derechos mientras se cumpla la normativa, y así no se perjudique a los jóvenes que se forman en la red pública ni el trabajo que hemos desarrollado en conjunto entre los distintos planteles de la región.
Camilo Sepúlveda Arancibia
Presidente CAA Escuela de Medicina UNAB Viña
Dr. Peter McColl Calvo
Director Escuela de Medicina Viña del Mar, UNAB