Luego de lograr un exitoso resultado en la postulación efectuada por parte del Museo Marítimo Nacional ante la organización internacional que agrupa a más de 100 museos marítimos, representantes de más de 26 países nos hemos adjudicado la organización del Congreso de dichos museos, que se desarrollará en Valparaíso entre el 15 y 20 de octubre del próximo año. Entre otros antecedentes, dicho Congreso adquiere especial importancia toda vez que se enmarca entre las actividades conmemorativas del Bicentenario de la Armada de Chile y que cuenta además con el patrocinio de la Ilustre Municipalidad de Valparaíso, el Consejo Nacional de Cultura y las Artes y la Corporación Patrimonio Marítimo de Chile. Igualmente relevante es el hecho de que por primera vez los representantes de los museos marítimos se reunirán en Sudamérica.
Es por ello que días atrás nos visitó el director del Mystic Seaport Museum, museo privado más grande de EE.UU., quien actualmente ostenta el cargo de presidente del "International Congress of Maritime Museums", a objeto de evaluar en terreno las facilidades y servicios que la zona ofrece, así como los detalles ya avanzados del programa de actividades, el que no sólo contempla una fuerte carga académica, sino que también recorridos turísticos y reuniones sociales.
Durante cuatro días tuvimos la oportunidad de compartir con dicha autoridad, acompañándolo y guiándolo en su recorrido por hoteles, cerros, museos, restaurantes y diferentes locaciones seleccionadas para el evento.
Quizás lo más relevante de su visita fueron sus expresiones al finalizar, cuando se le pidió su visión general acerca de la ciudad y su entorno, señalando que: "Puedo decir que he conocido cuatro Valparaíso, el primero, el Valparaíso puerto, el plan, demasiado sucio, rayado, desordenado, típico de los puertos de antaño, pero injustificable en un puerto Patrimonio de la Humanidad; luego conocí el Valparaiso de los cerros (refiriéndose específicamente a los cerros Alegre y Concepción), maravilloso, turístico, es el Valparaíso que los europeos, asiáticos y extranjeros en general quieren conocer y disfrutar; luego el Valparaíso naval, el que mantiene la rica tradición de la historia naval asentada en el primer puerto de la República, preservando diferentes edificios patrimoniales que en sí constituyen verdaderos museos; y finalmente el Valparaíso-Viña", refiriéndose a esa estrecha relación y continuidad existente entre nuestro puerto y las bondades turísticas que ofrece la vecina ciudad.
Me pareció una visión realista, digna de compartir, aunque nos duela, y por supuesto que nos enfrenta al desafío de lograr cambiar esa opinión referida al plan, desafío que debemos enfrentar todos quienes vivimos o trabajamos en el área, autoridades y usuarios, porteños oriundos o transeúntes, desafío que obliga a una mejor cultura para un mejor turismo, para una mejor vida.
Cristián del Real Pérez
Director del Museo Marítimo Nacional