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Alcaldes realizaron visita inspectiva a las instalaciones de los fuegos artificiales

CIUDADES. Reginato, Sharp y Sumonte llegaron hasta el molo de abrigo.
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Catalogado como uno de los shows pirotécnicos más extensos y hermosos del mundo, cada 1 de enero, pasadas las 00:00 horas, Valparaíso, Viña del Mar y Concón se coordinan para encender con luces y fuegos artificiales la bahía, dando la bienvenida a un nuevo año.

En este punto, y como tradicionalmente se hace cada año en la antesala del evento, los alcaldes de Valparaíso, Jorge Sharp; de Viña del Mar, Virginia Reginato, y Concón, Óscar Sumonte, llegaron ayer hasta el molo de abrigo para realizar la primera visita de inspección a las instalaciones de los fuegos artificiales.

"Esperamos que esta fiesta de Año Nuevo tan tradicional y característica que se desarrolla en nuestras ciudades se dé en un tono de alegría, pero también con respeto a la ciudad, en particular en Valparaíso, ya que vienen muchos turistas y amigos de distintas partes del país a observar esta gran fiesta, y es por eso que les pedimos que cuiden y que dejen la basura y hagan sus necesidades biológicas donde corresponde. El Año Nuevo tiene una cara bonita y de alegría, pero también una triste por la basura y mala educación de muchos, y por eso el llamado es a cuidar Valparaíso para recuperarlo", puntualizó el alcalde porteño, Jorge Sharp.

En cuanto a los detalles del evento, este año Valparaíso contará con nueve puntos de lanzamiento: Laguna Verde, Torpederas, los sitios 3 y 4 de TPS, el Espigón, tres balsas que estarán instaladas en el mar a la altura de Edwards, el Muelle Barón y la remodelación Balmaceda, además de Caleta Portales. Serán alrededor de 35.900 mil disparos y 11.074 bombas, lo que se traduce a más de 15 toneladas. Todo en un espectáculo pirotécnico que tendrá una duración aproximada de 20 minutos.

Respecto de los operativos de seguridad dispuestos para ese día, el comandante en jefe de la Primera Zona Naval, contraalmirante Ronald McIntyre, señaló que "hemos procurado todas las medidas para que la instalación de los lanzadores de los fuegos se realicen de manera segura, así también la carga de las balsas que después serán trasladadas a sus puntos. Tenemos un plan de vigilancia del borde costero, más unidades que van a estar patrullando en la bahía".

Bolsa porteña analiza fórmulas para salir a flote tras los casos Essex y de expresidente

VALPARAÍSO. El gerente general de Bovalpo, Arie Gelfenstein, señaló que esperan revitalizar la plaza sumando nuevos corredores en base a un nuevo foco y, de paso, niega deudas con el extimonel de la rueda, Carlos Marín Orrego.
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Claudio Ramírez

Un complicado fin de año le ha tocado vivir a la Bolsa de Corredores de Valparaíso (Bovalpo), tras el remezón provocado por las acusaciones de presunta estafa que afectan al expresidente de la entidad, Carlos Marín Orrego, y en este último mes, por el caso que sacude a Essex Corredores de Bolsa -una de las principales entidades que opera en la rueda porteña- y que informó a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) sobre sus intenciones de cerrar de forma voluntaria a partir del último día de este año.

Esto no es menor para Bovalpo, pues en este escenario cuenta con diez corredoras, el mínimo que se requiere para operar. Sin embargo, desde la entidad porteña, la más antigua del país en el mercado bursátil, miran el futuro con otro cariz impulsado por el cambio de mando en el directorio.

"La Bolsa quiere partir el año renovada, con una nueva presidenta (Gladys Apara) , mirando el futuro con nuevos proyectos que ya estamos trabajando, con acercamientos con las demás bolsas de valores y el mercado", comenta el gerente general de la entidad, Ariel Gelfenstein, que repasa los lineamientos que permitirían a la plaza tomar nuevos aires y recuperar protagonismo en el mercado.

"Hoy la Bolsa tiene una nueva presidenta y un directorio renovado con nuevas ideas. Esperamos pronto entregar un proyecto a la Superintendencia de Valores y Seguros que beneficiará a todos aquellos emprendedores y medianas empresas, para que tengan finalmente financiamiento a sus proyectos mediante el mercado bursátil", detalla el personero.

Al respecto, Gelfenstein señala que ello sería clave para proyectar la bolsa porteña junto con la apertura de oportunidades para un sector importante de la economía como son las pymes.

"Esto nos tiene muy entusiasmados, ya que sería un mercado nuevo que en muchos países ya existe y que contribuiría al crecimiento del país. Ello, además, le cambiaría el rumbo a la Bolsa de Valparaíso", estima sobre las proyecciones que se analizan.

Pero, junto con ello se da tiempo para aclarar algunos aspectos relacionados con los casos que han tocado de cerca o directamente a la bolsa porteña, como lo acontecido con Essex y el expresidente de la entidad, Carlos Marín Orrego. "La corredora Essex ya nos había comunicado hace un tiempo su voluntad de cerrar, por tanto estaba ya considerada como un corredor menos y no es mucho lo que aportaba en recursos hacia la Bolsa", comenta el ejecutivo respecto a dicho capítulo, añadiendo que si bien están en el límite de firmas necesarias para funcionar, enfatiza que están trabajando en un plan que no sólo permitiría mantener esta cifra, sino que aumentarla, alejando así los fantasmas de un eventual cierre.

"La Bolsa si bien queda con diez corredores con la posibilidad de operar, que es el mínimo, estamos muy optimistas con los proyectos que se vienen, lo que provocaría que estos podrían aumentar", estima Gelfenstein.

Asimismo, enfatiza que existe confianza, pues no hay señales de que la situación vivida con Essex se repita, un hecho que, de producirse, sí pondría en riesgo el funcionamiento de la plaza.

"No hay otros corredores que nos hayan manifestado el deseo de cerrar, sino que al contrario, estamos viendo algunos posibles nuevos corredores que podrían entrar", precisa en ese aspecto el profesional.

En relación al caso Orrego, el ejecutivo negó que la entidad tenga una deuda con el expresidente de la plaza porteña, tal como afirman sus amigos y su abogado defensor, la cual ascendería a cerca de $ 300 millones por asesorías.

Indicó que no es efectivo, ya que ese reconocimiento sólo estaba sujeto a ciertas condiciones como, por ejemplo, que la Bolsa lograra generar los flujos de efectivo necesarios, no endeudarse con bancos y, finalmente, no caer bajo el patrimonio legal. "Estas exigencias no se han cumplido", señaló el personero.

Por último, al ser consultado de qué manera repercutiría la regulación efectiva de la interconexión bursátil, afirmó que "ayudaría bastante no sólo a la bolsa, sino a miles de inversionistas que obtendrían mejores precios a sus órdenes, es un beneficio para todo el mercado".

"No hay otros corredores que nos hayan manifestado el deseo de cerrar, sino que al contrario, estamos viendo algunos posibles nuevos corredores que podrían entrar"

Arie Gelfenstein, Gerente general de Bovalpo"

corredoras operando es el mínimo exigido por la SVS para que una bolsa pueda funcionar. 10

en noviembre de ese año asumió la presidencia Gladys Apara, la primera mujer en ejercer el cargo. 2016