Gonzalo Maturana
Dramáticas fueron las horas en Valparaíso, luego que la tarde del lunes un incendio afectara a Quebrada Verde y la población Puertas Negras de Playa Ancha. Cerca de 200 casas fueron consumidas y muchos porteños lo perdieron todo debido a la velocidad con la que se propagaron las llamas. La familia de Santiago Wanderers también sufrió en la ocasión.
Ese fue el caso del círculo íntimo del exmediocampista caturro Jefferson Castillo, quienes perdieron su vivienda en el lugar afectado.
El jugador formado en la cantera wanderina se alistaba el día del incendio para comenzar el 2017 en Deportes Puerto Montt. Fue durante su viaje, cuando iba a la altura de Curicó, el momento en que su esposa lo llamó para avisarle de la tragedia.
"Tenía mucha impotencia y quedé pensando en si devolverme o quedarme", cuenta quien fuera el heredero de la histórica casaquilla "15" de Moises Villarroel tras su retiro.
"Lo más importante era saber cómo estaba mi familia y la casa de mi mujer. Tengo muchos tíos que viven en la población. Tías y amigos perdieron sus casas, fue algo muy doloroso para todos. Da mucha pena, porque es el esfuerzo de años, pero son cosas materiales que de alguna u otra forma se recuperan", agrega el futbolista.
Castillo hace una pausa y aprovecha de enviar un mensaje a todos los que quieren aportar. "Imagino que, así como lo estoy sufriendo yo, deben haber muchas familias que están sufriendo. Hay que solidarizar con ellos y todo aporte que sea voluntario se recibe de buena forma. Acá no se obliga a nadie a colaborar, así que las personas que lo hagan, que lo hagan de corazón y queriendo hacerlo voluntario. Ese es mi mensaje a las personas que quieren cooperar", comentó.
Además, el "Ratita" agradeció todo el apoyo de Santiago Wanderers, destacando que hubo quienes preguntaron cuál era la dirección de sus padres para poder ir a ayudar.
"En mi casa la mayoría son wanderinos, yo también, y se agradece mucho a todos los hinchas y gente wanderina que fue a dar una mano, ya sea a mi casa o a cualquiera. Estoy muy agradecido de la familia de Santiago Wanderers", explicó emocionado.
"Eso caracteriza a Wanderers. No es solo un club o una hinchada, sino que es una familia. Siempre están todos presentes cuando pasan cosas así y eso se valora mucho", complementa.
Por ahora, Castillo se mantendrá en Puerto Montt, enviando saludos y fuerza a todos los porteños afectados.
"Recién llegué ayer (lunes), estuve todo el periodo de las vacaciones en Valparaíso. Justo se dio que me tocó viajar y vino lo del incendio, entonces es algo complicado y no puedo decir que viajo en un rato. Lo tengo que hablar con el presidente, el profesor y también con mi familia, porque yo confío mucho en mis hermanos y en lo que están haciendo. Ya sacaron los escombros de la casa, el terreno está limpio y ahora viene lo más difícil, que es reconstruir todo", cierra el jugador.
"Se agradece mucho a todos los hinchas y gente wanderina que fue a dar una mano, ya sea a mi casa o a cualquiera"
Jefferson Castillo, Exvolante de Wanderers"
Familias de cadetes también sufrieron
Jugadores de las inferiores de Santiago Wanderers también fueron afectados por la tragedia. La casa de la familia Astudillo Hidalgo resultó completamente quemada. Sus hijos Dylan, Sergio y Franco pertenecen a las series menores del cuadro verde, en la sub-19, sub-17 y sub-12, respectivamente. La familia de Alejandro Salas (sub-11) fue otra de las afectadas. Sobre el momento que vivieron, el jefe técnico del Fútbol Joven del Decano, Domingo Sorace, explicó la ayuda que están dando. "Estamos de vacaciones todos, pero nos movimos para poder participar en este momento tan delicado. Hemos ayudado en lo que necesiten y otros chicos de las series están ayudando en el terreno. También hay varios que están cooperando arriba, donde todo se cayó", dijo. Para hoy, el equipo adulto entrenará en el estadio Valparaiso y abrirá las puertas del recinto para compartir con los niños de los albergues.