Comandante de Esmeralda y marihuana: "no afecta, pero es lamentable que haya sucedido"
ARMADA. El capitán de navío Carlos Schnaidt arribó ayer a Valparaíso junto a la dotación del buque escuela, y aseguró que fueron los propios compañeros quienes denunciaron el consumo de estupefaciente en el crucero.
En medio de una intensa bruma, que se fue disipando a medida que avanzaba el día, recaló ayer en Valparaíso el Buque Escuela Esmeralda tras recorrer por casi siete meses los principales puertos del Asia-Pacífico.
Como es tradición, los 308 integrantes de la dotación de la "Dama Blanca" se reencontraron con sus familiares, quienes a primera hora de la mañana arribaron al Molo de Abrigo. Allí, luego de entonar el himno del buque y la canción "La Joya del Pacífico", y de ser recibidos por un conjunto nacional de cueca, comenzaron a bajar uno a uno los efectivos de la Armada, quienes el pasado 12 de junio habían zarpado desde el mismo lugar.
En total, el crucero de instrucción número 61 recorrió ocho países, visitando los principales puertos de Hawai, Tokio, Shanhgai, Sydney y de Indonesia y Nueva Zelanda, además de recalar en la Isla de Pascua al comienzo del viaje. Su última recalada, en tanto, fue en Papeete, en Tahití, país que hacía cinco años no estaba incluido en el programa.
En el lugar permaneció hasta el 10 de diciembre pasado, día en que continuó navegando hasta llegar ayer a Valparaíso, donde completó un recorrido de 28.417 millas, algo así como 45 mil kilómetros.
Caso marihuana
A diferencia de años anteriores, esta vez el crucero estuvo marcado por novedosas actividades. Por primera vez en su periodo, el comandante en jefe de la institución, almirante Enrique Larrañaga, visitó a la Esmeralda en el extranjero. La actividad se realizó en el puerto de Auckland, en el marco del aniversario número 75 de la Armada de Nueva Zelanda.
Sin embargo, la navegación también estuvo marcada por un hecho que causó polémica en el país. Fue precisamente en el país neozelandés donde la Armada -a través de un comunicado- informó que cuatro integrantes de la dotación (no detalló la identidad ni sus grados) habían sido desembarcados del crucero y repatriados a Chile, luego que entre el 7 y el 16 de noviembre fuesen sorprendidos consumiendo marihuana al interior del buque, mientras navegaban entre los puertos de Sydney (Australia) y Auckland.
La institución no dio a conocer mayores detalles al respecto, salvo que se había iniciado un sumario administrativo. Sin embargo ayer, a su llegada a Valparaíso, el comandante de la Esmeralda, capitán de navío Carlos Schnaidt, entregó más detalles de la situación.
Según comentó, los cuatro tripulantes son guardiamarinas (cadetes de la Escuela Naval), y actualmente se encuentran en un proceso sumarial. "Mientras estuvimos navegando efectivamente hubo una situación. La reglamentación que nosotros tenemos, que es acorde a la Ley, es bastante clara. (A los involucrados) los desembarcamos en el puerto de Auckland, los mandamos de vuelta a Chile y están siguiendo un proceso disciplinario en este momento", dijo Schnaidt, recordando que existe una etapa de apelación a la que se pueden acoger los jóvenes.
El comandante del buque agregó, también, que en la Marina "hay toda una metodología (judicial y administrativa) que se tiene que seguir", y descartó que el incidente haya empañado el crucero de instrucción, agregando -incluso- que fueron los propios compañeros quienes advirtieron del hecho a sus superiores.
"Creo que no afecta. Es lamentable que haya sucedido. En la Marina no podemos hacerlo. Fueron los propios compañeros de curso los que hicieron la denuncia cuando estaba sucediendo. La verdad es que no afecta al crucero, pero evidentemente perdimos a cuatro guardiamarinas que ojalá no los hubiésemos perdido y no hubiesen fumado marihuana", sostuvo el comandante tras su arribo a la Ciudad Puerto.
Emoción en familiares
Cerca de mil personas esperaron a los tripulantes del 61° crucero de la Armada, que también incluía a bordo a funcionarios de Carabineros, PDI y la Fuerza Aérea. La alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, también llegó al molo a bordo de la Esmeralda.
Uno de los familiares de los uniformados, Jeannette Muñoz, madre del marinero Pablo Chamorro (23), relató que era la primera vez que su hijo permanecía por tanto tiempo alejado del hogar.
"Él es súper chico y es la primera vez que sale de la casa, y por casi siete meses. Cada vez que nos comunicábamos era llanto, e imagínate para las fiestas de fin de año, donde venían navegando desde Tahití. Pero de a poco como familia nos hemos ido acostumbrando, sobre todo porque su hermano más chico quiere seguir los mismos pasos. Entonces, mi hijo le está haciendo el camino para que a futuro ingrese a la Armada también", dijo la madre del marinero, minutos antes de reencontrarse con él tras siete meses de ausencia.
A su lado, Emiliana Arriagada también esperaba ansiosa a su hijo, Esteban Ramos (32), quien culminaba su segundo viaje a bordo de la Esmeralda. "Fue triste haber estado sin él todos este tiempo, porque no pudimos pasar juntos la Navidad y el Año Nuevo. Además, ahora falta su papá, por lo que no ha sido fácil. Pero bueno, estoy feliz", dijo la madre.
Antes del arribo del buque, la agrupación "Amigos de Miguel Woodward" se reunió en el muelle Prat para manifestarse contra los "pactos de silencio" en casos de violaciones a los derechos humanos que según acusan existen en la Marina, y por la captación de imágenes de connotación sexual a mujeres de la Fragata Lynch. "Venimos en apoyo a las mujeres que fueron espiadas, lo que nos parece grave", dijo el vocero, Javier Rodríguez.
Tifones y tormentas durante navegación
El comandante de la Esmeralda, capitán de navío Carlos Schnaidt, detalló que el crucero por el Océano Pacífico "es tan diverso que pueden darse todo tipo de climas". En esa línea, explicó que durante los siete meses de navegación "nos encontramos con tifones, tormentas tropicales y también lo que llamamos la "calma chicha", que es cuando no hay nada de viento y el mar es como un plato. Además, tuvimos temperaturas que iban desde los 10 hasta los 36 grados. Fue bastante interesante y es la forma que tienen los nuevos marinos para conocer y desarrollar su vocación", dijo el jefe del crucero.
"Creo que no afecta. Es lamentable que haya sucedido. Fueron los propios compañeros de curso los que hicieron la denuncia cuando sucedió"
Capitán Carlos Schnaidt, Comandante del Buque, Escuela Esmeralda"
"De a poco como familia nos hemos ido acostumbrando a que esté lejos, sobre todo porque su hermano más chico quiere seguir los mismos pasos"
Jeannette Muñoz, Madre de Pablo Chamorro,, marinero en la Esmeralda"