Claudio Ramírez
Hasta el único vehículo inscrito en la comuna de Juan Fernández debió pagar $90.437 producto del denominado impuesto verde en el último año, tributo que busca incentivar la compra de vehículos nuevos menos contaminantes.
Ese monto fue parte de los $3.214 millones que se pagaron en la Región de Valparaíso, entre enero y noviembre de 2016, por este concepto lo que representa un aumento de un 5,8% respecto al mismo periodo del año precedente donde la cifra llegó a $3.036 millones. En ese lapso, de un total de 20.508 vehículos nuevos comercializados, 16.940 debieron pagar el tributo mientras que el resto quedó exento.
Esta alza en la recaudación va en línea con el incremento en las ventas que alcanzó un 16,9% el 2016. Viña del Mar lideró la recaudación con una cifra de $871.717.542 correspondiente a 5.278 vehículos. Le sigue la comuna de Valparaíso con $542.940.489 (3.449) y Quilpué con $281.524.309 lo que representa 1.892 unidades comercializadas en el periodo.
Más atrás se ubican Villa Alemana que por este concepto recaudó $220.653.367, Los Andes, $178.066.445; Quillota, $166.856.585; San Antonio, $145.272.898; San Felipe con $138.872.404, la comuna de La Ligua con $62.190.982 y La Cruz que recaudó $57.117.513.
"El monto está dentro de lo que se esperaba recaudar en el sentido de que es lo que se proyectaba con la reforma tributaria", comentó la tesorera regional, Cecilia Arancibia, recordando que la medida es parte de aquella iniciativa y que los ajustes definitivos al denominado "impuesto verde" culminaron este año.
Los componentes que sirven para calcular el tributo son el nivel de rendimiento urbano, el precio de venta del vehículo y las emisiones de óxido de nitrógeno. Este último factor sufrió un alza del 50% en el cálculo del impuesto el 2016 y este año volvió a elevarse en el mismo porcentaje lo que significará un incremento.
"Ahora ya en 2017 se implementó la tercera fase para pasar a ser un impuesto permanente y ya el parámetro será el definitivo. Lo que se pretende, en definitiva, es incentivar la compra de vehículos no contaminantes", agrega.
Respecto al destino que tienen estos montos, la tesorera regional comentó que van al erario nacional. "El impuesto se paga donde se inscribe el auto y va al erario nacional y, desde ese punto de vista, no tiene nada que ver con el tema de las patentes de vehículos donde se ve beneficiada directamente cada comuna en particular", agregó la personera.
Desde el sector automotriz, el gerente general de Aspillaga Hornauer, Felipe Merello, manifestó sus críticas al foco del impuesto "ya que si bien se gravan los autos nuevos que más emisiones producen, el parque automotriz antiguo no tiene gravamen y ese si es el más contaminante".
Respecto a la repercusión en la ventas, Merello señala que actualmente el impuesto no afecta tanto ya que se internalizo tanto en el consumidor como en el distribuidor, aunque el primero es claramente el más afectado. "Antes el distribuidor tenía o manejaba un cierto margen de descuento que iba en completo beneficio del cliente final, hoy en cambio ese porcentaje de descuento disminuye dependiendo del valor del impuesto", concluyó el ejecutivo.
"El monto está dentro de lo que se esperaba recaudar en el sentido de que es lo que se proyectaba con la reforma tributaria"
Cecilia Arancibia, Tesorera regional"
de participación tuvo la Región de Valparaíso en el monto total de la recaudación a nivel país. 7%
millones fue el monto que debieron pagar los contribuyentes en todo Chile por este concepto. $ 43.400