Experto en enfermedades metabólicas explica los errores del Método Grez
DEBATE. Científico de la Universidad de Valparaíso advierte de los riesgos de seguir esta dieta alta en grasas.
E n los últimos meses el éxito de ventas del libro "Los mitos me tienen gordo y enfermo", del diseñador industrial Pedro Grez, y las continuas apariciones en programas de televisión del mismo, han convertido a este método para adelgazar en la dieta de moda de la temporada.
En el libro Pedro Grez presenta su propio método, el cual -según afirma-le permitió bajar 30 kilos sin pasar hambre.
El método Grez es un régimen que va en contra de todos los consejos de profesionales médicos y nutricionistas para mantener un peso saludable. Se basa en ingerir altas cantidades de grasa de cualquier tipo y desplazar el consumo de carbohidratos y frutas para la noche.
Gonzalo Cruz, doctor en Farmacología del Laboratorio de Alteraciones Metabólicas y Reproductivas del Centro de Neurobiología y Plasticidad Cerebral (CNPC), perteneciente al Instituto de Fisiología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Valparaíso (UV), quien lleva a cabo una compleja investigación sobre los efectos de la obesidad, en especial en madres en gestación, explica los principales errores de la propuesta de Grez.
"Primero, hay un error fundamental y es que el método se basa en la experiencia personal y no en la evidencia científica. La experiencia personal es subjetiva y no siempre es replicable de la misma manera en un individuo y otro", aclara. Un segundo error (de varios que señala) tiene que ver con la dieta propiamente tal, dado que el método es totalmente opuesto a las recomendaciones hechas por la comunidad científica.
El problema
El investigador explica que para bajar de peso hay que disminuir sí o sí los carbohidratos simples. "Los carbohidratos que se debieran disminuir son los carbohidratos simples, es decir el azúcar. En ese punto concordamos. Pero Grez al recomendar eliminar los carbohidratos de la mañana se equivoca. El problema es que los carbohidratos son lo que nuestras células leen como energía, es el combustible que necesitamos para funcionar. Y durante la mañana es cuando tenemos más actividad física, por lo tanto cuando más gastamos esa energía. Por este motivo la comunidad científica recomienda ingerir carbohidratos en la mañana los que, por la actividad propia de la persona, se gastan durante el día y no se almacenan si se consume la cantidad adecuada", comenta.
Otro de los puntos cuestionados por la evidencia científica es cuando Grez propone desplazar el consumo de carbohidratos para la noche. "Es inapropiado, porque durante la noche baja la actividad física y también nuestro metabolismo. Si consumo carbohidratos en la noche, la mayor cantidad de ellos se van a almacenar como reserva, esto es, como grasa", dice Cruz.
El método Grez recomienda consumir en la primera comida de la mañana alimentos altos en grasas sin importar si son saturadas o insaturadas y sin límite. Se eliminan los carbohidratos como el pan de cualquier tipo y todos los alimentos que tras ser ingeridos el organismo los transforma en glucosa (azúcar).
"El azúcar el organismo la utiliza de inmediato como energía. En el caso de la grasa, el cuerpo la almacena de reserva para degradarla posteriormente de acuerdo a las necesidades del mismo. La cantidad de azúcar que necesita la persona o la cantidad de grasa que se consume por el ayuno es mucho menor a la que el método Grez propone consumir en el desayuno. En estas circunstancias el organismo va a ocupar la grasa de reserva y la que se consume en el desayuno la almacenará. En cambio los carbohidratos se gastan más rápidamente", sostiene.
Tal como lo explicó el investigador se ha demostrado que para bajar un kilo de peso se necesita gastar 7 mil calorías, y para subir un kilo de peso se tiene que comer 7 mil calorías.
"Una persona consume al día alrededor de 1.800 a 2.000 calorías. Si el individuo no hiciera nada en el día, el organismo gasta igual unas 1.500 calorías, solo por funcionar. Ese es el metabolismo normal (lo que nuestras células utilizan como energía). Entonces la persona no va a subir de peso si come sólo lo que su organismo gasta diariamente".
Saciedad
Entre los argumentos que Grez utiliza para justificar su método, señala que el desayuno alto en grasa produce saciedad. Otra equivocación para el doctor Cruz: "Eso es falso, las proteínas son las que provocan saciedad. La grasa tiene un componente hedónico, que ocurre por la satisfacción que provoca su ingesta y se relaciona con la activación de unos circuitos en el cerebro, que tienen que ver con la conducta del placer y la recompensa. La grasa es como una droga. Se puede percibir que un alimento frito es mucho más rico que el mismo alimento cocido. Es poco creíble que la grasa provoque más saciedad, es justamente lo contrario: puedo comer mucho más.
Con respecto al cambio de horario del consumo de frutas y carbohidratos, para Gonzalo Cruz esta propuesta va en contra de toda lógica. "La evidencia científica indica que los carbohidratos son una fuente de energía rápida y por lo tanto se tienen que consumir en los mayores periodos de actividad física y eso obviamente no ocurre en la noche", apunta.
Gonzalo Cruz, doctor en Farmacología y académico de la Universidad de Valparaíso