Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Cartelera y Tv
  • Vida Social
  • Espectáculos

45 establecimientos educacionales están en zona inundable por tsunami

VALPARAÍSO. Académico de la UPLA planteó su inquietud porque además de colegios, salas cuna, universidades y jardines infantiles, está la Teletón e incluso hay cuarteles de Bomberos.
E-mail Compartir

Cristián Rojas M.

Un total de 45 establecimientos educacionales de Valparaíso están emplazados en la zona inundable en caso de maremoto, área donde hay colegios, salas cuna y universidades, pero además está el instituto Teletón e incluso cuarteles de Bomberos, según advirtió el académico de la Facultad de Ingeniería de la UPLA Manuel Contreras, en el marco del seminario "Riesgos de origen natural, antropización y sustentabilidad de la zona costera", realizado en la Universidad Técnica Federico Santa María (UTFSM).

Contreras, de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Playa Ancha (UPLA), detalló que "llevamos varios años estudiando la vulnerabilidad de los servicios de emergencia y de los establecimientos educacionales, y si uno se da cuenta de lo que ocurre en Valparaíso, hay 45 que están en zona de inundación, prácticamente todas las compañías de Bomberos también están emplazadas en área de inundación, al igual que la Teletón".

A raíz de ello, agregó, "estamos llamando la atención de que estos servicios se tienen que relocalizar y también se tienen que considerar planes de evacuación vertical para los colegios, que hoy en día no los tienen".

Teniendo en cuenta que algunos establecimientos porteños, como el Liceo Técnico y el Colegio Carlos Cousiño, resultaron dañados por los últimos temblores, el académico planteó que "hay que pensar en hacer evaluaciones técnicas de lo que ocurre en cada colegio. Hay otros que no fueron afectados, sin embargo, sus medidas de contingencia son escapar del lugar o juntarse en el patio, que es un área de inundación".

En cuanto al instituto Teletón de Valparaíso, ubicado a dos cuadras del mar, Contreras mostró su inquietud, puesto que "su medida de contingencia es que la compañía de Bomberos más cercana la va a evacuar, entonces ahí la pregunta es ¿cuántos bomberos están haciendo turno en esa compañía?".

En ese sentido, planteó que "para un terremoto estamos muy preparados, pero en cuanto a un tsunami, yo tengo muchos temores, porque lo que ocurrió el 2010, el 2014 y el 2015 han sido eventos menores de tsunami, y siempre ocurrieron en circunstancias muy benévolas para la reacción, porque fueron, o en periodo de vacaciones, o en fin de semana, o en horario que no es laboral. Nos podemos imaginar que va a ser un caos si ocurriera un evento a las 11 de la mañana un día lunes, con los niños en colegios emplazados en área de inundación, los padres en lugares donde no van a poder converger para ir a buscarlos, porque colapsa toda la ciudad, en fin, no hemos considerado todavía el peor escenario de inundación en Valparaíso".

Si bien el cambio de ubicación del instituto Teletón requeriría una inversión millonaria, Contreras recalcó que "con lo ocurrido en Coquimbo el año 2015, quedó demostrado que esas inversiones son necesarias".

Respecto de los lugares más vulnerables ante un maremoto, Contreras destacó a Laguna Verde, que además "está teniendo un crecimiento explosivo y tienes la posta, Bomberos, Carabineros y la escuela, todo en zona de inundación y todo junto, en una de las áreas más vulnerables de Valparaíso".

Consultado sobre si los edificios están preparados para resistir un tsunami, considerando que algunos en la población Vergara, en Viña del Mar, resultaron gravemente dañados por el terremoto de 2010, Contreras afirmó que "la ingeniería sísmica en Chile tiene una curva de aprendizaje bastante importante, en cada evento se aprende, se modifica la norma y se mejora, entonces hay que pensar que en el 2010 tres mil edificios fueron afectados, y de esos, cien llegaron al borde de la norma sísmica y solamente uno falló, en Concepción".

Teniendo en cuenta esas cifras, planteó que "en vez de estar corriendo dos kilómetros, con el riesgo de que te atropellen, con el riesgo de que la gente se caiga, con el riesgo de los obstáculos de las calles, parece ser que una alternativa mucho más eficaz para estudiar es la evacuación vertical".

A su vez, el director del Departamento de Obras Civiles de la UTFSM, Patricio Catalán, explicó que "eso es algo que está todavía en evolución. La experiencia en otros países que han tenido tsunamis destructivos, como Japón, da cuenta que los edificios de hormigón armado, en general, responden bien. Creemos que dados los estándares de norma sísmica y de diseño estructural que existen en Chile, por lo menos los edificios deberían no colapsar ante un terremoto, y por lo tanto, todavía podrían ofrecer algún tipo de soporte ante un tsunami".

No obstante, advirtió que "lamentablemente, nos falta la experiencia empírica, pero la experiencia en otras partes del mundo es bastante favorable. Casos en Dichato, por ejemplo, hubo edificios que sí estuvieron expuestos a inundación hasta dos metros y se comportaron bien, así que por ahora creemos que es una alternativa perfectamente viable".

En el Seminario, organizado por las universidades pertenecientes al Consejo de Rectores de Valparaíso (CRUV), también estuvo la directora nacional de Obras Portuarias, Antonia Bordas, quien hizo notar que "tenemos un país donde hay zonas totalmente consolidadas de viviendas, donde lo que no se puede hacer es erradicar, sino que hay que hacer políticas de mejorar las evacuaciones, mejorar la educación para poder mitigar los riesgos, y en ciertos casos en sectores rurales, hay que tratar de que no se vaya a asentar la población en estos espacios públicos".

La autoridad destacó además que la preocupación no es sólo ante un tsunami, pues "en la Región de Valparaíso hemos trabajado bastante en el tema de las emergencias, y principalmente las marejadas que hemos tenido en los últimos años, donde los costos de inversión para la recuperación de los espacios costeros, desde al año 2015 hasta el año 2017, han superado los 2.500 millones de pesos sólo en obras de emergencia, ni siquiera en obras de reconstrucción".

En tanto, Mauricio Reyes académico de la Facultad de Ingeniería Civil Oceánica de la Universidad de Valparaíso, destacó que "la transferencia de conocimientos desde las personas que están investigando, que están a la vanguardia investigando esto, hacia los tomadores de decisiones y hacia la población en general, es tremendamente relevante para lograr medidas de bajo costo y de facilidad de implementación en el corto plazo, para reducir el impacto de los desastres naturales".

"Logramos tener una norma que nos permite estar a un nivel mundial con el tema sísmico, pero no hemos hecho nada con el tema costero"

Manuel Contreras, Académico de la UPLA"

"Tenemos un país donde hay zonas totalmente consolidadas de viviendas, donde lo que no se puede hacer es erradicar"

Antonia Bordas, Directora de Obras Portuarias"

"Valparaíso es una ciudad compleja"

El director del Laboratorio de Investigación de Tsunamis dela Pontificia Universidad Católica de Chile, Marcelo Lagos, puntualizó que "Valparaíso en sí es una ciudad compleja, que su trama urbana, su antigüedad, su mantención, sobre todo en el casco histórico, hace que un proceso de evacuación pueda ser un tema complejo, y lo vimos para el evento de 6.9 que ocurrió semanas atrás. Sin embargo, hay que destacar que la visibilidad que han tenido terremotos y tsunamis en las últimas décadas en Chile han hecho que las comunidades costeras tengan conductas de autocuidado, lo que nos permite pensar que rápidamente la gente va a tratar de evacuar a zonas de seguridad".