Hasta el Complejo Faro Punta Ángeles llegaron durante la jornada de ayer, las más altas autoridades de la Armada para participar en la ceremonia de cambio de mando de la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante (Directemar).

Honores que fueron presididos por el comandante en jefe de la Armada, almirante Enrique Larrañaga Martin, y en donde tras dos años de gestión, el vicealmirante Osvaldo Schwarzenberg Ashtonm hizo entrega del mando de la Directemar al contraalmirante Guillermo Lüttges Mathieu.

"Todo el ámbito marítimo es un continuo, es decir, yo me recibí de proyectos que estaban en ejecución, algunos los terminamos, otros los iniciamos y ahora los seguirá ejecutando la nueva dirección. En este punto, nuestra misión principal es la salvaguarda de la vida humana en el mar y evitar todo lo que es la contaminación marítima en todo nuestro territorio, así que en eso está enfocado todo lo que nosotros hacemos", declaró vicealmirante Osvaldo Schwarzenberg Ashtonm, exdirector general del territorio marítimo y marino mercante.

Por su parte, y en relación a los desafíos de su nuevo cargo en la Directemar, el recién asumido contraalmirante Guillermo Lüttges Mathieu, puntualizó que "existen temas que tenemos que continuar, tales como el 'Proyecto Fénix', que es muy relevante y que tiene un plazo de ejecución de diez años, y que nos va a permitir contar con la mejor tecnología en todo lo que es señalización marítima, y por ende, dar una mayor seguridad a la navegación en el mar".

En este sentido, el contraalmirante Lüttges agregó que "en este nuevo cargo también me va a tocar seguir contribuyendo a las capacidades que permitan potenciar las capacidades se rebusca y de salvataje marítimo, y en ese contexto, tenemos un proyecto que es muy importante y que tiene relación con la renovación de helicópteros por la proa, como también reforzar nuestra presencia en la custre y fluvial".

"Existen temas que tenemos que continuar, tales como el 'Proyecto Fenix', que es muy relevante y que tiene un plazo de diez años"

Contraalmirante, Guillermo Lüttges, Nuevo director Directemar"

Katherine Escalona M.

Luego de una reunión de directorio en Viña del Mar, los dueños de la Inmobiliaria Casa de Italia S.A. determinaron presentar un recurso de apelación a la Suprema para revertir el fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago, del 8 de junio, que dio luz verde a la tramitación del decreto de Monumento Histórico por parte del Ministerio de Educación.

Lo determinado por la Corte de Apelaciones de Santiago significaría que el inmueble, con más de 50 años de antigüedad, pasaría a ser una edificación con protección patrimonial, por lo que no se podría vender ni demoler para edificar un edificio de 22 pisos con un centro médico de tres pisos, proyecto que fue aprobado hace un par de semanas por la Dirección de Obras (DOM) de la Municipalidad de Viña del Mar.

Ante la aprobación del proyecto, incluso este mes los dueños de Casas Italia afirmaron que la Inmobiliaria firmó un contrato de compraventa con otra sociedad por 228.360 UF, trato que según el presidente del directorio del inmueble, Renzo Arata, podría ser conversado si las autoridades tienen algún interés de compra.

Sobre la presentación del recurso, Arata aseveró que "hay una causa que fue recientemente fallada, el 8 de junio, en la Corte de Apelaciones de Santiago que se va a recurrir a la Corte Suprema de la justicia. Es un recurso de protección y fue contrario a nuestra presentación, por eso vamos a apelar".

Sobre la reunión de directorio, realizada tras una intensa semana de resoluciones y declaraciones en torno a la pugna por el histórico inmueble, Arata explicó que "fue una larga discusión y vimos que perdimos por fallo dividido. Así que esto se presentará dentro del plazo, tenemos esperanza. Esto no implica que no tengamos otro recurso que vamos a recurrir, estamos haciendo la estrategia y no nos cerramos a hablar con la autoridad. Haremos todas las acciones administrativas y todas las acciones en los ámbitos que corresponda para defender nuestros derechos".

Otras acciones

Por la decisión tomada por el directorio, recalcó Arata, harán una declaración pública donde especificarán los pasos a seguir y la disposición de hablar con las autoridades regionales para realizar un eventual compra del inmueble.

"En la declaración pública haremos presente la verdadera realidad de la Casa de Italia y en qué había devenido los últimos años de su funcionamiento como tal. No nos negamos a conversar con la autoridad en el sentido de que si es un bien público y pertenece a toda la comunidad, que sea el Estado el que afronte la situación comprando este inmueble y procediendo a mantenerlo de acuerdo a lo que establece la legislación vigente", afirmó Arata.

Precisó "no hay que obligar a gente que el año 67' compró esta casona y la tuvo a disposición de las instituciones italianas, permitió que la usaran los italianos y sus descendientes y la comunidad en general. Puso a disposición de la ciudad por más de 50 años el inmueble".

El presidente del directorio de la Casa de Italia explicó que la propiedad tiene una deuda de arrastre y por eso hoy se hace necesaria la venta.

"Para poder financiar la mantención, el pago de contribuciones y el pago que involucra tuvimos que arrendarlo, lo que permitió pagar una cuantiosa deuda de arrastre de la Corporación que lo administraba y que se había visto impedida de cumplir con sus obligaciones. Tuvimos que hacernos cargo los dueños por la deuda de contribución de más de $ 30 millones y de arrastre de más de $ 90 millones. El lugar no estaba cumpliendo sus funciones como la idealiza tanta gente que ha comentado sobre ella, el fin con que fue creado fue de un centro de reunión para la colectividad italiana", afirmó.

"Es un recurso de protección y fue contrario a nuestra presentación, por eso vamos a apelar "

Renzo Arata, Presidente del Directorio

de Casa Italia"

"Si es un bien público (...) que sea el Estado el que afronte la situación comprando este inmueble "

Renzo Arata, Presidente del Directorio

de la Casa Italia"