La Selección de Brasil comenzó a mostrar sus credenciales de candidato a días de su debut en el Mundial. El "Scratch" entró ayer a la cancha del estadio Ernst Happel de Viena con la misión de obtener una victoria que le permitiera encarar con confianza su debut en la cita planetaria que se jugará en Rusia.

Y con Neymar como protagonista absoluto en ofensiva, los dirigidos por Tite golearon a un feble seleccionado local por 3-0, dando un apronte temible para su estreno en el certamen internacional, que se realizará ante Suiza, este domingo en el Rostov Arena.

El encuentro comenzó con un dominio sostenido de los brasileños, que sólo tardaron 34 minutos en ponerse en ventaja, gracias a un remate de Marcelo que dio en un defensor austriaco, facilitando las cosas para el atacante Gabriel Jesús, quien con soberbio tiro a la izquierda del portero Heinz Lindner se las arregló para abrir el marcador.

A pesar de la ventaja, la verdeamarelha no cesó en sus intentos por estirar las cifras. Fue así como llegó el minuto 63, en el cual Neymar demostró su calidad dejando en el suelo a un defensor y definiendo entre las piernas del meta europeo, dejando las cosas 2-0.

La conquista del ariete del Paris Saint Germain tuvo su condimento especial, ya que fue el tanto número 55 que el formado en el Santos alcanzó con la camiseta de su selección, en 85 partidos disputados.

Con el gol, Neymar igualó la marca de Romario y se sitúa como tercer goleador histórico del equipo brasileño, tras Ronaldo, que alcanzó los 62 festejos, y de Pelé, que es el actual artillero máximo del "Scratch" con 77 goles.

La guinda de la torta fue el tercer tanto brasileño, fruto de una jugada colectiva entre Roberto Firmino y Phillipe Coutinho a los 69'.

El actual jugador del Barcelona se fue en solitario por la banda izquierda tras el pase del volante del Liverpool. Al final, Coutinho soltó un tiro cruzado que terminó batiendo a Lindner, y que selló un expresivo marcador en el último apronte de Brasil antes de su debut en el Mundial.

Un equipo sin límites

Ante la victoria, el diagnóstico es alentador para el entrenador del seleccionado brasileño. De hecho, Tite sostuvo que la demostración de sus dirigidos ante el cuadro austriaco dejó en claro que se encuentran "superando etapas y fases de consolidación", donde "las triangulaciones y el juego en corto ha ido minando al equipo contrario".

Asimismo, el estratega del "Scratch" afirmó que le gustaría ganar el Mundial, pero que en este proceso las cosas van paso a paso, aunque no ocultó que "sueño con tener la copa".

Neymar también tuvo palabras para su regreso con la camiseta de Brasil, afirmando que "me siento bien por haber vuelto al campo (no jugaba desde febrero por una lesión), por marcar un gol, también por los 55 goles en la selección. Estamos preparados (para el Mundial)".

Dichos que fueron reafirmados por la convicción del capitán brasileño ante Austria, el zaguero Joao Miranda, quien señaló que "el sistema defensivo también está funcionando bien. Nos sentimos preparados para la Copa del Mundo".

Rafael Nadal se quedó con su undécimo Roland Garros

Todas las apuestas estaban a su favor y Rafael Nadal no defraudó. El manacorí nuevamente dejó en evidencia que es el dominador absoluto de la arcilla de París, ya que se quedó por undécima vez con el torneo de Roland Garros.

El hispano enfrentaba ayer a un motivado Dominic Thiem, quien hizo lo que pudo para poder frenar el récord obtenido por Nadal, que igualó la marca del tenista Ken Rosewall, quien entre 1960 y 1973 se impuso también en 11 ocasiones en un Grand Slam, el Abierto de Australia.

El encuentro fue dominado de principio a fin por el ibérico, quien optó por un juego de fondo con pelotas altas, lo cual no pudo ser contrarrestado por el austríaco, que caía víctima de continuos errores no forzados.De esta manera, Nadal se quedó con la primera manga por 6-4.

En el segundo set, el hispano subió la intensidad de su tenis y logró dos quiebres fundamentales para quedarse con el segundo parcial por 6-3.

Sin embargo, a la altura del tercer set comenzaron los problemas para el actual número 1 del ranking de la ATP. Esta vez, fueron calambres en su mano izquierda los que lo obligaron a ser atendido por el fisioterapeuta del torneo.

Pero el continuo dolor no fue un impedimento mayor para el manacorí, ya que luego siguió con su buen nivel y cerró con un 6-2 la nueva victoria en el torneo parisino, en sólo dos horas y 24 minutos, sin ceder ningún set, tal como en las finales de los años 2008, 2010, 2013 y 2017.

Un gran agradecimiento

Luego de la contienda y de recibir nuevamente el galardón en la pista central Philippe-Chatrier, Rafael Nadal señaló que "es increíble lo que me pasa aquí. No sabría como explicarlo. Pase lo que me pase, siento que puedo superarlo. Ganar una vez aquí es un sueño y no sé explicar qué siento al ganar once veces".

El manacorí se dio incluso el tiempo de reconocer el papel de su rival en la final del prestigioso torneo, señalando que la instancia decisiva lo exigió al máximo debido al nivel de tenis de Thiem, actual número 7° del ranking mundial.

"Dominic ha jugado muy bien y ha hecho un Grand Slam magnífico, se merecía estar aquí. La final ha sido muy dura y ha sido por culpa de su magnífico tenis. Va a ser un grande. Lo felicito a él y a todo su equipo. Para mí siempre ha sido un honor jugar contra él".

Asimismo, el oriundo de las islas Baleares reconoció que en algún momento temió por perder la final, debido a los intensos dolores que sintió en el tercer y último parcial, pero que no le impidieron imponerse.

"He tenido un momento difícil en el tercer set. He notado algo raro en mi mano y he tenido que parar, pero esto es el deporte. Fuera de ese momento, me he encontrado muy cómodo con el nivel que he dado", aseguró Nadal, que con este resultado mantiene la primera posición del escalafón mundial.

Con sus 17 Grand Slam, el mallorquín se situó ahora a tan solo tres del suizo Roger Federer, máximo ganador en la historia de estos campeonatos, siendo campeón solo una vez en la arcilla francesa.

Chile debuta con un triunfo en el Premundial

La selección chilena sub 18 de básquetbol debutó con un triunfo en el Premundial de la categoría que se desarrolla en Saint Catharines, Canadá, luego de vencer por 74-62 a Ecuador.

Sin embargo, la Roja cestera tuvo un dubitativo arranque que fue aprovechado por su rival, que comandado por los triples de Michael Moncayo y Aaron Capurro, se quedó con el primer parcial por 23-18. La efectividad ecuatoriana se mantuvo en el segundo cuarto, con un Chile que no estaba fino y que así se fue al descanso cayendo por 41-34.

Tras el entretiempo vino la recuperación del quinteto dirigido por Galo Lara, cuyo elenco comenzó a trabajar mejor en las facetas defensivas y ofensivas del juego empujado por el buen desempeño de Maxwell Lorca, Kevin Rubio e Ignacio Arroyo. Con un expresivo 20-9 en el tercer cuarto, Chile pasó al frente en el marcador, quedando por cuatro puntos arriba que aguardaban un infartante cierre de partido.

Y en el parcial decisivo apareció, una vez más, la jerarquía de los pilares del equipo nacional, y con un juego mucho más fluido la Roja logró manejar las acciones para ganar el cuarto final por 20-12, cerrando así el encuentro inaugural del certamen con un 74-62. La mejor actuación en Chile fue la de Lorca, quien sumó 20 puntos, 15 rebotes, dos robos y tres bloqueos.

Por la segunda fecha del Grupo B, el quinteto nacional se medirá esta tarde frente a Argentina, en un compromiso que reeditará la final del Campeonato Sudameriano sub 17 que se desarrolló en Lima y donde la Roja se coronó campeón.

"Ganar una vez en Francia es un sueño y no sé explicar lo que se siente al ganar once veces".

Rafael Nadal, Número 1 de la ATP"

fue el resultado del encuentro disputado ayer entre las selecciones de Brasil y de Austria. 3-0

de junio tendrá lugar el debut de Brasil en el Mundial, cuando enfrente a la selección de Suiza. 17

se impuso el quinteto dirigido por Galo Lara en el certamen que se desarrolla en Canadá. 74-62

torneos Grand Slam sumó el manacorí tras conseguir su undécimo triunfo en Roland Garros. 17

horas y 24 minutos demoró Rafael Nadal en derrotar a Dominic Thiem en la final sobre la arcilla parisina. 2