Cristián Rodríguez F.
Como parte del proceso de cierre que anunciaron hace casi un año, los dueños de la casa de antigüedades "Lagazio" -que pertenecía al anticuario porteño Humberto Lagazio, quien falleció en enero de 2017 a los 96 años- remataron ayer un total de 383 lotes, en los que se encontraban cuadros, muebles, vitrinas, comedores y diferentes piezas de porcelana.
La subasta -realizada en la tienda de calle Independencia- comenzó pasadas las 11 de la mañana con el remate de 212 lotes. Entre ellos destacaba un cuadro que pertenecía al Teatro Victoria de Valparaíso cuyo piso mínimo se fijó en siete millones de pesos. Sin embargo, pese a los esfuerzos que hizo el martillero, la valiosa obra no se logró rematar entre los asistentes de la jornada.
Lo anterior sería el reflejo de una situación que se repitió a lo largo del día: el bajo precio en que se subastaron los objetos. "Empezamos con las cosas casi todas sin un mínimo, y lamentablemente se vendieron a unos precios baratísimos que llegan a dar pena", lamentó la hija del dueño, Orietta Lagazio, quien desde que falleció su padre se hizo cargo del proceso de cierre del local.
"Nuestra intención era rematar todo, de eso se trataba, pero realmente había cosas que sé que valían cuatro veces más. Principalmente fueron cuadros los que se remataron a menos de la cuarta parte. Pero bueno, ha sido un poco triste y también doloroso, porque a pesar de poner un precio mínimo bajo pensábamos que podían ofertar más", sostuvo la hija del anticuario.
En cuanto a las expectativas de ingresos económicos que tenían con el remate -que se dividió en dos, uno a las 11:00 y el otro a las 16:00-, Orietta aseguró que "el objetivo era rematar todo, no teníamos grandes expectativas".
"Todos los hermanos sabíamos que en un remate los precios se botan. Además, la gente viene con esa intención, porque saben que estamos en un proceso de cierre", explicó la dueña, quien agregó que todos los objetos que no se subastaron serán puestos a la venta hasta el 30 de este mes.
Unas 50 personas participaron durante el remate que se realizó en la tarde. Entre los objetos que alcanzaron un mayor precio están dos cuadros del pintor nacional Pachecho Altamirano. Una de sus obras se vendió en $900 mil y la otra se remató en $1.400.000.
Otro de los objetos que también se disputó fue un escritorio estilo regencia con cajonería y bronce (foto secundaria derecha). El mueble se remató en $1.800.000. Además, entre las curiosidades se subastó un ajedrez de marfil en $300 mil y una pintura de Alfredo Helsby en $2.400.000.
Por la tarde, en tanto, se esperaba la subasta de otros dos valiosos artículos: una mesa de cristal con caballos tallados en piedra, y un antiguo piano marca Maurice Kasriel.
