Sin mayor estridencia mediática la Fundación Van Buren recordó los 150 años del nacimiento de ese notable filántropo que dedicó su vida y su fortuna al servicio de Valparaíso. Carlos Van Buren Vallejo fue en su tiempo precursor en la ayuda a las mujeres abandonadas, golpeadas y embarazadas a temprana edad, como lo recordó Inés Benítez Van Buren, presidenta de la Fundación. Así ellas "pudieron optar a una formación y educación que les permitiera en forma digna enfrentar un futuro mejor", expresó.
Hoy, de acuerdo al testamento del filántropo, esa labor y otras de ayuda social se proyectan en colaboración con diversos profesionales e instituciones de servicio como el Sanatorio Marítimo, Patronato de los SS.CC., Religiosas Adoratrices, Casa de la Cultura de Viña del Mar, María Ayuda, Colegio Carlos Cousiño e Instituto de Ciencias Religiosas de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).
Por su parte Fernando Vergara Benítez, de la Unidad de Patrimonio Histórico de la PUCV, dio a conocer los contenidos de un libro sobre la vida de Van Buren el cual "se debe entender como un acto de gratitud a uno de los más notables filántropos, uno de los más grandes benefactores, uno de los más genuinos ciudadanos chilenos, que se impuso una serie de deberes que podrían sintetizarse en un principio: servir a sus semejantes". Destacó la investigación para ese trabajo realizada por el conocido periodista de este Diario, Alfredo Larreta, hoy fallecido.
Una de las tantas obras de Van Buren es el hospital que lleva su nombre. Destruido por el terremoto de 1906 el antiguo hospital San Juan de Dios de Valparaíso, el filántropo destinó tres millones de pesos de la época para reconstruirlo con todos los adelantos de esos tiempos. Así, el apellido Van Buren es hasta hoy parte de la vida diaria de Valparaíso y la Región.
Simbólicamente, la ceremonia recordatoria del natalicio y también de los 90 años de fallecimiento de Van Buren, se realizó en la capilla del Hospital, hoy monumento nacional. Estuvieron presentes en el acto numerosos parientes del benefactor, además se sumó al homenaje un coro de familiares junto a directivos de la Fundación y sacerdotes cooperadores. El homenaje a este gran porteño es oportuno cuando el Gobierno, a través del programa "Compromiso País", llama al sector privado a cooperar en forma sistemática y organizada en la lucha contra la pobreza, que fue la gran pasión de Van Buren.
El caso de este hombre nacido en el siglo XIX, que presidió un banco y que reunió una gran fortuna, es un ejemplo precursor que se proyecta en el tiempo, tanto en el conocido hospital que lleva su nombre, como en la Fundación que sigue trabajando en la línea de servicio al que dedicó décadas de su vida.