Algoritmos para predecir
Comentábamos con dos amigos acerca de la preponderancia que ha adquirido en estos tiempos el concepto "algoritmo". Todos nos encontramos con éste en forma cotidiana; por ejemplo, los referidos a la multiplicación o la división. Por tanto, siempre ha estado allí presente a nuestro lado. En un buscador podemos leer que es "un conjunto ordenado y finito de operaciones simples a través del cual podemos hallar la solución a un problema". Usted puede explorar cuanto desee saber, hablar con un matemático u otro experto, para dimensionar porqué se produce esta creciente presencia de los algoritmos en nuestra vida. Lo puede encontrar en las noticias de cada día, en los debates sobre manejo de datos en grandes volúmenes, sobre impactos probables en procesos políticos de grandes potencias. Más aún, pensadores que tratan de configurar o explorar el futuro los tienen como esenciales. Unamos esto con lo que ya parece ser una "avalancha": el cambio tecnológico, la informática, la biotecnología, la inteligencia artificial.
Leyendo un artículo del Financial Times en el diario La Segunda del jueves pasado, aprecio un caso interesante y que provoca un apetito por dimensionar el impacto de lo que comento tan superficialmente. Se refiere a "cómo los algoritmos predicen las jugadas de los futbolistas" (denominado ghosting). "Solíamos escuchar que el fútbol era demasiado complejo y fluido para aplicarle datos, pero ya no en estos días", dice el director de una firma analítica de fútbol. Esto implica el análisis científico de datos que impacta en los resultados de los equipos, sino que también influye en la forma como se hacen las contrataciones de talentos. El artículo hace referencia a un sistema para calcular probabilidades sobre diversos aspectos; por ejemplo: "la probabilidad de que un tiro se marque, según la distancia y el ángulo de la portería". Otros aspectos, la importancia del contexto o las variables que influyen en las decisiones del jugador, como la presión sobre el jugador.
Lo anotado sólo pretende ilustrar acerca de las nuevas fronteras de la anticipación, de la predicción, de la apreciación de las conductas humanas. En muchos campos de la existencia humana adquiere gran valor la acumulación ordenada de datos que pueden ser procesados en busca de objetivos pretendidos, imaginar nuevas preguntas no pensadas antes, y, seguramente, relevar la información de las conductas históricas de las personas. ¿Se podrá construir un símil entre los jugadores de fútbol comentados en el artículo y los políticos o pretendientes a participar en cargos de elección popular? Lo que parece inescapable es la acumulación de datos en gran escala y la capacidad desarrollada para un análisis cada vez más sofisticado. Deben haber algoritmos en construcción en muchas mentes preparadas.
Bernardo Donoso Riveros
Profesor Emérito de la PUCV