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ENTREVISTA. Frank Sauerbaum, diputado (RN):

"No se puede legislar en materia laboral como en el siglo XVIII y en plena revolución industrial"

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Paola Passig

"Este proyecto de las 40 horas es una mentira; sus autores saben que sí o sí va a llegar al Tribunal Constitucional y será desechado", remarca el diputado y miembro de la Comisión de Trabajo, Frank Sauerbaum (RN), descartando de plano un eventual apoyo por parte de la tienda a la propuesta de Camila Vallejo (PC) de rebajar la jornada horaria de 45 a 40 horas.

- ¿Por qué?

- En la comisión nos abstuvimos de aprobar este proyecto. Y no sólo porque es inconstitucional. Nosotros hicimos una advertencia en noviembre de 2018, entregando el informe que nos dio la Dipres. Allí claramente se establecía que era inconstitucional porque irrogaba gasto fiscal, ya que en el aparato estatal hay al menos 4.500 trabajadores que dependen del código laboral. Hicimos la observación, pero como la Comisión de Trabajo está presidida por el Frente Amplio y la oposición tiene mayoría, poco importan los argumentos, más bien importa la ideología con la que se ha querido impregnar no sólo esta reforma, sino que la de pensiones. Nos abstuvimos también porque creemos que es insuficiente y no se hace cargo de la realidad laboral que hay en Chile. No sólo existe una forma de trabajo y no sólo existe Santiago, porque el principal argumento era que los trabajadores en esa ciudad se demoran mucho en llegar al trabajo y regresar a sus casas. Nosotros vivimos en regiones y tenemos una visión distinta.

- ¿Cuál?

- Creemos que la flexibilidad laboral que el Gobierno ofrece, a través del Senado, resuelve un problema gravitante y respeta la libertad de las personas. Existe una nueva realidad laboral, donde hay una población más joven, millenium, que no tiene el compromiso laboral que tenían nuestros abuelos, que trabajaban toda su vida en una empresa. Hoy, en cambio, los jóvenes quieren estar permanentemente cambiando, trabajando por horas, trabajando desde sus casas, tratando de tener la mayor cantidad de tiempo libre.

- Pero el proyecto de Camila Vallejo instaló en la agenda la importancia de la rebaja horaria. El ministro Monckeberg reconoció que estaba abierto a fusionar las iniciativas.

- No nos negamos a fusionar. Obviamente, el PC quiere hacer el punto político de que ellos pusieron el tema en discusión y a mí, en lo personal, me da lo mismo. Lo importante es que hagamos un buen proyecto para el país, que se haga cargo del mercado laboral distinto y que se haga cargo de la realidad de los problemas que le va a generar a la pequeña empresa una modificación exabrupta. Por eso el Gobierno ofrece un proyecto gradual para que el mercado laboral se vaya ajustando y las pequeñas empresas no se vean afectadas por el desempleo. No nos olvidemos que ese proyecto, así como está, trae un gasto inmediato a las empresas del 11% en las remuneraciones; y tal como está la economía, no estamos en condiciones de soportarlo. Por eso hay que aprobar un proyecto mesurado y consensuado. Hay que avanzar en esa línea. Es un tema demasiado técnico como para que los criterios políticos se impongan.

- Para la DC, el gran riesgo es que todo esto termine en suma cero. Con un PC que se quede en la bandera y se niegue a llegar a acuerdos y el Gobierno acudiendo al TC ganando por secretaria.

- Nosotros ya hicimos reserva de constitucionalidad en la comisión, así que el Gobierno ni siquiera la va a tener que hacer. Creo que hay que mejorar los ánimos de discusión en el Congreso en general. Vemos mucha animosidad y por hacer el punto político podemos terminar perjudicando a los trabajadores y al débil crecimiento que estamos teniendo. Hay que llamar a la prudencia y a la cordura. Y si el PC sigue empecinado en hacer su punto, y hablo del PC porque el proyecto está firmado sólo por comunistas, me parece un error. Nosotros somos partidarios de rebajar la jornada, pero con flexibilización y llegar a las 41 horas. La encuesta Cadem establece que eso es lo que quiere la gran mayoría de los chilenos.

- ¿En RN hay una mayor apertura a aprobar la propuesta de Vallejo? Su timonel, Mario Desbordes, sostuvo que es un error estratégico seguir enfrentándose a Camila Vallejo por las "40 horas".

- A ver, lo que pasa es que todos estamos de acuerdo con la rebaja horaria. Lo que ocurre es que cuando el Gobierno presentó el proyecto en el Senado la bancada de RN no tenía claridad. Nosotros, como miembros de la comisión, sí sabíamos que el proyecto era paralelo al de Camila Vallejo, pero claramente hay una tendencia en RN de buscar la rebaja horaria. El proyecto del PC no se hace cargo de la realidad y el acuerdo con el empleador es vital para que se logre una real satisfacción. Me parece fundamental, por ejemplo, que si no quieres que te paguen las horas extras puedas sumarlas a las vacaciones. Ahora, claramente el PC piensa en esta cosa de masa cuando en Chile apenas el 8% está sindicalizado. Y eso no es casualidad y es porque la gente se hace cargo de sus propios problemas.

- Entre la propuesta de Vallejo y el Gobierno hay una hora de diferencia.

- La izquierda va a insistir para hacer su punto político y poco le importa si va a funcionar o no. Si hubiera una real intención de avanzar reconocerían que no tienen iniciativa legal en esto y se sentarían a conversar para llegar a un acuerdo, pero no veo ninguna intención del PC de avanzar en esta materia. Ellos quieren instalar la bandera de que quieren una rebaja horaria y por eso no van a flexibilizar su posición. Insistirán hasta el final, así como lo hicieron con el proyecto de las pensiones con el No más AFP. Y eso se les cayó porque las AFP tienen miles de defectos, pero en materia de rentabilidad hicieron su trabajo. Entonces, hay poco ánimo de avanzar de parte del PC, pero hay otras fuerzas, como la DC, el PR, el PPD y algunos PS, que tienen interés en avanzar y el Gobierno se tiene que entender con ellos.

- Respecto a la flexibilidad se señala que el proyecto tiene una mirada idealista del mercado laboral, porque al momento de negociar esa flexibilidad, siempre el empleador tiene una ventaja.

- Efectivamente, esta debe ser una reforma que tenga esos cuidados. Hay una diferencia entre los poderes de negociación del empleador y el trabajador. Esa es una realidad.A mí me llama la atención que los chilenos prefieran no sindicalizarse y eso da cuenta que los chilenos quieren hacerse cargo de su propio problema en forma individual. Por ejemplo, puede haber mamás que deben ir a buscar a sus hijos a las 4 o que quieran tener las tardes de los viernes libres y prefieran trabajar 4 por 3; y quizás a los más jóvenes les va a convenir trabajar más horas y ganar más plata. No podemos seguir legislando en materia laboral como si estuviéramos en el siglo XVIII, con una reciente revolución industrial, cuando el mundo ha cambiado.

- La timonel de la UDI criticó que el Gobierno se haya puesto de rodillas ante la izquierda.

- Quizás ella no conoció el fondo de la decisión en la comisión, pero los integrantes de la UDI también comparten que hay que hacer una rebaja horaria de forma gradual, coincidiendo con la propuesta del Gobierno. Una propuesta que se hace cargo de la nueva realidad laboral y nosotros estamos de acuerdo con eso. Creemos que el Gobierno tiene que estar dispuesto a avanzar y el PC flexibilizar sus posiciones más extremas. El Gobierno ha demostrado que tiene capacidad de avanzar, aunque haya un grupito que esté en permanente negación a los acuerdos.

"Hay que aprobar un proyecto mesurado y consensuado. Hay que avanzar en esa línea. Este es un tema demasiado técnico como para que los criterios políticos se impongan" "La izquierda va a insistir para hacer su punto político y poco le importa si va a funcionar o no. Si hubiera una real intención de avanzar reconocerían que no tienen iniciativa legal en esto"

"Sabiendo que la reserva de constitucionalidad ya la presentamos en la Comisión de Trabajo, el PC debiera estar más abierto a conversar y a buscar un acuerdo"